La internacionalización de las empresas presenta ventajas y desventajas. Las principales ventajas incluyen utilizar toda la capacidad productiva, lograr economías de escala y ventajas competitivas en la producción, racionalizar óptimamente la producción de los factores, acceder a un mercado más amplio y estar más cerca de los clientes en la comercialización, y diversificar el riesgo y acceder a financiamiento internacional en las finanzas.