Este documento describe los diferentes métodos para entrar al agua de forma segura como socorrista acuático, dependiendo de factores como la profundidad, la presencia de material auxiliar y la ubicación del accidentado. Explica la importancia de la precaución y la protección de la cabeza, y detalla varias técnicas de entrada a pie, de manos y con equipo como aletas, tubo o ropa, con el objetivo de facilitar un rescate rápido y seguro.
Es muy útil para poner a salvo heridos en una situación de peligro, sacarlos de espacios confinados, colocarlos en una camilla o para su traslado en una ambulancia.
Es muy útil para poner a salvo heridos en una situación de peligro, sacarlos de espacios confinados, colocarlos en una camilla o para su traslado en una ambulancia.
Este pequeño resumen, habla acerca de la enseñanza de la natación por etapas, para tener un mejor objetivo en el proceso de un nuevo alumno a aprender.
Algunas actividades y trabajos con el enfoque a el medio acuático y la educación física, teniendo en cuenta sesión y estilo del medio acuático, esto para explicar mejor una de las maneras en las que se puede enseñar a aprender los diferentes estilos de natación, con un enfoque recreativo y adecuado para los niños.
1. T. 5. BLOQUE 2: LA ENTRADA EN EL AGUA
DEFINICIÓN: En Salvamento Acuático la entrada en el agua consiste,
básicamente, en la acción que efectúa el socorrista acuático entre su
desplazamiento terrestre y su desplazamiento acuático, entendido como una
aproximación a la persona con problemas y con el objetivo principal de
realizar el rescate en las mejores condiciones posibles. Existen diferentes
formas de entrar al agua y el socorrista acuático debe conocerlas todas, ya
que utilizará la más adecuada en cada caso.
La principal regla que el socorrista acuático debe cumplir en toda entrada al
agua ante cualquier intervención se resume en una palabra: PRECAUCIÓN,
para evitar al máximo cualquier tipo de accidente que dificulte o impida la
realización del rescate. De cualquier forma, tener precaución ante la entrada
no debe significar un retraso excesivo en el rescate del accidentado, por lo
que podemos ver que son muchos los aspectos a tener en cuenta.
Esta fase es vital para la rapidez y seguridad del rescate.
1. OBJETIVOS DE UNA CORRECTA ENTRADA AL AGUA
• Facilitar la seguridad del socorrista acuático. Son necesarias las siguientes
normas para su seguridad:
Buscar un apoyo firme para el impulso.
Si hay que saltar asegurarse de que en el lugar (bajo el agua) no
haya nada ni nadie.
Si es posible la entrada se hará siempre por el mismo lugar o se
saltará desde lugares conocidos y donde se haya practicado la
misma.
Si la entrada elegida es de difícil ejecución hay que extremar el
cuidado
Ante cualquier entrada elegida, lo más importante es la
protección de la cabeza y el cuello.
• Conseguir hacerlo en el menor tiempo posible.
2. • Permitir la seguridad del accidentado, sobre todo si éste se encuentra
próximo.
• Asegurar el control del rescate desde el comienzo, evitando o dominando
cualquier imprevisto.
2. FACTORES A TENER EN CUENTA PARA ELEGIR LA ENTRADA EN EL
AGUA
• El estado del accidentado (consciente, inconsciente, tranquilo, nervioso...)
determinará la utilización de material. Es la referencia principal.
• Las circunstancias del entorno:
Altura desde donde se va a lanzar el socorrista.
Temperatura del agua. Puede ser necesario vestir traje adecuado si la
temperatura es muy fría.
Profundidad del agua. Ésta afecta a la técnica de entrada.
Claridad del agua. Si el agua está turbia, se tomarán todas las
precauciones posibles, pues desconocemos el fondo y la profundidad.
Las turbulencias del agua pueden representar un problema para realizar
algún tipo de entrada
3. • La distancia y la profundidad a la que se encuentra el accidentado.
