Los eas se hacen palabra escrita volumen 13- 2017

Los EAS se hacen PALABRA ESCRITA 1.

Los EAS se hacen PALABRA ESCRITA2.
LOS EAS SE HACEN PALABRA ESCRITA
Derechos reservados
Comunidades Cristianas Comprometidas EAS
Medellín, Colombia.
Publicación editada por:
Ángela María Mejía de Correa
Comunidad Manantial.
Aprobación Eclesiástica
Arquidiócesis de Medellín
Decreto Arzobispal N° 342 del 15 de marzo de 1962.
Decreto Arzobispal N° 14 del 13 de marzo de 1996.
Personería Jurídica Civil:
Gobernación de Antioquia.
Resolución N° 38 del 15 de mayo de 1963.
Resolución N° 42174 del 18 de junio de 1996.
Foto Portada:
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se-unen-concepto-de-trabajo-en-equipo-empresarial_1185949.
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Diagramación:
Alejandra Correa Mejía.
Cada autor es responsable de su respectivo artículo.
Calle 5 N° 76ª – 115 Apto 103
Teléfono: 3427095
eascolombia@une.net.co
Noviembre de 2017
MEDELLIN – COLOMBIA

Prólogo 5
Piedras Vivas Eas 7
Aprendizajes Y Testimonios 11
Mi Vida Al Servicio 13
Dos Guerreros De La Fe 15
Un Trozo De Mí, Mi Felicidad En Los EAS 18
Dos Años De Vida Comunitaria 22
Evangelizando 23
Testimonio De Un Sueño 28
Una Amistad Para Siempre, Pase Lo Que Pase 30
Antonio Hortelano -El Hortelano Del Padre- 33
El Significado Del Kibbutz Para Los Eas 36
De Regreso A Casa 42
Una Invitación De Corazón 45
Indice

EAS: ¡Pescadores De Hombres...! 46
Una Experiencia De Amigos Para Siempre 48
Mi Retorno A Los EAS 49
¿Que Han Sido Los Eas En Nuestras Vidas? 51
Un Nuevo Estilo De Vida 55
Nuestro Caminar Al Lado De Rey Y Licha. 58
Regreso A Las Fuentes 60
La Relación De Jesús Con Las Mujeres
De Su Época 64
El Arte De Las Conversaciones
En La Pequeña Comunidad 73
El Papel De La Familia En La Sociedad
Contemporanea, Entre La Crisis Y El Desafio. 81
¿Quien Soy Yo? 93
EAS Hoy Y En Remembranzas 95
Laudato Si Es Un Canto 98
Algunas Lineas De Orientación Y Acción 104
Tres Personajes De Mi Barrio Antioquia 107
¿Y Cuántos Años Tenía? 109
Destellos De Luz En Ecuador 115

Prólogo
Angela María Mejía
Medellín, Colombia
Año tras año, he querido hacer de este libro un tesoro
de recuerdos, testimonios, experiencias que acontecen en
cada uno de los autores de estos escritos.
Quisiera que cada uno de los EAS, se diera a la tarea de
pasar su experiencia a las hojas de este libro para que así
quede plasmado el día a día de los EAS en el mundo.
Si supiéramos lo que pasará en unos cuantos años o
lustros, ¿No sería muy emocionante saber que lo que
escribimos hoy, sea historia para los próximos EAS, que
seguirán con este legado?
Un legado lleno de entusiasmo, de compromiso, de
servicio, de amistad para siempre y pase lo que pase, que
se leerá tal vez con un dejo en el alma, por los momentos
que pasaron, con esa añoranza plácida de la remembranza
y el recuerdo vivido aquellos años, que puede ser ejemplo
de estilo de vida, que a pesar de todo, siga intacto el
amor por el amigo que se convierte en hermano y que
esa amistad esté grabada en el alma y sea para siempre
y pase lo que pase.

Es tan emocionante encontrarse con ese amigo que
no vive en mi ciudad, cuando se llega a un encuentro;
cuando gritamos de emoción y damos gracias a Dios que
nos ha dejado volvernos a ver. Cuando participamos en
las diferentes actividades de mi ciudad y hace tiempo no
vemos a uno u otro amigo por diferentes circunstancias,
pero que nuestro corazón se llena de alegría al verlo.
Cuando encuentro personas nuevas, cuando recuerdo a
quienes no están, todo eso se vuelve parte de mi historia,
de la historia de los EAS y ¿qué mejor oportunidad que
esta, para plasmarla en letras y compartirla?
Es a veces difícil ser intensa en esta tarea, pero mi propósito
es hacer historia desde cada uno, con sus vivencias, con
sus experiencias, con su vida, con su comunidad, con
el acontecer de un hoy, que viene desde un ayer y se
transformará en un mañana.
El Padre Antonio Hortelano, nos ha dejado una tarea, ese
estilo de vida que nos asemeja a Jesús y que podemos
narrar por medio de este libro que es la recopilación desde
cada EAS.
Doy Gracias a Dios por ser la primera en leer una a una las
letras que van grabando la historia y por cada uno de los
EAS que tan amablemente colabora con la historia desde
su vida.
Solo le pido a Dios que cada año sean más los títulos que
hacen posible este libro y que todos nos enamoremos más
de la historia de vida, contada por cada uno.
De nuevo, GRACIAS A TODOS los que hacen posible este
libro.

Piedras Vivas
EAS
Mi nombre es Sandra Alcívar, Con mi esposo Tomas
Matamoros pertenecemos a la comunidad “Espiga de
Amor” de Durán – Ecuador. Vamos a cumplir 8 años en
la comunidad EAS, tenemos 3 hijos: Kevin de 23 años,
Ivanova de 18 y Andrea de 17, nuestra alegría y trabajo.
Quiero compartir todo lo bueno que Dios nos ha dado
dentro de la comunidad EAS:
Lescuentoqueenel2004reciénescucheelllamadodeDios.
Sin embargo, lo hice esperar 3 años para concentrarme a
ese llamado. Era una mujer muy enamorada de mi trabajo
y vanidosa, tanto que descuidé la vida espiritual de mis
hijos; no me importaba, ni siquiera asistíamos a misa. Sin
embargo, mi Padre celestial nunca me abandonó, siempre
me llamaba, me protegía de todo mal, bendecía a mi
familia, hasta que por tercera ocasión me hizo el llamado
y puse en una balanza mi familia y el trabajo y con ayuda
de su Santo Espíritu, porque yo sola no lo hubiera hecho,
escogí la familia, ya había escogido 2 veces anteriores el
trabajo, me levanté de mi escritorio y renuncié a 15 años
de trabajo.
Sandra Alcívar
Comunidad Espiga de Amor
Durán, Ecuador.

Empecé a ordenar la vida espiritual de mis hijos, busqué
una iglesia cercana para bautizarlos y de una vez me
indicaron que los inscribiera para realizar su primera
comunión, por lo cual tuve que asistir a charlas familiares
de catequesis, obligada, ir a misa para acompañar a mis
hijos y fue durante ese tiempo en que mi querido Dios
me atrapó, porque llevábamos poco tiempo asistiendo
a misa en familia y el párroco de ese tiempo Geovanny
Curimilma, se nos acerca y nos dice que nos necesita
para ayudemos a otras familias con charlas. Por supuesto
que nos negamos. No, cómo vamos a enseñar si recién
estábamos actualizándonos y aprendiendo y ¿saben lo que
me contestó el sacerdote, claro inducido por el Espíritu
Santo? No se preocupen, no necesitan saber nada, porque
el Espíritu Santo los preparará, y yo también les explicaré
en lo que tengan dudas. Entenderán que nos volvimos a
negar, pero él insistió, con la forma que siempre acostumbra
a pedir las cosas el Padre Geovanny, de modo que no
pudimos ya negarnos. Y empezó nuestro seguimiento a
Jesús sin saber que lo seguía o Él me seguía, porque para
variar en la misma peatonal que vivíamos resultó que
vivían los sacerdotes y nosotros ni enterados, y nos agarró
el otro sacerdote, Padre Angelito Bernal, visitándonos los
sábados en nuestro hogar, hablándonos de EAS. Yo no
entendía ni papa, pero no podía rechazar la visita de un
sacerdote en mi casa. Luego nos unimos con dos familias
más y participamos durante 2 meses de las charlas, luego
cambiaron a los sacerdotes a otras parroquias y nos
dejó recomendados para que asistiéramos a otra de las
comunidades EAS, pero solo fuimos dos veces y ya no se
reunieron más, y en otra visita del P. Angelito nos llevó a
la comunidad “Espiga de amor” Ea, por fin llegamos.
Bueno ¿qué les puedo decir de mi querida comunidad?
Muchas cosas, pero trataré de decir lo primordial. Les
comento que en la comunidad me encontré como mi

