2. Autor: Pablo en el año 57 aproximadamente.
La Comunidad: Fue fundada por Pablo en
su segundo viaje misionero, en medio de
persecuciones.
3. FINALIDAD
Es el testimonio de un sentir gozoso y de mutua
gratitud: de Pablo hacia los filipenses, que lo habían
socorrido en momentos muy difíciles para él; y de
los filipenses hacia Pablo, agradecidos por la labor
que entre ellos había realizado.
4. ESTRUCTURA DE LA CARTA
Desde la acción de gracias inicial (1.3–11), dos notas predominan
en la epístola: el gozo que caracteriza a una fe madura, y el amor de
Pablo a la iglesia de Filipos. Esas notas son, sin duda, una hermosa
lección de esperanza, impartida por el autor en medio de las
penalidades físicas y morales de su cautiverio.
5. 1.12–26: Pablo da testimonio de que incluso la cárcel brinda
oportunidades de anunciar el evangelio (1.12–14). Y reflexiona acerca
de su ministerio apostólico, al que seguirá consagrado «tanto si vivo
como si muero» (1.20) en tanto le llega la hora «de partir y estar con
Cristo, lo cual es muchísimo mejor» (1.23). Porque para Pablo «el vivir
es Cristo y el morir, ganancia» (1.21).
6. 1.27–2.18: Este pasaje contiene una declaración fundamental de la
fe cristiana: un himno (2.5–11) dedicado al Hijo de Dios preexistente
y eterno, a Cristo Jesús: Él siendo en forma de Dios... se hizo
semejante a los hombres,... se humilló a sí mismo... hasta la muerte, y
muerte de cruz». Por su obediencia, «Dios también lo exaltó sobre
todas las cosas», para ser reconocido y adorado universalmente como
Señor
7. 2.19–30: Sigue una referencia personal a Timoteo y
Epafrodito, colaboradores del apóstol. Al primero, espera enviarlo
pronto a Filipos (2.19), y acerca del segundo, explica el porqué de
haberlo enviado ya (2.25–30). Además, él también confía en estar
pronto en condiciones de visitar a los creyentes de la ciudad (1.19;
2.24).
8. 3.1–4.1: Hace también una enérgica llamada de atención a la
presencia en Filipos de «muchos... que son enemigos de la cruz de
Cristo» (3.18). Parece seguro que también a Macedonia habían llegado
algunos maestros judaizantes que, con su insistencia en mantener
vigente la Ley de Moisés y especialmente la práctica de la
circuncisión, perturbaban la fe de los cristianos de origen gentil.
9. 4.2–9: La alegría de la salvación ha de ser una constante en la vida
del cristiano (4.4). Pablo exhorta a los creyentes a confiar plenamente
en el Señor, que está cerca (4.5), y a pensar y actuar de manera
siempre digna de alabanza (4.8).
10. 4.10–20: Insiste en manifestar su agradecimiento por la solicitud
con que los filipenses le habían atendido en diversas ocasiones, en
momentos de tribulación en los que otros parecían haberse olvidado
de él (4.15).