Autor: ING. ALBERTO ESCOFET ARTIGAS Fecha: 1981-07-23

1. EL SECTOR ELECTRICO MEXICANO. RETO DEL FUTURO
TRABAJO QUE PRESENTA EL SEÑOR INGENIERO
ALBERTO ESCOFET ARTIGAS, PARA INGRESAR
COMO ACADEMICO DE NUMERO A LA ACADEMIA
MEXICANA DE INGENIERIA
810723

2. EL SECTOR ELECTRICO MEXICANO. RETO DEL FUTURO
México es uno de los países que ha sostenido du-
rante un largo período una alta tasa de crecimiento en la-
utilización de la energía eléctrica. De hecho se ha mante
nido en el rango de 10% de incremento anual promedio aún -
con las oscilaciones cíclicas que se presentan en el país.
Esta tasa de crecimiento es consecuencia de dos factores -
principalmente: uno, el alto ritmo de desarrollo indus- -
trial para la próducción, fundamentalmente de materiales -
de primera transformación que son a su vez usados para una
relativamente reducida industria de bienes de capital y de
productos de consumo; otro, el crecimiento demográfico -
que se sitúa recientemente en las fronteras de un 3% por -
año. Como consecuencia, el numero de usuarios domésticos-
de energía eléctrica crece a un ritmo cercano al 7% anual.
La combinación de estos factores obliga a incre
mentar, en proporciones relativamente altas también, los -
servicios que requiere una sociedad en pleno desarrollo.
La población que se incorpora a lo que suele llamarse sis-
tema moderno de vida, demanda al principio una gran canti-
dad de servicios, para convertirse posteriormente en deman
dantes de bienes, algunos de consumo y otros de los que se
catálogan como permanentes.

3. 2.
A consecuencia de esta demanda los servicios de ti
po comercial y de pequeña industria, que podrían ser catalo-
gados como talleres de maquila para transformar materia pri-
ma en pequeños o sencillos utensilios, crecen también a una-
tasa muy considerable.
Todo ello hace que la expectativa de crecimiento -
del Sector Eléctrico Mexicano se sitúe entre dos límites re-
lativamente simples de establecer: el que podría llamarse -
limite inferior, que considera que las cosas seguirán ocu- -
rriendo como hasta ahora, con cierto grado de dificultad pa-
ra alcanzar algunas de las metas de desarrollo general fija-
das para el corto plazo y el otro, como límite superior, que
considera que somos y seremos capaces de hacer aquello que -
nos hemos propuesto para el país, que lograremos coordinar -
adecuadamente todas las actividades involucradas en los plan
teamientos de desarrollo. Estos postulados deben ser toma--
dos forzosamente como base, son la fuente donde se nutre el-
Sector Eléctrico Mexicano, para plantear las necesidades que
los usuarios del servicio eléctrico tendrán al futuro, para-
analizar las diversas alternativas que las satisfagan; formu
lar las soluciones viables en términos econ6micos reales, y-
diseñar las estrategias para llevarlas a cabo.
Estos planteamientos están contenidos en el Plan -
Global de Desarrollo que envuelve en su contexto al Plan Na-

4. 3.
cional de Desarrollo Industrial, al Programa de Energía y al
Sistema Alimentario Mexicano, que inciden en forma determi-
nante en las necesidades de energía eléctrica a futuro en -
el país, al mismo tiempo que establecen ya, lineamientos de
política energética para su desarrollo integral y equilibra
do. Partimos pues, de que el camino está señalado y las es
trategias relativas a los grandes rubros del balance energé
tico nacional están determinados. -
En consecuencia, corresponde al Sector Eléctrico,
plantear los escenarios que deberá satisfacer y definir con
precisión a qué se enfrentará y cómo lo atacará. A esto le
hemos llamado el reto del futuro.
Los estudios de necesidades de energía eléctrica-
en el país visualizan horizontes a más de 30 años. Los es-
tudios se hacen con diversas hipótesis de crecimiento, a -
fin de contemplar para los años de decisiones, que son los-
años inmediatos, las diversas alternativas de oferta y eva-
luarlas para convertir un estudio de gran visión, en un pro
grama de in&talaciones realizables; programa que satisfacien
do las necesidades del mercado a corto y largo plazo, pueden
ser hechas con los recursos económicos asequibles.
Es evidente que el reto para un organismo como la-
Comisión Federal de Electricidad, es el de satisfacer las ne