madre guía, Inesita. Así que empecé con confianza, fui
unas semanas sola, pero le contaba a mi esposo lo que
hacíamos y me acompañó por curiosidad y se quedó.
La comunidad nos ayudó mucho más a nuestro cambio
interior, con la lectura de la palabra y como reflexionábamos
con testimonios reales, me encantaba cómo podían contar
sus problemas de parejas y cómo se ayudaban los unos
a los otros con consejos y ejemplos. Eso me enamoró,
porque la primera vez que pude contar mis problemas,
fue como una confesión y quedé renovada internamente.
No podía creer que había contado algo que consideraba
íntimo y que nadie debía saberlo. Me avergonzaba. Pero
al escuchar a los demás, me di cuenta que mis problemas
no eran nada, comparados con otros. ¡Uf qué alivio! Todo
esto fue cambiando nuestra relación de pareja y familiar,
nos unimos mucho más, nos sentimos más felices,
contentos de contar con una nueva familia, de recibir a
Jesús sacramentalmente. ¡Qué dignidad tan grande
y la forma como lo recibimos en pareja, me encanta! (el
padre Angelito nos enseñó)
Aunque les comento que tuvimos que separarnos, o
nos abandonaron ciertas amistades y familiares, porque
ya estábamos más comprometidos con actividades de
la comunidad y de la Iglesia, ya no participábamos de
reuniones familiares donde sabíamos había alcohol, y en las
nuestras tampoco se brindaba alcohol, por consiguiente,
se alejaron un tiempo. Me dolió la separación, pero sabía
que primero Dios, pero al ver nuestro cambio, nos hemos
ganado su respeto.
Me siento muy comprometida con la comunidad, me
encanta, aunque no todo es felicidad, hay de todo como,
en la familia biológica. Pero eso nos ayuda a conocernos
muchos más, a querernos, a perdonarnos, a aceptarnos
con virtudes y defectos, a compartir la vida, la fé y la

oración, a donarnos y dar nuestro tiempo para el bien de
los demás. Todo esto aprendí aquí en mi comunidad, lo
más maravilloso, evangelizar a familias, llevar un mensaje
del amor de Dios a los matrimonios, el deseo de compartir
mi felicidad, para que otros también vivan este Reino que
Dios nos ofrece aquí también en la tierra a todos sus hijos
fieles.
Otro momento maravilloso en la comunidad que nos ha
regalado Dios, junto a mi esposo y que nos mantuvo
ocupados, fue participar de la formación del grupos de
jóvenes de la Comunidad Semillas del futuro, desde
sus inicios y durante cuatro años. Fue una experiencia
enriquecedora y muy bendecida, no se imaginan ver a esos
adolecentes convertidos en ya unos jóvenes universitarios
y sentir sus abrazos y cariños es una gran recompensa
que Dios me da en su gran misericordia.
Por todo esto, siento que aún falta muchísimo por hacer
junto a mi esposo, familia y comunidad, y que me basta
la gracia de Dios para hacer su voluntad y de esta manera
retribuir por amor a mi Dios todo lo que me da y le da
a mi familia, me siento bendecida, y lo alabo como dice
una canción “que sería de mi sino me hubieras alcanzado,
donde andaría hoy sino me hubieras perdonado, vagaría
sin rumbo y sin dirección, sino fuera por tu gracia y por
tu amor”.
Gracias amado Yahvé por insertarme en la familia EAS.

Bendiciones para todos ustedes. Empezaré por platicarles,
que cuando fuimos invitados a formar comunidad EAS,
no teníamos idea de qué se trataba. Estuvimos invitados
a una cena por parte de nuestros amigos, Ángeles y
Antonio Verduzco, ya que a ellos los conocemos hace más
de veinticinco años. Allí se encontraba Reynaldo, quien
empezó a platicar de las comunidades, lo escuchamos
Fernando y yo, Lupita. Desde ese día tomamos la decisión
de decir sí, si queremos formar parte de comunidad.
Muchas veces habíamos sido invitados a reuniones sociales
y otro tipo de pláticas, pero nadie nos había invitado a leer
La Biblia en matrimonio.
Yo quise saber más acerca de Nuestro Padre Fundador
Antonio Hortelano, compré tres de sus libros y me puse a
leer, de esta manera, entendí y comprendí más, de qué se
trataba el formar comunidades EAS.
Me encantó la idea, porque iba a ser en matrimonio,
estábamos descubriendo otro estilo de vida, Jesús en
nuestro matrimonio.
Aprendizajes y
Testimonios
Lupita Ávila
Comunidad Plenitud de Vida
Querétaro , México.

Aprendizaje en nuestro matrimonio: Siendo EAS, somos
más espirituales, tenemos más tolerancia, somos más
compasivos y, por supuesto, hemos aprendido a ser
más asertivos y a llevar a una mejor dirección nuestro
matrimonio. Hemos mejorado las condiciones de vida
familiar.
A mí me enseñaron que Dios Nuestro Señor, te recompensa
con paz, tranquilidad y vivir feliz. Me parece que ya
tenemos catorce años en comunidad, el tiempo se pasa
muy rápido y no lo podemos detener.
Testimonio personal: Estar en comunidad nos permite
reconciliarnos con nosotros mismos y por lo tanto con
nuestra pareja, familia y entorno.
Para mí, esto como un taller del perdón, en el cual poco
a poco Dios Nuestro Señor nos va moldeando, conforme
vamos leyendo su palabra. Con esto quiero decir que
nosotros somos un diamante en bruto en el cual, cada
uno somos responsables de irle dando la forma que cada
uno cree en esta enseñanza.
Los EAS estamos comprometidos, ya que somos discípulos
y misioneros, a trabajar, contagiar y dar a conocer las
buenas noticias del Señor.

Para mí, María de los Ángeles, ha sido un regalo de Dios,
este servicio que nos regala, porque ha sido conocer a
personas padres, países donde los EAS demostramos lo
que nos sirve vivir en comunidad.
A donde hemos ido, llegamos cargados de buena vibra
para seguir dando servicio, que va para lo que Dios nos
puso ahí.
Nos falta visitar a El Salvador, España y Argentina, ya que
conoceremos el trabajo que se ha hecho en cada país y
que podamos conocer a las comunidades y sus métodos
de promoción.
La preparación para el Encuentro de Coordinadores, nos
llevó más de un año trabajar en los temas a tratar y
teníamos muy claro, como lo dice el Ideario y Reglamento,
que era de coordinadores, pero podrán asistir consejeros
y lo preparamos tal cual.
Mi Vida al
Servicio
María de los Ángeles
Alvarado.
Comunidad Plenitud de vida,
Querétaro, México.
Coordinadora internacional

Verlos llegar a todos, nos llenó de una gran alegría y
sobretodo de un gran compromiso para seguir trabajando
en lo que nos queda de coordinación.
Dios les pague a todos por su asistencia, por sus aportes,
por sus abrazos, sonrisas, por los momentos tan gratos
que vivimos y con los que quedarán en mi corazón.
Dios les bendiga a todos los que nos apoyaron a que este
encuentro fuera tan bonito y sobretodo tan emotivo, a los
que vinieron del extranjero, a los de México norte que nos
brindaron todo su apoyo, a los de Querétaro y a tantas
personas que hicieron que este encuentro sea inolvidable,
a todos los de México que también estuvieron presentes,
que con toda su alegría hayamos celebrado las fiestas
patrias.
Dios los bendiga a todos y sigamos trabajando para que
haya más comunidades y se contagien de este estilo de
vida.
Y recuerden, sigamos caminando de la mano de Jesús y
de nuestro gran Papa Francisco.

Somos Giuseppe y Lorena pertenecemos a la comunidad
de Daule, Guerreros de la Fe, queremos compartir con
Uds. nuestro testimonio de vida.
Nos conocimos hace 14 años por internet y poco después
ya éramos enamorados, todo fue tan rápido que poco
tiempo después quisimos casarnos y a los 3 años y medio
dimos el sí ante Dios con la convicción de estar juntos
para toda la vida. Vino la ceremonia muy bonita la fiesta
con la familia y los amigos y nos embarcamos en este
viaje juntos.
Nuestro cambio de novios a casados, demoró un poco,
porque vivíamos en casa de mis suegros y teníamos que
vivir bajo sus reglas y eso no contribuía a comenzar a vivir
nuestra propia experiencia. Una vez que decidimos vivir
solos, ahí comenzó nuestro cambio, ya que traer viejas
costumbres a un nuevo hogar, crea ciertos conflictos entre
ambos, luego fuimos dándonos cuenta de las cosas en
que debíamos mejorar, poco a poco fuimos cambiando.
Siempre el hombre tiene más que aprender, porque, por
lo general, no hace mucho en su casa. Pues en este caso,
Dos Guerreros
de la Fe
Giuseppe y Lorena de Vaca.
Comunidad Guerreros de la Fe.
Daule, Ecuador

le tocó aprender y ser más entregado en las tareas de
casa. Los años fueron pasando y nos dimos cuenta que
algo le hacía falta a nuestro matrimonio y era tener a
Dios en primer lugar a cada paso que dábamos, pues ese
año decidimos ir a un retiro para matrimonios y nos fue
bien porque aprendimos a renovar nuestro compromiso
y revisar en que estábamos fallando. Fue en esa época
que ingresamos a un grupo de matrimonios de auto-
educación y crecimos de la mano de nuestra Madre María,
ella nos supo educar y moldear para estar preparados
para la prueba.
Pasó el tiempo y seguíamos alcanzando nuestras metas,
hasta que pudimos mudarnos a nuestro propio hogar.
Sin dudar, nos llevamos a mi suegra para que viva con
nosotros, pues había enviudado hace poco. Luego de
eso le detectaron una enfermedad a ella y fue muy duro
aceptar esta prueba, pero nos ayudó a crecer y fortalecer
nuestra fe en Dios y la confianza en la Madre de Dios
como nuestra mayor intercesora. Ella obró con gran cariño
y amor que nos concedió, la pronta mejoría de mi suegra
que hasta hoy está completamente sana, sin embargo
aún no tenemos la gracia de poder ser padres pero hemos
ido aceptándolo y esperando confiados en Dios y nuestra
Madre el momento que nos toque serlo.
Actualmente cumplimos 11 años de casados y somos un
matrimonio de dos, nos amamos y esperamos en nuestra
fe, sabemos y creemos firmemente que Dios nos tiene
reservado algo maravilloso y que sus planes son perfectos,
que todo lo que estamos haciendo tiene el propósito de
hacernos mejores personas y mejores Padres.

