Cinco razones o motivos para no retrasar más el curso de dirección.

2. 1.- Es muy rentable
Debes tener claro y ser consciente sin ninguna
duda, que es el mejor dinero que puedes
gastar o más bien, invertir.
Será la inversión que más satisfacciones e
ingresos te proporcionará. Las repercusiones
son incalculables, tanto en rendimiento tuyo,
como en el de tus colaboradores. Los
beneficios adquiridos con esta formación, se
transmiten culturalmente de generación en
generación.

3. 2. Nos marca el rumbo.
Es como un guión de cómo llegar a donde
queremos, de cómo conseguir el objetivo que
nos hemos marcado. Nos ahorra mucho
tiempo, evitándonos rodeos y caminos mal
tomados. Nos proporciona seguridad de lo que
estamos haciendo, de las decisiones que
tomamos: por qué estoy haciendo esto y no lo
otro.

4. 3.-Nos diferencia de los
demás.
Nos hace más competitivos. Nos proporciona
armas que sólo nosotros sabremos utilizar,
personales.

5. 4.-Nos mantiene actualizados
Aunque no lo parezca, todo se puede
actualizar, incluso la forma de dirigir.
Los valores cambian o alternan su posición y
debemos estar al día.
Esto también se puede aprender observando
lo que ocurre a nuestro alrededor, pero: ¿Por
qué no ser uno de los primeros en aplicar esas
actualizaciones?

6. 5.- Estamos comprometidos
Si algo no marcha bien, ha de ser por causas
ajenas a nosotros mismos, nunca por falta de
preparación.
Este compromiso se lo debemos a las personas
que confían en nosotros, sean colaboradores
o clientes.
Con estos cinco puntos comprendidos, debería
ser suficiente para decidirnos a realizar de
inmediato un curso de dirección.