5. 4.
cesidades de un escenario alto. Es hacia ese objetivo que -
se canalizan los esfuerzos del Sector. Si somos capaces de-
satisfacer los requerimientos del mercado alto estaremos en-
mejor posición atan, para satisfacer las demandas del mercado
bajo. Si se planificara sólo cubrir el mercado bajo, queda-
rían dudas respecto a si seríamos capaces de abastecer el -
mercado alto. Las instalaciones en el campo de generación -
de electricidad son de largo período de ejecución y es por -
ello que jugar a la baja a corto plazo puede resultar, como-
en muchos terrenos, extremadamente costoso para el mediano y
largo plazo. Se ha decidido por lo tanto, que el Sector - -
Eictrico se enfrente al escenario con alta tasa de creci---
miento.
De una plataforma que contiene poco más de 16 mi--
ilones de kilowatts de capacidad efectiva en el país, con -
una producción de energía de 70 mil millones de kilowattho--
ras en 1981, arrancamos para llegar al año 2000 con un consu
mo de energía del orden de 550 mii millones de kilowatthoras,
que requerirán de una capacidad instalada superior a 100 mi-
llones de kilowatts. Es decir, el Sector Eléctrico deberá -
satisfacer en el año 2000, ocho veces la energía requerida -
en el año de 1981.- Si para alcanzar estas metas fuese facti- -
ble crecer en forma uniformemente distribuída, posiblemente-
.no se vería muy complicado, pero la realidad no es tan sim--
pie, pues el crecimiento de la demanda es exponencial. Si -
dividimos el período de lospróximos 20 años en períodos de-

6. 5.
6-7 años, para 1988 necesitaremos haber pasado de una gene-
ración de 70 mil millones a 140 mii millones de KWh; para -
1994 se requerirán 280 mii millones de kilowatthoras, el do
ble de lo necesario en 1988 y para el año 2001 se necesitan
los 350 mii millones de kilowatthoras que hemos mencionado.
Dicho en otras palabras, las necesidades de consumo de ener
gía eléctrica en el país que se han venido duplicando histÓ
ricamente cada 6 6 7 años, continuarán creciendo a ese rit-
mo por lo menos hasta la primera década del siglo XXI.
Esta explicación demasiado simple, trata sólo de -
enfatizar de manera muy directa, el verdadero reto a que se
enfrenta la Comisión Federal de Electricidad: superponer y-
agregar al sistema eléctrico nacional existente, otro de - -
igual magnitud cada 7 años. Si bien esto es algo que se ha
venido haciendo durante los últimos 40 años, es evidente -
que desde el . punto de vista de volumen la tarea es gigantes
ca. Los kilómetros de líneas de transmisión por hacer, los
transformadores, postes, cables, acometidas, medidores por-
instalar; los controles, tableros, instrumentos, relevado--
res por probar y calibrar; los cimientos, estructuras y ca-
sas de máquinas por construir, las calderas, soldaduras, -
tuberías, sistemas de agua, drenajes, sistemas anticontami-
nantes por montar; las presas, cortinas, túneles, i'nyeccio-
• nes y un sin fin más de cosas es tarea ardua.

7. 6.
Y antes que toda esa ejecución, los estudios de-
geología, de localización de sitios, tramitación, adquisi-
ción e indemnización de terrenos; los movimientos de tie--
rras, transporte de equipo, y durante la ejecución, prue--
bas çle condensidad, pruebas de concreto, análisis de sue--
los, control de calidad, aseguramiento de calidad, pruebas
de rayos X, pruebas de aceptación en fábrica, códigos a -
aplicar; normas; pruebas parciales durante montaje, prue--
bas preoperacionales, puesta en servicio, intercalación de
nuevos conceptos, nuevos sistemas operativos, más pruebas;
operación de los equipos, supervisión, mantener, revisar,-
volver a poner en servicio, volver a probar, continuar ope
rando, y así cada vez más y más. No es por abrumarlos la-
cita de estas actividades. Son, a fin de cuentas, las que
se realizan para cualquier proyecto. La problemática con-
siste en coordinarlas para varios miles de obras, grandes y
pequeñas y que todás ocurran en programa.
Sin embargo, el verdadero reto que afrontamos no
es el de la disponibilidad física de los aparatos, equipos,
agregados, materiales, varillas, estructuras y demás que -
tengan que instalarse. El verdadero reto es el disponer,-
en tiempo y forma, de los recursos humanos necesarios para
hacer todo lo que hay que hacer. Disponer en forma ordena
• da y a tiempo de los peones, albañiles, obreros, mecánicos,
soldadores, soldadoresde código, electricistas, tgcnicos,