Hace poco tiempo se inició nuestra parroquia SAM en
La Joya y con ella los grupos valiosos para crecer como
comunidad como CCC EAS al cual ingresamos hace casi
2 años en donde hemos aprendido y enriquecido nuestra
vida en comunidad, compartir cada semana con nuestros
hermanos de comunidad, conocer nuevas amistades
y crecer con cada reunión en donde aprendemos de la
palabra de Dios y cuidamos de cada uno y así poder servir
a la parroquia a través de la catequesis y actividades como
el bazar para los avances en la Parroquia que está en
etapa de construcción y los apostolados que actualmente
estamos realizando en hospitales.
Esperamos que nuestro testimonio pueda contagiar a más
personas y seguir el ideario EAS.

Quisiera comenzar mi relato agradeciéndole a Dios toda
la riqueza, los regalos de vida que me ha concedido
en todos los aspectos. Muestra de esos regalos es, sin
duda, mi vida en comunidad. Quienes hemos tenido
ese privilegio, no sabemos de tristeza ni de soledad. Al
contrario, disfrutamos y valoramos la vida propia y la del
otro llamado prójimo. Aprendemos el significado del amor
de Dios.
Es a principios del año del 2009 en Querétaro, México
cuando mi vida estaba pasando por una etapa de duelo,
que aunque la viví con fe y esperanza, no fue nada fácil
sobrellevarla; sin embargo vivir, convivir y disfrutar de
la familia y amigos y sobre todo de la amistad que me
unía desde hacía más de 15 años en aquel entonces,
a una gran amiga miembro de Comunidades Cristianas
Comprometidas EAS y después de muchas fértiles
conversaciones con ella de lo que son y hacen los EAS,
me ofreció un estilo de vida que me convenció, vislumbré
|que al ser los EAS comunidades Cristo-céntrica llenaba
todo lo que yo buscaba como herramientas de crecimiento
Un Trozo De Mí,
Mi Felicidad
en los EAS.
Blanca María Briones Vega.
Comunidad Plenitud de Vida.
Querétaro, México

en mi fe y espiritualidad católica y firme convicción de que
la vida en comunidad, es la mejor opción para quienes
buscamos seguir a Jesús.
Es así que en abril del 2009, Jesús me tenía reservada
esta nueva etapa, este nuevo estilo de vida como
integrante de una pequeña comunidad EAS, pues
luego de estar de acuerdo con mi Shato (mi esposo y
perdón pero no puedo dirigirme a él llamándolo por su
nombre por eso en adelante sabrás que Mi Shato es mi
marido), nos incluimos a una comunidad ya existente
de tres extraordinarios matrimonios que nos acogieron
maravillosamente, tres matrimonios que al poco tiempo
los convertimos en nuestros hermanos por elección y
juntos formamos la comunidad Plenitud de Vida. Qué
nombre más acertado, pues ese es el significado perfecto
de lo que es vivir en comunidad, es complementar toda mi
vida en plenitud con ellos. Para mi Shato y para mí, no era
la primera experiencia que teníamos, pues ya estábamos
convencidos de que la vida en comunidad nos hacía nutrir
espiritualmente nuestro ser, nuestro matrimonio, nuestra
familia y por consecuencia nuestro alrededor, pues en otra
ciudad norteña de México en la que vivimos por muchos
años, ya habíamos experimentado durante 12 años esta
maravillosa experiencia de pertenecer a una pequeña
comunidad (no era una comunidad EAS, pero si era una
comunidad Cristo-céntrica) y sabíamos de lo que trataba,
por lo tanto fue fácil nuestra integración.
Pasan los meses y llenos de ganas y el ánimo de aportar
con un granito de mostaza a las CCCEAS, nos invitan a
formar parte del Equipo de Servicio de Retiros Conyugales
EAS dentro de la coordinación de la Ciudad, y comenzamos
nuestro apostolado de “servicio” a nuestros hermanos
-nuestros prójimos - matrimonios que acuden a esos fines
de semana de retiro, que al igual que nosotros necesitamos

aprender a incluir a María, a Jesús y al Espíritu Santo en
nuestras vidas, en nuestro día a día- y así en el equipo de
Servicio de Retiros Conyugales EAS es en donde a través
de tal servicio, hemos sido bendecidos, pues en sentido
contrario, hemos recibido y aprendido tanto de cada una
de esas parejas; tanta experiencia de vida, hemos visto
y sido testigos de la transformación de corazones por
acción directa de Jesús, hemos sido bendecidos durante
la convivencia como hermanos de diferentes poblados
y ciudades en donde en ese lugar somos todos iguales,
todos estamos ahí reunidos porque Dios así lo quiso y
a todos nos une una sola idea: Queremos ser mejores
personas, mejores esposos y mejores hijos de Dios; es ahí
que cada una de las parejas, viéndonos en el espejo del
rostro del hermano, nos descubrimos a nosotros mismos y
le damos un SÍ renovado a Jesús para continuar tomados
de la mano como esposos. ¡No cambio por nada los
días domingo cuando al finalizar un retiro conyugal veo
la mirada de esas parejas llenas de esperanza, se van
siendo otros, comparando con el día viernes que llegaron
y algunos llegan esperanzados y con fe, otros tan dolidos
que creen que es el final y que ya nada tiene sentido o que
están sobreviviendo como matrimonio, otros agonizando
y ya casi sin vida, en fin, ¡Dios es maravilloso! Dios hace
milagros en los corazones que le abren sus puertas.
Cosas como estas son las que me mantienen enamorada
de Jesús, enamorada del servicio al prójimo, enamorada
de la vida en comunidad a la que llegas: naces, renaces,
compartes, valoras y deseas más cada reunión, cada
retiro, cada encuentro anual en el que ves y compartes
con EAS de otras ciudades, de otros países en el caso de
Encuentros Internacionales, y que ves lo maravilloso que
es este estilo de vida.

EAS me ayuda y guía hacia la oración constante y la
búsqueda de un mundo mejor, me motiva y hace latente
en mí el compromiso de dar testimonio de lo que recibo
del Mero Mero, de Jesús: Mi motor y el dueño de mi vida.
Testimonio de hacer vida la palabra de Dios con mi Shato,
con mis hijos, con mis hermanos, con toda mi familia,
con mi comunidad; y así aportar en vida para hacer de
este mundo un mundo mejor, un mundo en el que estoy
segura que podemos hacer algo por alguien y aspirar a la
verdadera felicidad. Muy lejos de creer que alcanzaré la
perfección pues sigo siendo una persona llena de defectos
y carencias. Pero estar y convivir en comunidades EAS,
me enseña que, a pesar de las diferencias que podamos
tener con alguien, que estando en los EAS se aprende
a perdonar, a ser más tolerante, a ser agradecida, a ser
paciente, a ser responsable con mis deberes; en fin,
aprendo a Amar, haciendo por el otro lo que Jesús nos
enseñó, sin exigir ni imponer, sino aprendiendo sobre la
humildad, para sonreír con alegría y regocijo del servicio
compartido, pues yo nada soy. Dar testimonio diariamente
del amor que El Señor me brinda y aprendiendo cada
día a estar UNIDOS sin importar cuanto me equivoque,
desfallezca y desanime: Mis hermanos de comunidades
EAS y Dios siempre me impulsan y mueven para continuar.
Sin duda alguna Dios ha tomado mi vida y no la quiere
soltar y yo deseo seguir tomada de su mano por siempre.
Gracias comunidades EAS por permitirme SER y estar.

Han pasado ya dos años desde que tomamos la decisión
de integrarnos y formar parte de este grupo de “Amigos
para toda la vida” y definitivamente, ha sido una de las
mejores decisiones que, como pareja, hemos tomado.
Hemos compartido y vivido momentos muy especiales
y emotivos con nuestra “familia EAS”, hemos obtenido
conocimientos y así mismo los hemos repartirlos una vez
que estudiamos un tema a reflexionar; y, lo más importante
que es saber, entender y comprender cuán grande es el
amor de Nuestro Padre del Cielo.
Estamos completamente convencidos que tenemos
mucho camino por delante juntos, tantas cosas que Dios
debe mostrarnos y por qué no, declarar que nuestros hijos
seguirán nuestro camino.
Esta nueva vida ha hecho nacer en nosotros la necesidad
de querer saber más de Dios, la necesidad de tener una
fe infinita hacia Él, y saber que la pareja que formamos no
es de dos si no de tres.
Dos Años de Vida
Comunitaria
Mario Collat
y Verónica Mateus.
Comunidad Guerreros de la fe.
Daule Ecuador.

