Este documento describe el cambio de paradigma en el rol de los profesionales de la salud pública desde un modelo asistencialista y médico hacia un modelo basado en los derechos de los ciudadanos. Se enfatiza la importancia de la promoción de la salud, prevención de enfermedades, y atención integral a nivel comunitario. También se discute la necesidad de preparar a los nuevos profesionales con competencias acordes a este cambio, como trabajo en equipo interdisciplinario y énfasis en la epidemiología aplicada.