• Las circunstancias en las que se encuentra el socorrista, como si lleva o no
material de rescate.
3. ENTRADAS AL AGUA SIN MATERIAL AUXILIAR
3.1. ENTRADA DE PIE
• En POSICIÓN DE PROTECCIÓN Y HUNDIÉNDOSE. Con el cuerpo extendido
y los brazos pegados. Los brazos se cruzan sobre el pecho para llevarlos al
hombro contrario. También se pueden poner pegados al cuerpo o extendidos
por encima de la cabeza. Si hay mucha altura podemos taponar la nariz.
Se utiliza cuando se quiere adquirir profundidad inmediata, en lugares de
gran profundidad (3 m ó más) y desde alturas elevadas (3 m ó más).
Permite una protección casi completa, un gran control del cuerpo y se
adquiere profundidad casi inmediata. Si no deseamos adquirir profundidad
debemos abrir los brazos inmediatamente dentro del agua.
4. • En posición abierta y sin hundirse. PASO DE GIGANTE. Nuestro cuerpo debe
ofrecer la mayor superficie de contacto con el agua. Brazos y piernas abiertas
y cuerpo echado hacia delante. Al entrar en contacto con el agua los brazos
hacen un potente movimiento de braza. Puede ser con una pierna delante y
otra detrás.
Se utiliza para entradas en las que el borde desde el que se sale esté próximo
al agua y en lugares de escasa profundidad. Se puede realizar con material
manejable en las manos.
Permite recoger de forma inmediata al accidentado si éste se halla próximo y
evita el hundimiento del cuerpo y mantener la cabeza por encima de la
superficie del agua.
3.2. ENTRADA DE MANOS
5. • En AGUJERO. La barbilla debe estar pegada al tórax. Todo el cuerpo entra
por el "agujero" que hacen las manos. Se entra oblicuamente.
Permite conseguir profundidad y distancia sin realizar movimientos
propulsivos y protege la cabeza con las manos. Facilita la puesta en acción
del estilo de natación elegido.
Se utiliza para entradas desde lugares no muy elevados (hasta 3 m) y al
menos 2 m de profundidad. Se puede realizar con material manejable. Éste
se puede llevar sujeto con las piernas (con la cuerda por detrás) o en las
manos (en este caso se lanza hacia delante o hacia atrás y a un lado en la
fase de vuelo). Tiene el inconveniente de que al sumergirse la cabeza se
pierde durante un tiempo la visión del accidentado, por lo que es importante
que este factor no sea vital en el rescate.
• En CARPA. Barbilla al pecho. Manos y pies entran en contacto con el agua
al mismo tiempo.. En la fase de vuelo se realiza una flexión de cadera de
forma que el cuerpo forme una V invertida.
Permite no adquirir gran profundidad a la vez que protegemos la cabeza con
las manos. Facilita la puesta en acción del estilo de natación elegido.
Se utiliza para entradas desde lugares no muy elevados (1-2 m) y con
profundidad suficiente (1,5 m). Tiene el inconveniente de que al sumergirse
la cabeza se pierde durante un tiempo la visión del accidentado, por lo que es
importante que este factor no sea vital en el rescate.
• De manos en SALTO DESDE ALTURA. Se realiza sin apenas impulso,
desequilibrando el cuerpo hacia delante manteniendo la posición. Los brazos
se colocan en prolongación del tronco. Las manos se colocan una sobre la
6. otra de forma que se entra en el agua con las palmas. En esta ocasión no se
pega la barbilla al pecho, pues al ser un salto desde una gran altura (más de
3 m) el golpe del agua sobre la cabeza en esa posición nos haría daño.
Se utiliza con una profundidad que debe ser de más de 4 m y el salto
también debe hacerse desde lugares elevados (más de 3 metros).
Tiene el inconveniente de que al sumergirse la cabeza se pierde durante un
tiempo la visión del accidentado, por lo que es importante que este factor no
sea vital en el rescate.