Sí, es verdad que también tenemos nuestras diferencias
como en toda familia, pero también es cierto, que sabemos
salir de ellas como hermanos que somos; todo esto da
pauta para sentimos honrados, contentos y bendecidos
de formar parte de este grupo de amor y de Amigos para
siempre.
Vivir en comunidad, compartir la vida, desprenderse,
vencerse a sí mismo para ya no ser yo el protagonista.
El que tiene que brillar es Jesús, y era precisamente lo
que yo ignoraba en un principio, postergaba los tiempos
ante la invitación de conversión y después evitaba el
compromiso.
Y es precisamente que después de 4 años de insistencia
acepto el llamado, muchos otros llamados seguramente
se presentaron, pero todos fueron ignorados por mí. Una
vez que el Señor tocó mi conciencia, corazón y humanidad
ya fue diferente, aunque seguía (y sigo en esa lucha
diaria por vencerme a mí mismo, por seguir el proceso
de conversión), con mis demonios internos, trataba de
justificar lo que no era justificable, trataba de matizar lo
que no necesitaba absolutamente nada.
Evangelizando
Mario Estrada.
Comunidad Plenitud de vida.
Querétaro, México

Y es a un par de años desde el primer retiro, cuando
Noemí, la intensa Noemí me dice: “Jalpan (su tierra natal)
necesita que vengamos anunciar el evangelio, a partir de
un encuentro de matrimonios.
En primera instancia mi racionalidad decía no, hacia
cálculos, no teníamos experiencia alguna, solo la buena
voluntad de mi esposa, más que la mía. A instancias del
Espíritu Santo, empezamos a buscar apoyos con los EAS
que incipientemente nos conocían, o que nos miraban con
curiosidad al presentarles el proyecto de ir a la Sierra,
4 horas de camino para dar un encuentro matrimonial y
después formar comunidades, jajajajaja. Yo creo que nos
veían como loquitos tiernos y de buenas intenciones.
Es ahí donde el Señor me decía al oído “¿Te vas a vencer?;
¿Vas a dejar que las negativas te limiten?” ya lo decía,
Noemí estaba perfectamente clara, yo, más por amor
propio que por otra cosa acepté el reto que Jesús, por
medio de Noemí, me presentaba. (Después, todo sería
diferente).
Y sucede, empezamos a tener entrevistas con diferentes
personas, hasta que encontramos al matrimonio que
enseguida nos dio un SÍ. Y de ahí empieza esta gran
aventura en EAS. Es hacer planes, estrategias, todo de
manera racional, era válido para tener orden, pero lo más
importante era acudir al encuentro personal.
Una vez decididos, fuimos con el párroco del lugar con
quien no teníamos mucho contacto (nosotros vivíamos en
la ciudad de Querétaro) el párroco solo tenía la referencia
de la familia de Noemí, pero no era suficiente, era necesario
dar testimonio. Y al fin, se convence, pero tenía que ver
resultados. Y es donde Jesús te configura para el anuncio.
Empezamosundíacalurosos,comosontodos(habíapedido

permiso en mi trabajo, pretextando una enfermedad,
porque si decía que iba a cosas de Dios, por alguna razón
siempre me negaban el permiso).
La temperatura en Jalpán en el verano de 2004 era de
42 grados centígrados. Ufff, para mí era la muerte, pero
al ver a Noemí animosa, dije ¡Pues ya que me queda! Así
fuimos con conocidos de ellas, familiares, amigos de su
reciente juventud (en ese entonces empezamos ella de
30, yo 33, este apasionante caminar con Jesús).
Fuimos casa por casa, caminando esas calles pedregosas,
con subidas y bajadas, calles angostas, paisaje de pueblo
que invitaba al descanso más que al trabajo; sin más
estrategia que nuestra buena voluntad, sin preparación,
sin material de apoyo, nos aventamos así nada más. Pero
ahora estoy seguro de que no íbamos solos, iba nuestro
coach “El Espíritu Santo” que nos dio las palabras.
Fueron 115 matrimonios visitados, eso sí, llevaba mi
estadística, recibiendo todo tipo de negativas, hasta con
cierre relativamente violento en plena cara, con caras
donde el marido nos veía y sin mediar palabra se retiraba,
dejando a Noemí con una sonrisa y a mí con un coraje,
cómo podía ser la gente tan mal educada y tan dura
(¡mira quién lo dice, jejejeje!). Así fue la recolección de
respuestas: “No me interesa”, “Nosotros estamos bien, no
lo necesitamos”, “Mmm”, “No tengo tiempo”, ¿“Cuesta?,
no tengo dinero”, “Seguro los mandó el padre”, “Para esas
cosas de la iglesia no tengo interés”, “¡Qué bien que hacen
esta invitación, hace tanta falta!, pero no quiero ir”; otros
decían: “Déjame pensarlo”, “Estaría bien”, “Lo vamos a
platicar”.
En fin, tengo un catálogo de excusas, de respuestas, algo
amplio. Al final de esas 115 visitas, logramos tener una
lista de 25 matrimonios posibles, nada mal, decía Noemí,
para mí era pocos, yo no sabía esta mecánica del Señor,

pero bueno no había sido en vano. Todavía faltaba la
realidad.
No había casa de retiros por ahí, había que buscar,
alguien nos recomendó que en Conca había un hotel
casi en desuso, acudimos, el hotel con mucha falta de
mantenimiento, pero con la dueña llena de amor, y por
supuesto, puesta en nuestro camino por Dios. Acordamos
fechas, no recuerdo si revisamos precios, y ahorita les
comento por qué.
Listos, el equipo estaba puesto desde Querétaro, 4 horas
de camino entre curvas con mucha ilusión y nerviosismo,
la promoción se había hecho con un matrimonio del
equipo, un par de ocasiones, fueron muchas visitas antes
de hacer el encuentro matrimonial. Llegamos, el calor está
a tope, pero el ánimo era muy bueno. Como en muchos
lados, hubo que adecuar espacios, pero bien para esperar
a nuestros matrimonios. ¿25, dijimos? jajajajaja, el Señor
es sabio, muchachitos vayan con calma, les enviaré los
que pueden atender.
Llegaron solo 9 matrimonios, Ufff yo era el único
desanimado, después entendería la pedagogía de Jesús. Se
da el retiro, era nuestra primera experiencia en un equipo
que daba retiros y talleres, era 2005. ¡Todo maravilloso el
Señor tocó los corazones, todo bien, guau!.
Faltaba la parte del cierre financiero, el costo total del
retiro fue de $14,315 pesos mexicanos, posiblemente para
muchos no sea una cantidad cuantiosa, para nosotros si
lo era. Mi sueldo era menos de la mitad de eso. Pero no
importaba, ahí me di cuenta de que cuando uno trabaja
para el Señor el facilita todo. La recuperación fue de solo
$6000 pesos, había que poner la diferencia.

Noemí me pregunta, ¿traes dinero? No lo suficiente, en
fin, entre ambos, sacamos el pago total de retiro.
¿Cómo? Dios sabe cómo. Y este dato no es a manera de
presunción, sino para hacer notar cómo opera el Señor
Jesús. Posteriormente la promoción de boca en boca de
los que fueron hizo que los demás encuentros fueran con
más matrimonios, se creó la primera comunidad. De ahí
detonan 16 comunidades, algunas que se cayeron en el
camino, otras que siguen, alguien invita a sus familiares
de otros lados y permite que el Reino de Dios se extienda
a otras ciudades, más vidas tocadas por la ternura del
Señor, más esperanza para familias, para niños que vivían
infiernos.
Eso amigos, paga con creces, todo. Jesús nos dio las
herramientas, los recursos, los caminos, puso todo para
que el mensaje del Evangelio siga extendiéndose, si nos
preguntaran, si me preguntaran; ¿en esas condiciones,
volverías a repetirlo? La respuesta sería SÍ, y es que en
ese entonces teníamos los dos requisitos que se necesitan
para anunciar la buena noticia. El primer requisito es: No

saber nada. El segundo es: No tener tiempo.
Que son exactamente las respuestas que seguimos
obteniendo cuando invitamos a más gente para que se
una a esta hermosa acción de evangelizar.
Ahora mismo junto con Noemí trabajamos para el Señor
con esos mismos requisitos, pero agregando otros más,
no juzgar, respetar, y abandonarse al Señor. Nos falta
mucho por aprender, y más que un trabajo; es toda una
aventura que emociona.
Sean felices. Dios los ama.
Cuando Antonio Hortelano visitaba mi casa en Lima Perú
conversábamos horas enteras. Así fue que me embebí de
muchas historias y enseñanzas...Decía “hagan globos.
Suban hasta las estrellas”. Eso se me quedó grabado por
mucho tiempo.
Es así que soñaba con no faltar a ningún Encuentro
Internacional. Pero hace 10 años que no podía ir por
varios motivos. Me entró una gran nostalgia, pensaba en
Testimonio de
un sueño
Zonia Romero de Quezada.
Comunidad Virgen de Guadalupe.
La Paz, Bolivia

el Encuentro de Coordinadores en Medellín. Por motivos
extras se cambió la sede a México...Habría que pensarlo.
Estábamos ya en enero de 2017 y nada se vislumbraba.
Llega abril, en Sucre, para mí, nefasto. Enfermé, muy
grave, una embolia al cerebelo. Gracias a Dios y a las
múltiples oraciones de familiares y de los amigos EAS me
recuperé muy pronto. La atención médica inmediata tuvo
que ver mucho.
¡Punto ganado! ¿Y la parte económica? ¡Se solucionó! Algún
terreno, olvidado por razones de “loteadores” (personas
que se apoderan de lotes con papeles falsos); luego de 20
años, logré recuperar algunos de estos terrenos. OK, Dios
abrió los caminos y mi deseo de ver a mi gente querida de
asistir a Querétaro, se hace realidad.
Es más. Nos detuvieron 12 horas en aeropuerto de La
Paz, sin dormir, casi decidimos cancelar el vuelo, pero no
lo hicimos. Nos vamos a Lima con la conexión a México
perdida.
Nos alojaron en un Hotel 5 estrellas y ¡Oh maravilla! pude
ver unas horas a mi nieto Adriano, a quien que en marzo
le operaron de un quiste en la médula cervical. Aún no le
dan de alta, pero está muy bien.
Gracias a hacer globos y a soñar y persistir, cumplí mi gran
deseo de estar en ese bello país, México.
No sentimos el terremoto, ni una réplica, pero nos volvimos
con el corazón destrozado por la inclemente naturaleza.
El Encuentro ¡fenomenal! Esta coordinación se lució.
Felicitaciones al equipo maravilloso encabezado por

