El documento resume la historia y los principales pensadores de la sociología. Comienza describiendo que la sociología estudia las sociedades humanas y se desarrolló como disciplina académica en los siglos 18 y 19, influenciada por pensadores como Auguste Comte, Emile Durkheim y Karl Marx. Luego resume las contribuciones de varios pioneros incluyendo a Saint-Simon, Auguste Comte y Karl Marx, destacando sus ideas sobre la organización de la sociedad, el positivismo y la alienación bajo el capitalismo.
3. •La sociología es el estudio de las sociedades humanas.
Habitualmente, es clasificada como una de las ciencias
sociales y se nombró como materia independiente a
finales del S. XVIII, y especialmente en el S. XIX a partir
del trabajo de Auguste Comte.
•La disciplina solamente fue ganando aceptación
académica en el Siglo XX mediante los trabajos de
Emile Durkheim, Max Weber , Talcott Parsons y Karl
Marx (1818-1884) y otros conocidos autores de la
sociología, conocidos como: Los precursores, los
clásicos, los neoclásicos, los paradigmas actuales.
6. • Era Saint-Simon un intelectual plenamente inmerso en el ambiente de su
época, que vivió intensamente. Ya desde joven tenía consciencia de que
llegaría a realizar grandes tareas en ayuda de la humanidad. Así desde los
quince años ordenó a sus ayudantes de cámara, que lo despertaran
diciéndole: «Levántese, señor conde, tiene usted grandes cosas que
hacer» llegó a decir que fue, junto con Hegel, la mente más enciclopédica
de su época y que casi todas las ideas del socialismo posterior estaban
contenidas en su obra. También el positivismo está en sus escritos, pero
aunque la necesidad del estudio científico de la sociedad, de la política y
de la moral, fue proclamada a todos los vientos por Saint-Simon, sus
propios escritos estuvieron totalmente alejados de la búsqueda científica
tal y como ahora la entendemos.
Para Saint-Simon hay dos clases de individuos, los productores
(trabajadores, empresarios...)
7. Precursor de la «fisiología social», también llamada «física
social», rebautizada por Auguste Comte como sociología.
Industrialista utópico, vivió en la riqueza y en la más absoluta
de las pobrezas. En su opinión, los industriales, frente a los
juristas y metafísicos deberán ser los encargados de terminar
realmente la Revolución francesa, garantizando así la
prosperidad de la agricultura, comercio e industria, en
definitiva, de toda Francia.
El gran objetivo que se propuso fue reorganizar la sociedad
sobre las bases de la ciencia y la industria, para alcanzar una
sociedad sin clases por el camino de una renovación ético-
religiosa. Asimismo destaca su libro El Nuevo Cristianismo
(1825)
8.
9. En 1814 ingresa en la elitista Escuela Politécnica, de la que será expulsado en 1816,
acusado de republicanismo e indisciplina. En esta época comienza a estudiar a los
pensadores del siglo XVIII y conoce a Saint-Simon, para el que trabaja como secretario
desde 1818, hecho que le permitió publicar artículos en diversas revistas: La Politique,
L’Industrie, L’Organisateur.
La colaboración entre estos dos autores se irá deteriorando hasta su definitiva ruptura
en 1822, fecha que inicia las dos etapas fundamentales del pensamiento de A.
Comte:
La primera (1826-1845) , de un marcado carácter positivista, queda sintetizada en sus
dos grandes obras: Curso de filosofía positiva (1830-1842) y el Discurso sobre el
espíritu positivo (1844), escrito que apareció como introducción preliminar al Tratado
filosófico de astronomía popular.
La segunda etapa del pensamiento de Comte viene marcada por un hecho personal que
le afectó hondamente: la muerte en 1846 de Clotilde de Vaux, a quien conoció en 1845
y de la que estaba profundamente enamorado. A partir de entonces el pensamiento de
Comte se tiñe de un carácter romántico y místico que derivará hacia posturas cada vez
más conservadoras, convirtiendo el positivismo en una religión de la que él se
autoproclama Sumo Sacerdote.
10. • De esta época datan sus obras Sistema de política positiva (1851-1854),
Catecismo positivista (1852) y el primer volumen de Síntesis subjetiva
(1856), obra que quedó incompleta debido a su muerte, acaecida el 5 de
septiembre de 1857.
• Comte clasifica las ciencias en cinco fundamentales: astronomía, física,
química, fisiología y física social o sociología. Rechaza como ciencia a la
psicología y a la economía y concibe a las matemáticas más como un
método e instrumento previo que como ciencia teórica.
La finalidad de las ciencias es el control y el dominio de la naturaleza y la
sociedad. La búsqueda de relaciones estables entre los fenómenos deriva
en la construcción de leyes que permiten predecir el futuro: paso previo a
todo control.
Derivada de la fisiología, la sociología, como culminación del espíritu
positivo, se dedicará al estudio de los fenómenos sociales y de sus leyes
como camino para explicar la evolución de la humanidad y favorecer un
progreso controlado de la sociedad que excluya todo posible cambio o
revolución incontrolada.
11.
12.
13. • La teoría de Karl Marx tiene gran importancia en el terreno de la
Sociología porque ofrece una explicación basada en las fuerzas materiales
y económicas a los diferentes problemas que ocurren en la sociedad.
Graves problemas de las sociedades industrializadas (drogas, maltratos,
inmigración, desigualdad...) pueden recibir una explicación desde la
perspectiva marxista.
• La alienación es uno de los conceptos principales que aparecen en la obra
de Marx. Para Marx, el hombre es un ser natural. Lo propio del ser
humano no es su espíritu o su alma, sino su materia, la materia que
comparte con los demás seres de la naturaleza.
Además, el ser humano ha de relacionarse con la naturaleza, con su
medio. Para transformarla, el ser humano tiene que trabajar. El trabajo,
por tanto, forma parte de la esencia del ser humano. Es necesario para
lograr su existencia.
• A través del trabajo, los hombres humanizan la naturaleza. En primer
lugar, porque la transforman haciéndola útil para el hombre. (Por ejemplo,
una montaña que se transforma en una autovía). En segundo lugar,
porque los hombres trabajan en colaboración unos con otros.
14. El trabajo nos humaniza más porque permite la relación entre las personas. Esto significa
también que, por su esencia, el ser humano no es un ser aislado, sino un ser genérico.
Sin embargo, a pesar de que el trabajo puede hacer las relaciones más humanas, a
través del trabajo surgirá la alienación. La escasez de recursos provoca el enfrentamiento
entre los hombres, provoca las luchas. Toda la historia de la Humanidad, dice Marx en el
Manifiesto Comunista, ha sido una historia de lucha de clases.
Cuando unos hombres dominan sobre otros, el trabajo pasa a convertirse en un
instrumento de esa dominación. El trabajo deja de ser una forma de colaboración. Los
hombres experimentan el fruto de su trabajo como algo extraño, algo que no les
pertenece.
La alienación es un proceso creciente. Se ha vivido con la esclavitud, pero también y con
más fuerza con la extensión del mercado: el trabajador ya no es dueño de su trabajo.
Vende sus horas de trabajo, pero a cambio recibe menos dinero del que el empresario se
embolsa por el fruto de su trabajo. Se ha generado un beneficio o plusvalía que pasa a
manos de los empresarios.
Se produce una distancia cada vez mayor entre la burguesía y el proletariado.