Este documento describe el trastorno oposicionista desafiante, un patrón de comportamiento negativista, desafiante y hostil hacia figuras de autoridad que dura al menos 6 meses. Los niños con este trastorno muestran terquedad, resistencia a órdenes e intolerancia a compromisos. Las estrategias para controlar la conducta incluyen reconocer comportamientos apropiados, ignorar los negativos, escuchar sus razones y ser consistente sin competir ni usar separación como respuesta.