8. 7.
sobrestantes, supervisores, inspectores que el programa de-
manda. El sector eléctrico tiene alrededor de 80 000 traba
jadores permanentes, mientras que en obras en proceso se -
ubican cerca de 100 mii más. Para el año 2000 se requeri--
rán 115 000 de aquéllos, y en obras en proceso deberán tra-
bajar más de 500 000. - Por si ello no fuera suficiente, se-
requerirá además, introducir nuevas tecnologías, nuevos sis
temas y nuevas formas de trabajo.
Hasta ahora el Sector Eléctrico Mexicano ha veni-
do utilizando para generar energía eléctrica, centrales hi-
droeléctricas, termoeléctricas "convencionales", utilizando
combustóleo y gas y turbinas de gas, usando gas o diesel co
mo combustibles. Los programas de expansión en concordan--
cia con los postulados del programa de energía para la di--
versificación energética, señalan la utilización del carbón,
de la geotermia, el desarrollo de todas las hidroeléctricas
susceptibles de ser construídas en el país y la utilización
de la energía nucleoeléctrica. Esto en adición a continuar
con grandes centrales generadoras a base de combustóleo y -
gas natural.
Todo esto requiere que, de aquello que considera-
mos clásico en MéxIco como la tecnología de las hidroeléc---
* tricas y de las termoeléctricas convencionales, pasemos a -
aplicar otras tecnologías; a tener ms geotermia a lo largo

9. 8.
y ancho del país, a utilizar masivamente el carbón corno ener
gético e incursionar en el terreno nucleoeléctrico a escala-
industrial. Esto establece a su vez la problemática de ab--
sorber las tecnologías que hasta ahora, no han sido tradicio
nales en el país.
Si bien el carbón es el combustible más antiguo de
los que actualmente se usan, en México dejó de usarse para -
ese fin hace muchos años y su uso ha estado circunscrito al-
terreno siderúrgico. Sólo una pequeña central, la de Nava, -
Coah., usada en parte como central piloto fue construída en-
los pasados 25 años. Actualmente está fuera de servicio y -
en sus inmediaciones se está construyendo la primera gran -
carboeléctrica de México, Río Escondido, con una capacidad -
de 1,200 MW. El programa de desarrollo carboeléctrico seña-
la que 9 centrales equivalentes a ésta, deberán estar en --
operación en los próximos 20 años. La dificultad en estas -
centrales estriba en el manejo de los grandes patios de car-
bón, de los transportadores, trituradoras, pulverizadoras y-
de los equipos anticontaininantes que son relativamente nue--
vos para el Sector. Queda planteada sin embargo, la verda--
dera tarea por superar, que es la de localizar y abrir en -
el curso de estos próximos 20 años de 8 a 9 minas de carbón,
- capaces de producir, cada una de ellas, 4.5 millones de to--
• neladas de carbón por año para ser convertidos en energía -
eléctrica. Al hablar de 8 6 9 minas de estas dimensiones, -

10. 9.
es necesario recordar que la producción total de carbón en-
el año de 1980 fue de 7.5 millones de toneladas, y que inde
pendienternente de las necesidades de producción carbonífera
para el crecimiento del sector siderÚrgico, tan sólo para -
el Sector Eléctrico, se requieren abrir y convertir en pro-
ductivas minas por casi 5 veces la producción total de 1980.
Esto conlieva, además del problema de localizar los mantos,
abrir y desarrollar las minas, autoinatizarlas o semiautoxna-
tizarlas, y sobre todo encontrar, seleccionar, formar, capa
citar y sustituir los recursos humanos,que en diversos nive
les, deberán participar en ello.
La generación hidroeléctrica ha sido tradicional-
en México como en muchos otros países. Todos los sistemas-
eléctricos se han desarrollado aprovechando en primera ins-
tancia los recursos hidroeléctricos. Actualmente satisface
el 35% de necesidades de energía eléctrica del país y en el
año de 1981 se estima una producción del orden de 20 mii mi
llones de kilowatthoras.
Un señalamiento específico del programa de ener-
gía establece la conveniencia de desarrollar todos los pro-
yectos hidroeléctricos posibles, a fin de disminuir la par-
ticipación de otras fuentes energéticas en la generación de
energíá eléctrica. Si bien el potencial teórico del país -