Hay que conocer el fondo, y si no queremos profundizar mucho hay que
modificar la posición al entrar al agua.
Permite una protección total de la cabeza con las manos, control absoluto
sobre el cuerpo y se adquiere profundidad inmediatamente.
4. ENTRADAS AL AGUA CON MATERIAL AUXILIAR
4.1. CON ALETAS:
- En pie, posición abierta y sin hundirse (paso de gigante). Para escasa
profundidad.
- Entrada de manos en agujero. Igual que sin material, pero apoyando el pie
dejando la parte anterior y la pala de la aleta sobresaliendo del borde. Para
profundidades de 2m mínimo y desde una altura máxima de 3m.
- Cuando se va a hacer desde la playa, se entrará al agua y se colocarán las
aletas después siempre mirando hacia el lugar donde se encuentre el
accidentado.
7. 4.2. CON ALETAS, GAFAS Y TUBO
- En pie, posición abierta y sin hundirse. Las manos sujetan y protegen las
gafas y el tubo.
- Con volteo hacia delante. Situados en el borde, una mano sujeta las gafas y
la otra el tubo. Nos dejamos caer hacia delante manteniendo la posición. Se
utiliza para entradas desde una embarcación o desde plataformas cercanas al
agua.
Una vez en el agua y en la superficie se realiza una espiración profunda para
sacar el agua del tubo.
5. ENTRADAS AL AGUA CON MATERIAL DE SALVAMENTO
5.1. CON ARO SALVAVIDAS
Cuando se va a entrar al agua con material de gran tamaño (aro salvavidas)
o difícil manejo, se lanzará antes de la entrada al agua hacia un lugar por el
que se pasará en el trayecto hacia el accidentado.
8. 5.2. CON BRAZO DE RESCATE
- De pie: Con el brazo de rescate en el pecho y sujetándolo con los dos
brazos. Realizamos el paso de gigante para no hundirnos. Las manos se fijan
en el centro del material.
- De manos: Si llevamos el material en la mano, lo lanzaremos a un lado al
tiempo que saltamos teniendo cuidado de los enganchones que pueden
provocar accidentes.
9. 5.3. CON BOYA TORPEDO
Entraremos al agua con él en la mano cogido por una de sus asas, o bien
saltaré a la vez que lo suelto en el aire.
RESCATE CON ROPA
Cuando nos encontramos sin material de rescate la ropa nos puede servir
facilitándonos la operación de remolque del accidentado. Es importantísimo
conocer la técnica para quitarse la ropa dentro del agua:
- mantener la calma;
- quitarse una prenda cada vez tomando aire suficiente entre cada prenda;
10. - evitar los movimientos bruscos;
- adoptar una posición agrupada para quitarse las prendas más complicadas
(pantalones).
a) Con accidentado consciente: el socorrista entrega un extremo de la prenda
sin acercarse demasiado al accidentado, eliminando el riesgo de contacto
directo.
b) Con accidentado inconsciente: el socorrista se asegura que el accidentado
tenga las vías respiratorias fuera del agua y seguidamente pasa la prenda
cruzando el pecho y por las axilas del accidentado. Con una o dos manos los
agarrará para realizar el remolque.
Se debe valorar si conviene quitarse o no la ropa antes de tirarse al agua,
pues estudios han demostrado que, aún sumando el tiempo que se tarda en
quitársela, se tarda menos en la aproximación al accidentado que nadando
con ella puesta. Por otro lado, como hemos visto, nos puede servir de
elemento auxiliar para el rescate, además de conservar el calor del cuerpo si
el agua está fría.
Esta duda no existe con las prendas de neopreno de 2-3mm, que favorecen
la flotabilidad, disminuyen la resistencia y conservan el calor del cuerpo (los
de mayor grosor dificultan las acciones de nado y remolque).