• Capacitar al alumno para saber gestionar la educación, el desarrollo y las derivaciones de esta dimensión biopsicosocial tan importante como es la sexualidad. • Adquirir habilidades tan diversas y complejas como pueden ser la introspección, la tolerancia, la aplicación correcta de la inteligencia socio-emocional, la empatía, la adaptación del lenguaje a las capacidades y necesidades del niño, la toma de decisiones, la definición de problemas, la pedagogía, la pro-actividad, la búsqueda creativa de ideas y soluciones innovadoras, la detección de oportunidades, la gestión de los principios de responsabilidad individual y elección.