Los criterios de hospitalización para la tos ferina incluyen a cualquier lactante menor de 3 meses y mayores de 3 meses que presenten tos paroxística que les impida alimentarse o dormir, tos con cianosis, deshidratación moderada a severa, dificultad respiratoria entre accesos o compromiso del sensorio. El tratamiento general consiste en hidratación y nutrición adecuadas para evitar la aspiración de secreciones.