Antonio y Ángeles Verdusco. México lindo y querido, eres
más grande que tus problemas y te levantarás. Estamos
orando y seguiremos orando. Ánimo
Hace un año José estaba escribiendo su artículo para el
libro “Los EAS se hacen Palabra escrita”, resaltando los
valores de nuestro fundador el padre Antonio Hortelano, a
quien siempre admiró por su visión de futuro, por tener los
pies sobre la tierra, por sus escritos, por sus Eucaristías en
familia, por sus agradables charlas informales, por el gran
legado de las comunidades EAS.
José vivió a tope, compartiendo su amistad sincera,
su amistad para siempre, con los hermanos de la
comunidad Horizontes y con todos los EAS de Medellín
y de Aguadas, durante más de 20 años, disfrutando las
reuniones semanales, los martes de amistad y todas las
actividades que se programaban, y con los EAS del resto
del mundo participando en los Encuentros Internacionales
y compartiendo con ellos cuando venían a Medellín.
De repente nos sorprendió su enfermedad, que asumió
Una Amistad para
Siempre, Pase lo
que Pase
María Inés Ortiz.
Comunidad Horizontes.
Medellín, Colombia

con gran valentía y con plena confianza en el Señor,
dispuesto siempre a aceptar Su Voluntad.
Fueron muchas las manifestaciones de cariño en esos
momentos difíciles. Se alegraba con los mensajes que le
leía, con las visitas que recibía.
El Señor lo premió, lo llamó a formar parte de la
Corte Celestial, ya había cumplido su misión acá en la
tierra. Ahora, desde el Cielo, nos sigue acompañando,
intercediendo por nosotros ante nuestro Padre Dios.
Hoy, a escasos días de celebrar el primer aniversario de
su partida hacia la Casa del Padre , con lágrimas en los
ojos pero con un corazón agradecido, recordando tantos
años compartidos, tantas enseñanzas, tantas alegrías y
dificultades superadas, doy gracias a Dios por todas sus
bendiciones, por habernos permitido compartir la vida
juntos, con todo y para todo, durante 38 años y medio,
por el hogar que nos ayudó a formar, por el regalo tan
grande que nos dio, un par de hijos amorosos, unos
tesoros que han sido mi mayor consuelo.
Doy también gracias a Dios por todos los amigos EAS, por
su amistad incondicional, por su acompañamiento con sus
oraciones, con su presencia física y espiritual, porque han
sido y siguen siendo mis amigos del alma, con ellos cuento
en todo momento, son un gran apoyo en este caminar

Que el Señor de la Vida nos siga bendiciendo y
acompañando para llevar su mensaje de amor a todos
nuestros hermanos en Cristo Nuestro Señor.
Comunidad Horizontes, Medellín, Colombia

El día 23 del mes y año en curso, asistimos marido y yo a
la graduación de Ángela Maldonado de los Santos, quien
vive en casa como una más de nuestras hijas, y se graduó
de Licenciada en Administración y Mercadotecnia, en la
Universidad Lasalle de Saltillo. Fue una ceremonia muy
emotiva y protocolaria, misma que con todos los 53 años
de docencia que tengo, nunca había visto en mi vida.
Todo comenzó con una Eucaristía muy alegre, tal y como
las recomendaba Antonio, cuando mencionaba que había
de ser transformadora, que moviera a la persona y lograra
convertirnos en cristianos maduros en la fe.
Posteriormente, el Acto Académico, muy formal y con una
ceremonia que en todo momento captó la atención de los
presentes, especialmente de los padres de los graduandos
que lloraban cuando observaban a sus hijos al recibir, bien,
el título o el diploma de haber terminado sus estudios,
por el esfuerzo realizado. Al final nos trasladamos al
Salón, donde iba a realizarse el baile de Graduación, que,
por primera vez en la corta historia de la Institución, la
celebraban todos los egresados que eran 53. Muy buen
ANTONIO HORTELANO
- EL HORTELANO DEL PADRE -
Historia de Vida
Everardo Martínez Pineda
y Dora Alicia Valero Gómez.
Comunidad Cabañas.
Saltillo Coah, México.

número para tan corto tiempo.
Disfrutamos con alegría el baile, marido y yo, con nuestros
casi 80 años de él y 73 míos; por supuesto acompañando
además de los graduados y sus familias, a los padres y
hermanos de Ángela, la pasamos muy bien en el baile,
compartimos el pan y la sal, a la 1 de la mañana, mi hija
Mara, maestra de la institución, nos dijo que ya deseaba
retirarse y nosotros como habíamos ido con ella decidimos
hacerlo también.
Cuando nos despedimos de algunos conocidos, marido y
yo hicimos la siguiente reflexión: ¡Cuánto nos han dado
las Comunidades EAS en la vida! Han sido el medio para
acercarnos a Dios con una fe adulta, pero a ello debemos
agregar el amor incondicional y para siempre que hemos
recibido y entregado a quienes perseveramos en ellas,
quienes ingresan y aún de los que se han retirado por
alguna razón. Y explicaré porqué: En el estrado estaba
Javier Dávila Suárez; hijo de Javier Dávila y Angelita Suárez
de Dávila, que, siendo presidente de la Mesa Directiva
de Padres de Familia del Colegio Zaragoza, luchó, buscó
recursos, insistió y logro la creación de la Universidad.
Hijo de quienes formaron parte de nuestra Comunidad y
quien, con su esposa, estuvo también en una de ellas. Y
que aun cuando ya no está, sigue llamando a mis hijos,
hermanos, y quien forma parte de la Junta de Gobierno
de la misma.
También al salir nos saludaron José Luis Rodríguez Álvarez
y Sofía Elena Villarreal de Rodríguez, miembros de la
primera Comunidad que se formó en Saltillo, quienes nos
abrazaron y nos dijeron “no saben cuánto los amamos”.
Su nieta, Ana Gabriela Herrera Rodríguez, se graduó en
Nutrición y Gastronomía. Seguimos caminando hacia la
salida y nos encontramos a Toño Marquina; de nuevo

un gran abrazo de él y Claudia su esposa, que preguntó
¿siguen en las comunidades EAS? ¿Han tenido contacto
con mi padre? y cuando asentimos, expresó ¡quiero
tomarme una foto con ustedes! mi hija que fue alumna de
Mara su hija y a quien quiere mucho, y con su esposa tan
linda y querida por nosotros. María José Marquina Aponte
se graduó con mención especial por alta escolaridad en
Desarrollo e Innovación Educativa.
Saludamos y recordamos al querido Reynaldo Peña Garay
y a su adorada Licha, cuando abrazamos y besamos a
Rolando Peña y Edurne Oronaz su esposa, ya que su hija
Edurne se graduó en Diseño Industrial.
También terminó la licenciatura en Nutrición y Gastronomía
Paulina Elizabeth Rangel Aguirre hija de un matrimonio,
miembro de la Comunidad Nueva Vida de nuestra ciudad.
Ante todo esto, concluimos que la siembra del Hortelano
ha seguido dando frutos y la cosecha va en la tercera
generación de ese estilo de vida que somos los EAS.

Hablar del significado de algo, pone un reto en saber
hacerlo, en mi caso no sé mucho de lo acontecido en el
Kibbutz y aunque le he preguntado a varias personas
considero que los datos y relatos, quedan cortos a lo que
significa este lugar. Ver el sueño del P. Antonio Hortelano
y otros EAS ¡es sencillamente asombroso! Un sueño que
consto esfuerzo, donación, sacrificio e inspiración.
Después de la muerte del P. Antonio, fue abandonado
este lugar y ahora gracias a varias personas, algunos EAS
y otros no, podemos decir que hay un renacimiento del
Kibutz, esto se constata en la siguiente fotografía donde
se detalla los espacios del mismo:
El Significado
del Kibbutz
para los EAS
Verónica Naranjo Quintero.
Comunidad CREAS.
Medellín, Colombia

Desde las consideraciones anteriores deseo mencionar
algunas palabras de la experiencia de caminar por el
Kibbutz y sentir el espíritu EAS en el último encuentro
Internacional acontecido en Querétaro-México.
Caminar por los senderos de este lugar es un asunto
especial, es comprender el talante de nuestro fundador, es
ver una visión y un sueño plasmado y eternizado. Aunque
el kibutz no sea de los EAS, cuenta con la marca de la
espiritualidad EAS, fue pensado para la labor social y el
vivir en comunidad. En nuestros días hay un esfuerzo dé
que esto pueda vivirse y aunque alguno de los que están
allí no son EAS, reconocen la historia y saben que fue
un lugar construido en bases cristianas y completamente
humanísticas.
Al salir del Kibbutz grande uno puede cruzar la calle y
encontrarse con el “Kibbutz pequeño”, ésta manera de
nombrarlos es el reconocimiento que las personas del
sector, le han dado. Ir al Centro Comunitario Amexhe,
es comprender el sentido misionero que tiene todo ser

humano, no hay que ir muy lejos para hacer misión.
Pero este lugar lleva a la persona a compenetrarse con
la itinerancia EAS, que hace muchos años hicieron los
jóvenes de las comunidades y que hoy se podría pensar
en una posibilidad para vivir experiencia que aviven el
espíritu joven de los EAS a partir de actos concretos como
lo es la entrega al otro. Fotografía del lugar:
Actualmente, la labor social y estrategias de auto
sostenimiento del Kibbutz han ido emergiendo hasta
el punto que ayuda a visualizar un Kibbutz dispuesto a
acoger la mística EAS. Esta iniciativa de progreso del lugar
se podría aprovechar para divulgarlo, visitarlo, convocar