11. 10.
se sitúa en algo más de 150 mil millones de kilowatthoras-
anuales, el potencial hidroeléctrico factible en términos-
reales a desarrollarse se ha fijado en 80 mil millones de-
kilowatthoras, 4 veces la producción .de este año. Esta -
meta requerirá la construcción de nuevos proyectos princi-
palmente en las cuencas del Grijalva-Usumacinta y la solu-
ción de una serie de problemas geológicos observados en la
zona.
Las mismas características geológicas del país -
ofrecen la posibilidad de la utilización de la geotermia -
como fuente energética para generar energía eléctrica. Se
han identificado en la actualidad más de 300 sitios con ma
nifestaciones termales, teniéndose ya en operación una cen
tralde 180 mil KW en Cerro Prieto, B.C., en cuyas inmedia
clones se han detectado mantos suficientes para la instala
ción de otros 600 mil kilowatts en el curso de los próxi--
mos años. Otro sitio que tiene grandes posibilidades es -
el localizado en Los Azufres, en el Estado de Michoacán, -
en donde se han perforado más de 22 pozos con buenos resul
tados. Se estima que en este sitio se podrá instalar una-
central geoterinoeléctrica cercana a los 300 mii kilowatts-
con posibilidades de expansión hasta 600 mil kilowatts.
o El programa que el Sector Eléctrico se ha tra-

12. - 11.
zado para desarrollar en el curso de este siglo requiere la
localización y desarrollo de 7 campos como el de Cerro Prie
to actual para producir en el año 2000 del orden de 20 mii-
millones de kilowatthoras. Nuevamente se presenta para es-
te desarrollo la necesidad de contar con los recursos huina-
nos preparados para la exploración, localización, detección,
perforación y desarrólio de un Cerro Prieto cáda 3 años.
Aun cuando se considera una forma tradicional de-
producción de energía eléctrica, el crecimiento mínimo de -
centrales termoeléctricas requiere la instalación de entre-
30 y 45 millones de kilowatts adicionales de este tipo. Si
bien se dominan las disciplinas necesarias para su diseño y
su construcción, la magnitud de la tarea requiere de una -
programación detallada de los recursos humanos que deben -
intervenir en su erección. En términos generales, en la -
construcción de una termoeléctrica del orden de millones de
KW intervienen ms de dos rail trabajadores durante un perío
do de 4 a 5 años. Se cita esa cifra sólo como indicativa -
respecto de la magnitud de los recursos humanos que su desa
rroiio requiere.
Complementando la oferta de energía eléctrica, -
esta la generación mediante centrales nucieoeléctricas. Se
tiene actualmente en construcción la central Laguna Verde,-
la que habiendo pasado por ciertas vicisitudes, todas ellas

13. 12.
de carácter administrativo y no de carácter tecnológico, ha
brindado al Sector Eléctrico una invaluable experiencia res
pecto de la problemática y complejidad del diseño y cons- -
trucción de este tipo de centrales y los entreveros de apli
cac6n pacfLca de la energía nuclear.
Las necesidades energéticas del país requieren
que para fines de siglo se tengan en operación del orden de
20 millones de kilowatts en base a combustible nuclear. Tan
sólo esta tarea significarla para cualquier país., aún aque-
lbs industrializados, una empresa considerable. En México
es una tarea más que se suma a las mencionadas del desarro-
llo hidroeléctrico, carboeléctrico, geotérmico. No hay cami
nos distintos a los que se han señalado. El programa de - -
energía es claro y hace los señalamientos indicativos míni-
mos del horizonte hacia el cual nos movemos. Es posible que
haya quienes consideren que podríamos desarrollar más apri-
sa un recurso que otro y muchos propondrían en el contexto
de una pseudo no dependencia energética, el utilizar más hi
drocarburos a corto plazo. A esos sólo podría decirles que
la magnitud de la tarea que tenemos por delante es tan vas-
ta que no hay simplificación del esfuerzo. Cada uno de los
desarrollos que hemos mencionado es un reto por sí mismo.
Todos ellos combinados hacen el verdadero reto del futuro,-
'reto que hemos circunscrito en términos muy generales a la-
tarea de la Comisión Federal de Electricidad, pero que está
íntimamente ligado con el desarrollo integral del país.

