Las nuevas tecnologías han generado grandes cambios en la educación, reemplazando el modelo tradicional donde los docentes transmitían conocimiento de forma pasiva a uno donde docentes y estudiantes aprenden juntos en un entorno colaborativo. Este nuevo paradigma educativo fomenta el trabajo en equipo, la creatividad y el interés de los estudiantes, mejorando sus niveles de autoestima y aprendizaje.