Las salsas se pueden clasificar en salsas madres y salsas derivadas. Las salsas madres incluyen cinco salsas calientes principales (española, demi glace, de tomate, bechamel y velouté) y salsas emulsionadas frías como la mayonesa y la holandesa. Las salsas derivadas se desarrollan a partir de las salsas madres mediante la adición de ingredientes como especias, verduras o carnes.