personas. Y lo más importante conocer los otros EAS del
mundo que están dispuesto a dar una mano cálida en todo
momento, ésta, fue la experiencia más clara que pude
vivir en México. A estos amigos les dedico esta fotografía
y prosa.
Conocer la comunidad geográfica,
Evidenciar lo vivido y acontecido.
Ver lo que allí continúa, después de tanto recorrido.
EAS que continúan transformando a nivel social,
Tantos amigos que de manera incondicional nos acogen.
Es poder conocer, evidenciar y ver la mística EAS en su
esplendor.
La experiencia de conocer y estar en el Kibbutz, aviva
mí caminar EAS, puede que en otras personas también
haga el mismo efecto. Sus pacillos, habitaciones, arboles,
cocina y lo que allí se hace invita a continuar. Hay lugares
cerrados y en nuestros días no explorados, uno de ellos es
la habitación del P. Antonio, la cual se mantiene intacta y
cerrada. Hay otro valioso lugar al que se puede acceder, es
la biblioteca del Padre, tiene muchos libros sin seleccionar y

en muchos rinconcitos se encuentran folletos y producción
EAS. Es bonito ver esto y sobre todo la cantidad de aporte
que allí se encuentra de los EAS colombianos, cabe la
siguiente invitación: ¿Qué podríamos hacer por este
lugar? Podría ser algo que motive a reconocer la historia
del fundador y los laicos que también lo fueron.
Fotografía de la biblioteca del P. Antonio “Espacios para
evidenciar la historia teológica y rinconcitos de los EAS, que
expresan el amor del, por lo vivido en las comunidades”.
Para finalizar, podríamos pensar en algunos retos para vivir
la experiencia del Kibbutz, estos pueden ser uno de ellos:
ser parte del voluntariado que se propone en la página
del Kibbutz, hacer fondos y actividades económicas para
realizar encuentros con jóvenes en este lugar, que las
personas más antiguas vayan y retomen espacios para
el histórico EAS, tales como la biblioteca y la habitación
del Padre, en el caso que esto sea posible. Otras ideas
pueden surgir, pero por el nivel histórico que tiene este
lugar, para algunos puede que no sea fundamental. Pero
para mí era necesario contar la experiencia mistagógica
que como EAS novata y teóloga en camino; este viaje

ha dejado en mí. Gracias a todos los que posibilitaron
que esto pasara, especialmente Carlos Mario, Lilo, María
Helena, Hernando, Enrique, Luz Alba, Ángela, Jaime y mis
amigos queridos de México Olga y Miguel, sin ellos los
días allá no hubieran sido igual.
¡El Kibbutz, puede ser un lugar para retomar!

Hacemásde20años,fuiinvitadaaconocerlasComunidades
Cristianas Comprometidas EAS, su filosofía y su estilo de
vida. La amistad para siempre, me atrajo tanto, que me
quedé. Otro de los atractivos era la comunidad geográfica
y para mí era lo más grande.
El kibutz siempre lo proyecté como lo más grande que se
pudiera alcanzar; el sueño del Padre Hortelano me parecía
esa utopía hecha realidad y en nuestro continente, donde
los que vivían allí eran unos privilegiados, porque podían
servir, vivir y convivir de una manera diferente, pero
entregada a la comunidad.
En 1999, tuve la fortuna de conocerlo cuando participé del
Encuentro Internacional de ese año. El lugar lo comparé
con la casa de los abuelos, esa casa acogedora, cálida y
linda, donde todos participaban de los quehaceres y donde
todos podemos ir. Así es el Kibbutz: la casa de todos.
El Padre Hortelano era el Padre o el Abuelo de todos,
siempre atento a todo, sus órdenes eran escuchadas y
obedecidas, dirigía de una manera espectacular, trabajaba
como ninguno y daba ejemplo como el que más. La casa
De Regreso
a Casa
Angela María Mejía
Medellín, Colombia

marchaba con varios matrimonios con sus hijos y muchos
jóvenes que pasaban mínimo un año, donde cada uno
tenía sus deberes y había que cumplirlos con orden,
puntualidad, mucha energía y gran alegría. Todo marchaba,
había varias empresas de las que el kibutz dependía y
todo funcionaba. El Padre Hortelano, no desperdiciaba
nada y a todos les conseguía oficio: la empresa de lácteos,
los sembrados conseguidos desde una tierra desértica, la
organización en la evangelización y los demás quehaceres
funcionaban rítmicos, precisos y eran ejemplo.
Hoy, 18 años después (2017), tuve también el privilegio
de volver a esa casa de los abuelos, la morada de muchos
sueños.
El Padre, el abuelo ya no está; se siente su ausencia, su
ojo puesto en todos los rincones ya no se percibe, solo
nos queda su ejemplo, solo nos queda su legado.
Ya su mano se ha alejado de los campos, su mirada se
ha apartado de los rincones, su lengua ya no predica
la Palabra, solo nos ha dejado su ejemplo, nuestro
compromiso, la tarea de seguir haciendo por él.
El legado de Antonio Hortelano no puede morir y en la
casa grande debe seguir permaneciendo su pensamiento,
su voz y sus acciones. HAY MUCHO EJEMPLO QUE NO SE
PUEDE DESPERDICIAR.

La pequeña comunidad EAS, ese espacio de “Encuentro
con los otros” de cuerpo presente; donde se comparte el
aliento, se siente el contacto, se recrea con los gestos, las
risas, las sonrisas de cada uno, se conversa, se descubre
se ora y reflexiona.
Ese encuentro: cálido, espontáneo, bondadoso y anhelado
que a lo largo de los años ha creado vínculos afectivos
muy fuertes y verdaderos.
A esta mi comunidad la invito a entablar un diálogo
abierto, argumentado sereno y creativo, sobre el Momento
Histórico que vivimos en el país, en el campo político,
social, económico, ético, etc. En donde la objetividad, los
argumentos, la bondad y la esperanza, primen sobre los
dogmatismos, la perfección y la verdad rebelada que cada
quien ostenta.
Un diálogo que no sea callado por el silencio, por el miedo
o la indiferencia.
Un diálogo en el que nos sintamos cruzados por el conflicto
y no como espectadores.
Una Invitación
de Corazón
Inés Carmona López.
Comunidad El Fuego.
Medellín-Colombia

Un diálogo que de ser posible nos lleve a ser creadores o
proponentes de alternativas que contribuyan a la solución
de los problemas de la sociedad con la que tenemos un
gran compromiso como profesionales y adultos.
Por último, un diálogo que nos convide a renovarnos como
comunidad y como seres singulares.
Cada vez que se me da la oportunidad de leer o escuchar
este Evangelio (Mateo 4, 18-22), me imagino a aquellos
cuatro pescadores humildes, sencillos, trabajadores y
me los imagino en el contexto de aquella época; luego
comienzo a divagar preguntándome: ¿Cuál habría sido
la reacción de Pedro, Andrés, Santiago y Juan cuando el
mismo Jesús en persona los llamó a ser Pescadores de
Hombres?
Seguramente por su condición humana les invadió tal vez
la duda, la inseguridad y el miedo, pero como sabemos
nuestro Señor los eligió para una misión tan valiosa,
importante y trascendental que implicaba un componente
Eas:
¡Pescadores de
Hombres...!
Jonathan Guachilema.
Comunidad Vida Nueva.
Daule - Ecuador

indispensable en ellos que es “la valentía”, esto sin duda
alguna marcó un claro “antes” y “después” para aquellos
pescadores. Jesús no los habría elegido si es que no
hubieran tenido aquel componente indispensable, y como
sabemos posteriormente Jesús no se equivocó; ya que
Dios es perfecto y elige a las personas adecuadas en las
misiones adecuadas.
Pienso que no es casualidad que los EAS estemos llamados
por Dios para ser reclutados por Él usándonos como
instrumentos para la noble y maravillosa misión de Pescar
Hombres. Sabemos que nuestras Comunidades son muy
diversas en talentos, pero precisamente esta diversidad
de cada uno de los miembros hace que nos movamos
hacia el mundo en distintos campos, pero conformando
una misma misión Evangelizadora que capta seres con
necesidad de Dios.
Nosotros como seres humanos imperfectos también
sentimos inseguridades, dudas y miedos, pero sabemos
en el fondo de nuestro corazón que nuestro amado Señor
Jesucristo nos ha metido en esto por alguna razón que
obedece a la misma finalidad. Nuestro buen pastor ha
elegido a sus ovejas valientes para que lideren procesos
de Salvación.
Esto ha marcado un antes y un después para cada uno de
nosotros, desde que aceptamos ese llamado de Jesús en
la orilla, sabemos que para bien ya no somos los mismos.
Dios nos está usando para su propósito.
¡Sigamos siendo EAS Pescadores de Hombres…!

