La pandemia del Covid-19 ha tenido un gran impacto en la salud mundial y la economía, obligando a muchos países a implementar cuarentenas y aislamiento social. Esto ha forzado a la industria farmacéutica a redistribuir sus recursos para satisfacer la demanda de medicinas para pacientes graves en hospitales de todo el mundo, al mismo tiempo que acelerar el desarrollo de tratamientos y vacunas contra el Covid-19. Cuando los gobiernos declararon emergencia nacional en marzo de 2020, los ciudadanos se dirigieron masivamente