La Corte Suprema de Justicia estableció las pautas para configurar un despido justificado por tardanzas reiteradas: 1) debe existir falta de diligencia del trabajador al llegar tarde repetidamente, 2) las tardanzas deben ser continuas, y 3) el empleador debe haber sancionado previamente al trabajador por las mismas a través de amonestaciones o suspensiones.