Esta lección nos ayuda a identificar y combatir la barreras que impiden la inclusión y el acercamiento de los seres humanos a ser participes de los bienes de gracia que por derecho nos asisten al ser creados, en igualdad de condiciones, a imagen y semejanza de Dios. El favor y las bendiciones de Dios nos son exclusivas a unos pocos. Por ello, los beneficios de su gracia tienen que ser impartidos con carácter inclusivo en tiempo, espacio, nacionalidad y lengua.