14. 13.
Además de su papel de suministrador de enqrgía -
eléctrica en el país, el Sector es uno de los grandes con-
sumidores de bienes de capital si enmarcamos el programa -
comentado en el contexto de la planta, industrial que se re
quiexe para abastecerlo de materiales y equipos, se podrá-
formar una imagen del potencial que existe para un desarro
llo armónico del país. Se requerirán gran número de indus
trías que produzca7l artículos con alto contenido de tecno-
logía avanzada, de aparatos sofisticados de las mismas ca-
racterísticas de las existentes en los países industriali-
zados. El país se encuentra en el uxnbral de salir de las-
vías del desarrollo para entrar en forma plena a ser un -
país desarrollado, a participar en el concierto internacio
nal de igual a igual con los demás.
Por otra parte, la creación marginal de empleo -
que la demanda del Sector Eléctrico generará, plantea tam-
bién la dificultad de la disponibilidad y preparación de -
los recursos humanos necesarios para su producción y dis--
tribución.
El verdadero reto del futuro es el que hoy, más-
que nunca, se tiene la oportunidad de dar ese gran último-
paso para entrar de lleno a la verdadera suficiencia.
o

15. 14.
El reto pues, está puesto. Le toca a la ingenie-
ría mexicana recoger el guante y afrontarlo decididamente.
Ahora bien, si tal es el reto, ¿cuáles son las --
tácticas que se deben aplicar para salir airoso de l?
De hecho la ingeniería mexicana tiene ante sí -
uno de los trabajos más apasionantes que puedan existir.
No se trata tan sólo de determinar cuáles son las obras ne-
cesarias para satisfacer las necesidades que el desarrollo-
requiere, sino planificar en forma integral y completa las-
acciones necesarias para alcanzar el objetivo de mantener -
una of erta que satisfaga adecuadamente la demanda.
En el Sector Eléctrico se están formulando en de-
talle, las necesidades específicas de cada uno de los re-
cursos humanos que deberán participar en la ejecución de -
esta magna obra. Se están determinando los programas de ca
pacitación que, partiendo de la premisa de que los recursos
disponibles en el país, deben ser llevados a los niveles ne
cesarios para no sólo absorber las nuevas tecnologías que -
se implantarán; sino para en cierto momento, dejar de ser -
adquirentes de tecnología e iniciar el desarrollo de los -
promotores tecnológicos.

16. l.
Es tarea y empresa difícil, pero es un paso que se
está dando. Se han introducido ya, nuevos sistemas de super
visión de los ciclos operativos a modo de que aquellos traba
jadores, técnicos y profesionales que. tienen durante un pe--
ríodo de tiempc,,labores específicas en un área, cuenten con-
la preparación suficiente para al cabo de unos cuantos años,
cambiar a otra actividad en la cual, los conocimientos adgui
ridos en la anterior, aunados a su estudio continuado y a su.
preparación en nuevos campos, los convierta en generadores -
de ideas, de métodos y procedimientos que permitan mejorar -
la ejecución de sus labores. Estamos convencidos de que el-
tradicionalismo que en muchos términos se ha seguido, de que
un especialista por serlo, continúe sindolo en el mismo cam
po, ha limitado y frenado el enriquecimiento de diversas - -
disciplinas por no haber recibido aportaciones más frescas,-
provenientes de otras.
Toca ahora a la ingeniería organizada, a los cen--
tros de estudios superiores y muy particularmente a todos -
los ingenieros del país, establecer, diseñar y hacer operati
vos los vínculos de coordinación entre todos los setores -
del país, para que juntos podamos garantizarle al país que,-
lejos de toda controversia semántica, la ingeniería mexicana
que ha sido puntal indiscutible del desarrollo y prógreso -
• del país, continua siendo motor de ese desarrollo y lo seguí
rá sieñdo cada vez con más ahinco, cada vez con más vigor.

17. 16,
Es un honor, distinguidos miembros de la Academia
Mexicana de Ingeniería, el que me han hecho, al invitarme a
esta ceremonia. Es una distinción que más que enaltecer, -
obliga. Si había compromiso con las autoridades y con el -
pueblo para dedicar todo nuestro esfuerzo a cumplir la mi--
sión que como funcionario se nos ha encomendado, el señala-
miento de la Academia, me responsabiliza además como profe-
sional de la ingeniería mexicana. Eso también es un reto.
Responderé a él, tengan la seguridad, con honor.
Muchas gracias.