Han sido muy lindos y enriquecedores estos 20 años que
vamos a cumplir de nuestra comunidad EAS (El Fuego).
El encontrar personas tan valiosas y compartir con ellas
en grupo es un regalo de Dios, porque los amigos son
unas perlas que debemos conservar, cultivar y siempre
llevarlas en el corazón. De cada uno hemos aprendido
algo: la prudencia, el respeto por las opiniones diferentes,
la puntualidad, la responsabilidad, el carisma de trabajar
por los niños y adolescentes con entrega y dedicación,
y también la alegría de los apuntes chistosos y muy
oportunos.
Es muy agradable encontrarnos los lunes para vernos y
compartir vivencias, reflexionar y opinar sobre las lecturas
hechas, y después de tomar un delicioso refrigerio, orar
en grupo. También, a veces, salimos de paseo o tomamos
parte en alguna actividad social o cultural.
Nos llamamos “El Fuego” y creemos que ese fuego se ha
mantenido encendido. Sería muy interesante que todas las
personas vivieran la experiencia de comunidad y además
poder sentir que Jesús es quien nos ha mantenido unidos.
Una Experiencia
de Amigos para
Siempre
Regina Saldarriaga.
Comunidad El Fuego.
Medellín, Colombia

También es importante resaltar los encuentros con otras
comunidades. Siempre hay algo de esto que nos queda:
no podemos vivir aislados, el compartir nos enriquece y
nos hace más humanos.
Hemos sido una comunidad estable. Quienes se han
retirado lo han hecho por motivos de fuerza mayor
como el traslado a otra ciudad, y hemos contado con el
privilegio de recibir a otras parejas que nos acompañan
hace bastantes años. El llamado a vivir en comunidad
con entrañables amigos es algo que tiene una fuerza de
Dios. Jesús nos enseñó a vivir en comunidad y debemos
seguir sus enseñanzas; le damos gracias por este regalo
tan bello.
Por motivos de trabajo, había dejado esta hermosa
manera de vivir en comunidad. Gracias a la invitación de
Querétaro y de mi hermana Zonia, pude reencontrarme
con los principios del ideario en un gran encuentro y volver
a vivir el calor de comunidad.
Mi Retorno a
los EAS
Ana María Romero.
Comunidad Virgen de Guadalupe.
La Paz, Bolivia

Noté un gran cambio en mi vida, teniendo una comunidad
donde aprendí a vivir como hermanos por siempre y ha sido una
hermosa experiencia haber podido estar en este Encuentro.
Pero esta experiencia no se puede quedar así, hay
muchos compromisos por cumplir, tenemos mucho que
hacer: crear nuevas comunidades, evangelizar día a día,
revalorizar el compromiso, incluyendo el de contribuir con
día de vida y siempre dar testimonios de vida.
Todo fue una gran experiencia para mí, he aprendido a
vivir plenamente en comunidad, mi deber es transmitir
todo esto que fue maravilloso.
Agradezco a Dios y a toda la comunidad que asistió a
ese bello país de México, quiero dar las gracias a Antonio
Hortelano, por enseñarme y ponerme en el camino de ser
amigos por siempre, me sentí muy feliz de encontrar gente
tan entregada al servicio del Reino de Dios, a Antonio,
Ángeles nuestros coordinadores internacionales y a todo
su equipo de trabajo, que Dios los bendiga, al igual que
a todos mis amigo EAS y a mi hermana , gracias a todos
ellos pude estar en este encuentro y reencontrarme con
los principios de una vida en comunidad.

Para nosotros, Rosy y Ricardo Paredes, los EAS han sido el
medio que ha permitido:
• Conocer más a Jesús y tratar siempre de seguir sus
enseñanzas para vivir el reino de Dios.
• Vivir el ideario.
• El participar en ese amor comunitario que se da en
los encuentros nacionales e internacionales.
• Crecer en el servicio a las pequeñas comunidades y
sus familias
• Ser testigos de los frutos de la palabra
Ingresamos a las comunidades EAS, en agosto del año
2001 cuando Tarsila y Ana Fabiola nos hicieron la invitación
a constituirnos en comunidad y fue así como nació nuestra
pequeña comunidad “Amor y Fe”
En nuestro caminar hemos tenido luces y sombras.
La comunidad “Amor y Fe” desapareció debido a que
un problema familiar entre comunitarios hizo que la
comunidad se dividiera y aun cuando se hicieron esfuerzos
¿Que han sido
los EAS en
Nuestras Vidas?
Rosy Michaud y Ricardo Paredes.
Comunidad Amigos de Jesús.
El Salvador

por sacar de la comunidad ese problema familiar, no se
logró. Otra triste experiencia tuvimos cuando cambiaron
al párroco que apoyaba nuestro trabajo en una localidad
llamada “El Rosario” en el departamento de Chalatenango.
Allí llegamos a tener dos comunidades de adultos, dos
de jóvenes y una de niños que manejaban los jóvenes.
Los nuevos párrocos, que todavía están, nos quitaron su
apoyo y de todo esto solo queda una comunidad que se
resiste a desaparecer
Conocer más a Jesús
Cuando nos iniciamos en nuestra pequeña comunidad, no
sabíamos realmente a que nos enfrentaríamos. La razón
básica por la cual ingresamos a ella, fue nuestro interés
por el futuro de nuestros hijos: Sabíamos que había
otros comunitarios que tenían hijos y que, mediante la
comunidad, nuestros hijos se harían amigos de los hijos
de otros comunitarios.
Durante los primeros seis meses sólo tuvimos
acompañamiento en dos juntas y las demás reuniones
las realizamos consultando e improvisando con la ayuda
del Espíritu Santo. Dado que las reuniones semanales
tienen como centro la reflexión del evangelio, ello hizo
que nuestro interés en Jesús se acrecentara y llegamos a
la conclusión de que era necesario saber más de Jesús.
Ahora, a nuestra edad, vamos todos los lunes en la mañana
a la “Escuela de la Fe” para conocer más a Jesús, la Virgen
Maria y la Iglesia. Esto nos da más seguridad cuando nos
toca desarrollar algún tema o hacer algún comentario. El
conocer más a Jesús nos lleva a tratar de hacer viva la
palabra.

Crecer en el servicio a las pequeñas comunidades
En nuestro caminar, hemos tenido la suerte de recibir
itinerantes procedentes de Colombia y de México. Si bien
es cierto que de todos los itinerantes incidieron mucho en
mejorar nuestro desempeño y amor a los EAS, la venida de
Reynaldo Peña es la que más huella ha dejado: trajo un
plan estructurado de cinco años con un desglose de lo que
se debe hacer año tras año. Para el primer taller de valores
familiares en la zona alta de Chalatenango nos pidió que
tanto Lorena, Arturo, Rubenia y nosotros dos diéramos
temas durante el retiro. Para eso nos asignó los temas a
desarrollar, nos preparamos y expusimos ante él y Licha.
Ellos nos hicieron las observaciones que consideraron
prudentes y nos lanzaron al ruedo. Resultado: ahora los
EAS de El Salvador tienen su propio equipo de retiros y se
han ido incorporando más elementos EAS, incluso en la
zona alta de Chalatenango, los retiros que se están dando
ya, incluyen parejas de esa zona que desarrollan temas.
se persigue que ellos puedan hacerlo por sí solos.

Ser testigos de los frutos de la palabra
Nuestro principal proyecto lo constituyen las comunidades
que, con el soporte de Reynaldo y Clemencia y Enrique de
México, los “espositos”, junto con el padre Jesús Miranda,
párroco de La Granadilla, se hicieron realidad en el año
2011. la parroquia Nuestra Señora de Guadalupe, cuenta
con once localidades y en 8 de ellas se ha formado una
comunidad. Todas las comunidades son de parejas.
Las comunidades forman parte del Consejo Parroquial y
pertenecen al ministerio de familia. La comunidad que
mejor desempeño tiene es la de Los Planes. Se incluyen
algunas fotografías que dan testimonio del trabajo
realizado.
Testimonio de un trabajo en bien de las comunidades
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Es un placer saludar a todos los hermanos EAS que
leen este texto. Somos Carlos y Alexita de la comunidad
“Espigas de Amor” de Durán – Ecuador. Hablar de nuestro
testimonio como pareja en las comunidades EAS, trae
consigo remembranzas, y a su vez el hecho de evaluar
nuestro antes y después de este maravilloso encuentro
cercano e íntimo con Jesús.
Pues ahora nos damos cuenta de tantos momentos
desperdiciados en festejos exagerados sea con familia
o amigos, jornadas de trabajo sin límite de tiempo, o
momentos de ocio de un dizque “descanso” que al final
nos dejaba más cansados.
Pero vemos con alegría como todos esos momentos se han
ido llenando completamente de un nuevo estilo de vida,
donde prima la vida en comunidad, desprendiéndonos
de nuestro tiempo para entregárselo al señor, ya que,
actuar en EAS es una entrega constante al Padre Celestial
iluminados por el Espíritu Santo.
Todavía recordamos la primera vez que, sin saber dónde
Un Nuevo
Estilo de Vida
Carlos Figueroa Mora y Alexandra Luna León.
Comunidad Espigas de Vida.
Durán, Ecuador

íbamos, nos invitaron a una reunión que se estaba
realizando en la terraza de una escuela llamada “El Mundo
del Saber” en la Cdla. El Recreo de Durán. Subimos los
dos, y de repente un sinnúmero de personas de diferentes
nacionalidades se nos acercaban y nos abrazaban, como
si los conociéramos de toda la vida. Nos quedamos
pasmados de ver tal derroche de hermandad y amor, que
debería de venir de algo o alguien muy especial, después
lo comprendimos, solo podía venir directamente de JESÚS.
Esa fue la motivación para empezar a asistir a las reuniones
semanales, en las casas de los demás miembros de esta
maravillosa comunidad llamada “Espigas de Amor”. Han
pasado ya ocho años desde esa experiencia de familia
universal. Pero nuestras ganas de mantenernos como
EAS se han fortalecido, aun cuando en momentos la
convivencia se ha estancado y hemos tenido que darnos
unas haladitas de orejas entre nosotros, para retomar el
rumbo de nuestra comunidad. Nos hemos encontrado con
deserciones, falta de asistencias, incomprensiones, pero
en contrapartida siempre llegábamos a la conclusión de
que sin EAS nuestras vidas ya no serían las mismas.
Este fortalecimiento, obedece al hecho de participar
activamente en actividades comunitarias como las misiones
en áreas periféricas, los programas de nuestra iglesia
“San Juan XXIII”, en las preparaciones prematrimoniales,
charlas a parejas con problemas, asistencia a jóvenes en
el vicio de drogadicción, en fin, en toda aquella actividad
que nos hace sentir que le damos nuestro servicio a Dios
nuestro creador.
Y como pareja matrimonial, nos ha hecho compenetrarnos
de tal forma, que entendemos claramente el concepto de
ser una pareja de tres, es decir; Carlos, Alexita y Jesús.
Lo cual nos lleva a tomar los obstáculos y calamidades,

