1. Anatomía funcional de los organos reproductivos en animales menores
Celulas t
1. LAS CÉLULAS-T, UNA CURA DEFINITIVA PARA EL CÁNCER.
Por: David Meneses
Las células-T son linfocitos producidos por la médula ósea para terminar madurando en
el timo, sus funciones son parte importante del sistema inmunitario adaptativo;
mientras la célula no se madura esta será denominada timocito, mismo que durante el
proceso de maduración en el timo se transformará bien sea en linfocito T cooperador
(CD4+) o bien en linfocito T citotóxico (CD8+), una vez desarrollados, los linfocitos
circularan a través de la sangre y el sistema linfático hasta ser activados al entrar en
contacto con un antígeno específico presentados a los linfocitos T por células
presentadoras de antígenos (células dendríticas o los macrófagos) mediante moléculas
del complejo mayor de histocompatibilidad (a grandes rasgos estos se refiere a la
capacidad de un linfocito para reaccionar a un estímulo químico especifico), el cual
interactúa con el receptor de linfocitos T que hay en su superficie y gracias a esto, los
linfocitos T podrán responder en forma específica contra patógenos y células tumorales.
Durante años, el tratamiento base para el cáncer fue siempre la cirugía, la quimioterapia
y la radioterapia, más durante las dos últimas décadas las terapias dirigidas como los
fármacos IMATINIB (Gleevec) y TRASTUZUMAB (Herceptina) que atacan a las células
cancerosas al dirigirse a cambios moleculares específicos que se ven principalmente en
esas células, se han establecido ellas mismas como tratamientos convencionales para
muchos cánceres.
2. La inmunoterapia (terapia que acondiciona y fortalece el sistema inmunitario de un
paciente para atacar a los tumores) en estos últimos tiempos como lo que la comunidad
de oncología considera ahora la “quinta columna” de tratamiento contra el cáncer.
El planteamiento de inmunoterapia que más cerca está de producir un tratamiento
aprobado por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) se llama terapia
de células-T y CAR (receptores de antígeno quimérico).
Al estudiar estas células más a fondo y gracias al aporte generado por un grupo de
investigadores de la Universidad de Cardiff, en Reino Unido se descubrió en la sangre
presente un linfocito T que por medio del sistema de escaneo denominado Receptor de
linfocitos T (TCR) el cual reconoce pequeñas partes de proteínas celulares unidas a
moléculas de la superficie celular llamadas antígeno leucocitario humano (HLA), lo que
permite que las células-T vean lo que ocurre dentro de las células escaneando su
superficie.
El HLA difiere ampliamente entre todo ser humano, esto evita que los científicos creen
un único tratamiento basado en células T que se dirija a la mayoría de los cánceres en
todas las personas.
A diferencia de HLA, MR1(espectro químico especifico) no varía en la población humana,
lo que significa que es un nuevo objetivo enormemente atractivo para las
inmunoterapias.
El estudio describe un TCR único que puede reconocer muchos tipos de cáncer a través
de una sola molécula similar a HLA llamada MR1. reacciona al MR1 presente en las
células cancerosas ubicando su distorsionado metabolismo y comunicándolo al sistema
inmunológico a fin de atacarlas y destruirlas. Cabe recalcar que a diferencia de los demás
3. linfocitos T capaces de detectar determinados tipos de cáncer este tipo reconoce y mata
a la mayoría de los tipos de cáncer humano a través de la proteína monomórfica
relacionada con MHC clase I, MR1, (moléculas que desempeñan la función de
identificación antigénica con la cual se distingue un tipo específico de células) mientras
permanece inerte para las células no cancerosas. A diferencia de las células T invariantes
(conocidas también como células-T asesinas naturales programadas específicamente
para la búsqueda y eliminación de amenazas al sistema inmune, notables por su
capacidad para responder rápidamente a las señales de peligro y las citoquinas
proinflamatorias) asociadas a la mucosa, el reconocimiento de las células objetivo por
el TCR (Acrónimo para Receptor de linfocitos T ) fue independiente de la carga
bacteriana; avanzando con la investigación se determinó además que este
reconocimiento se produjo a través de la detección del metaboloma (Conjunto
completo de las pequeñas moléculas utilizadas, capaces o producidas durante el
metabolismo denominadas metabolitos) del cáncer gracias a la reducción en el
reconocimiento de TCR de las células cancerosas a causa de adición dependiente de la
concentración de ligandos de metabolitos relacionados con la vitamina B de MR1.
Un clon de células-T restringido a MR1 medió la regresión in vivo de la leucemia y
confirió una mayor supervivencia de los ratones NSG (Acrónimo referente a NOD scid
gamma mouse, marca de ratones de laboratorio inmunodeficientes, desarrollado y
comercializado por la Compañía Jackson Laboratory). La transferencia de TCR a las
células T de los pacientes permitió la muerte del melanoma autólogo (individuo que a
su vez constituye el receptor y su donante) y no autólogo. Estos hallazgos ofrecen
oportunidades para inmunoterapias independientes de HLA (Acrónimo de Antígenos
4. leucocitarios humanos), pan-cáncer (proyecto para reconocer cáncer de manera
molecular) y pan-población.
Hasta ahora se el método más “convencional “ha sido el tratamiento CAR-T (Tipo de
tratamiento para el que se mejoran las células-T de un paciente en el laboratorio a fin
de que destruyan las células cancerosas) personalizado para cada paciente,
desafortunadamente no ha tenido éxito para los tumores sólidos.
Las células T equipadas con el nuevo tipo de receptor TCR reconocería y eliminaría a una
amplia gama de cánceres humanos, mientras ignora las células sanas.
Argumentándose en este estudio entonces, la selección de células cancerosas mediada
por células T, independiente del antígeno leucocitario humano (HLA) permitiría la
destrucción inmune de tumores malignos en todos los individuos, y aunado a esto el
nuevo tipo de célula será capaz de atacar un amplio rango de tipos de cáncer. Abriendo
paso a un tratamiento disponible para cualquier paciente
Con todo esto en la mesa se generaría un nuevo tratamiento contra el cáncer que
implicaría tomar una muestra de sangre del paciente a tratar, extraer sus células T y
modificarlas genéticamente para que se forme el receptor de detección de cáncer,
seguido de este proceso en un laboratorio se multiplicarían en el laboratorio las células
mejoradas y se volverían a colocar en el paciente.
Aunque de momento se encuentran en su fase de laboratorio y se han probado en
animales. Aunque todavía no se han realizado test en pacientes humanos todavía y se
ha estudiado únicamente casos con animales y en células en el laboratorio, las
autoridades regulatorias se refirieron al respecto dando a conocer que para aprobar su
5. ensayo en humanos se necesitarían más controles de seguridad, más calificaron el
trabajo como un hallazgo con “enorme potencial”.