El informe destaca la importancia de los primeros años de la infancia (0 a 8 años) para el desarrollo de la alfabetización. Reconoce que los niños tienen diferentes niveles de competencia y que es necesario identificar las habilidades individuales. Recomienda que los maestros expongan a los niños a una variedad de materiales impresos, libros y métodos de enseñanza como la lectura en voz alta para apoyar el aprendizaje. Además, señala que la instrucción debe adaptarse al nivel de desarrollo