alegrías y triunfos con madurez y humildad. Caminando
siempre tomados de la mano (dicho literalmente)
pensando y entendiendo la voluntad de Dios, con nuestros
hijos (Kenny y Kiari), a cada paso que damos. Lo que
nos procura un ambiente de seguridad espiritual muy
renovadora y reconfortante.
Este compromiso se hizo más efectivo, cuando hace tres
meses, nos visitó un hermoso matrimonio; Galo y Mercy
(coordinadores nacionales), quienes nos comunicaron
que el comité nacional había decidido que nosotros
seamos los coordinadores del Sector de Durán, noticia
que ya la veníamos sospechando desde el momento que
nos avisaron de su visita. Y por lo cual con anticipación
habíamos conversado de dicha posibilidad y de todas
las responsabilidades que consigo venían, considerando
el hecho que en otras ocasiones ya nos habían hecho la
propuesta y esta vez no podíamos negarnos al llamado de
nuestro Señor.
Es por todo esto, que podemos testimoniar que nuestra
vida en las comunidades EAS ha sido un verdadero
regalo de Jesús, pues nos ha traído muchas bendiciones
y la oportunidad de servir de manera efectiva a nuestro
prójimo, respondiendo a los lineamientos del plan de Dios.
¡Qué vivan los amigos por siempre y para siempre EAS!

Hoy queridos hermanos en Cristo Jesús, les comparto en
este breve escrito, pero enorme y lleno de sentimientos, una
muy pequeña parte de nuestro caminar al lado y sostenidos
siempre de su mano de nuestros amados y queridísimos
Licha y Reynaldo Peña (Q.E.P.D).
Fue a través de ellos que llegamos mi esposa y yo a vivir este
increíble estilo de vida, ellos nos llevaron con su espíritu a
conocer a Cristo Jesús, nos enseñaron lo que es realmente
la humildad y el servir al más necesitado viendo en su rostro
a Jesús resucitado.
Fue de su mano fuerte, segura y llena de energía que nos
capacitaron como facilitadores para dar talleres de valores
y conyugales, muchas veces en casas de retiros, otras más
en alguna escuela y otras más debajo de un árbol, nunca
perdían la oportunidad de hablar del amor hacia nuestro
prójimo, siempre abriendo brecha en su caminar con el
corazón dispuesto a dar.
En Rey, se cumplió en su totalidad nuestra mística EAS,
“Amigos para siempre pase lo que Pase”, formó parte de
nuestra comunidad “Plenitud de Vida” en sus últimos años
de vida, ahí viéndonos a los ojos siempre nos llenaba de
sabiduría con sus reflexiones tan profundas y llenas de amor.
Nuestro Caminar
al Lado de Rey
Y Licha.
Antonio Verduzco Solis.
Comunidad Plenitud de vida.
Querétaro, México
Coordinador internacional.

Decía: “En la comunidad se comparte vida, alegría y tristeza”,
ahí es donde vemos y compartimos con nuestros hermanos
y viendo a los ojos de cada uno sus sentimientos. Profundo
admirador de “San Pablo”.
Dios nos dió la oportunidad para que Rey y Licha los cruzara
en nuestro camino, camino que infinidad de veces lo
recorrimos juntos, incansables en su tarea del servicio, tanto
en México como en el extranjero.
Siempre llenos del Espíritu Santo, cargados de alegría
y energía, de día y de noche, promoviendo nuevas
comunidades, el mundo le quedó chico a semejante
personaje, su sonrisa tierna, dulce y amorosa cautivaba
a cualquiera: El Salvador, Uruguay, Chile, Ecuador, Perú,
Guatemala, Honduras, Bolivia, España, México etc. etc.
Nuestro amado Reynaldo nos fue formando a mi esposa y a
mí, desde hace más de 20 años por este caminar de nuestras
amadas comunidades EAS, para formar parte de equipos
talleristas, comités de ciudad, nacionales y finalmente en la
Coordinación Internacional, “cuanto te extrañamos querido
REY”.
Reynaldo y Alicia (Rey y Licha)
Nos dejaste una gran tarea, el compromiso es grande, con tu
apoyo y el de Dios lo cumpliremos, nos unimos de igual forma
al que le dejaste en la víspera de tu partida al encuentro con
él Señor, a tu amada esposa Lichita, “Ya me voy tienes que
ser fuerte”, y Lichita lo está cumpliendo.
Es y siempre lo será, que paso a paso en nuestro camino
siempre estarás presente, te amamos querido Rey.

Dentro de la dinámica que el Papa Francisco ha querido
imprimirle a la Iglesia y siguiendo su invitación a la
renovación de los movimientos, organizaciones y
comunidades, las pequeñas comunidades EAS también
debemos aceptar el reto de evaluar nuestros métodos
operativos, nuestras formas de invitar, de convencer, de
formar, de vivir y de consolidar la dinámica interna dentro
de cada comunidad. Es urgente revisar y actualizar
nuestros métodos de crecer, divulgar nuestros caminos y
contribuir a la evangelización que es la misión esencial de
la Iglesia y que como tal es universal, se dirige a todas las
personas, es incluyente, es cercana, es acogedora.
Partimos de la riqueza enorme del patrimonio intelectual y
espiritual que nos transmitió Antonio Hortelano y que ha
configurado la vida de muchos en estos casi 60 años de
nuestras comunidades.
Pero ese legado debemos retomarlo para renovar nuestro
sentido de pertenecer a la Iglesia de hoy, empezando
por reconocer las realidades sociales, culturales,
comunicacionales, familiares, ideológicas, políticas de
Regreso a
las Fuentes
Hernando y María Helena Villa.
Comunidad La Alegría.
Medellín, Colombia

muchos otros tipos que son evidentes en nuestros países.
Tales realidades debemos leerlas y asimilarlas como
hechos, a partir de los cuales, actualicemos los métodos
de acción y las dinámicas de nuestros encuentros; pero,
principalmente, sobre los cuales definimos nuestras
proyecciones hacia afuera de nuestra vida comunitaria,
frente a nuestro compromiso de transparentar la presencia
viva de Jesucristo, centro de la comunidad. La pequeña
comunidad no es un refugio frente a la transformación
que se está dando en todos los ámbitos de la realidad. Es
un punto de partida para fortalecer lo mejor de nuestra
experiencia y adecuar los criterios que manejamos a la
hora de proyectar la consolidación y el crecimiento de las
pequeñas comunidades.
“Volver a las fuentes” para nosotros debería significar:
A) Una apertura mental. Si no abrimos la mente para
conocer la realidad y adaptarnos o reinventarnos, nos
sucede lo que al paracaidista que en el momento oportuno
olvida accionar el mecanismo que abre el paracaídas.
B) En los procesos de revisión, retoma de las fuentes
esenciales (refundación) y la planeación, es fundamental
comprometernos también con el corazón y no solo con la
mente o la razón. El entusiasmo, la actitud de apertura e
inclusión, nacen de un corazón que se ha dejado tocar por
la vida de Jesús y por el ejemplo de los cristianos que nos
han legado su total disponibilidad, su entrega incondicional
al servicio de las comunidades y de las personas concretas
con las que caminaron. Para transparentar el mensaje y
la vida de Jesús es necesario experimentar y comunicar
hechos de vida que puedan animar a otros, que les
permitan algún aprendizaje vital en el proceso de su
formación cristiana. Solo comunicar conceptos y doctrinas
no es suficiente. Nuevas actitudes, lenguaje fresco y

concreto, alegría, cercanía y apoyo real son un medio más
claro que las palabras o el conocimiento.
C) En la situación actual de las comunidades es
fundamental priorizar el trabajo de promoción de nuevas
personas y comunidades. A cada uno de nosotros le
corresponde la responsabilidad de visualizar posibles
personas o familias cuyo estilo de vida y actitudes estén
en la línea del estilo de vida comunitaria EAS, de su
propuesta de amistad y de compartir integralmente lo que
somos, hacemos, tenemos, creemos y sentimos.
El relevo generacional es urgente. Solo así mantendremos
la continuidad de esta maravillosa experiencia en muchas
ciudades. El relevo también nos aporta la riqueza de la
diversidad (en modelos de espiritualidad, en estilos de
familias, en experiencias laborales y sociales, en dinámicas
comunitarias, entre otros.)
Para la promoción de nuevas comunidades es necesario
replantearnos algunos conceptos que no atienden
plenamente las realidades familiares y sociales actuales:
las nuevas formas de familia, las tendencias demográficas
(pocos hijos, más adultos solos); mayoría de uniones por
fuera de vivencias sacramentales e incluso de formalidades
civiles; los separados vueltos a casar, los hijos mayores que
prolonga por años su vida con padres adultos mayores;
las mujeres cabeza de familia que abundan en nuestros
países, entre otras realidades, para que revisemos en el
próximo Consejo Permanente cuales deben ser las normas
del Ideario que contemplen opciones frente a estas
realidades sociales y frente a las experiencias ya vividas
en muchos movimientos y comunidades eclesiales que
vienen experimentando procesos de apertura e inclusión
en sus acciones de evangelización, hacia una construcción
de Iglesia de puertas abiertas y no de “aduanas”, como lo

ha planteado el Papa Francisco en distintas oportunidades.
Una visión simplemente “conyugalista” no parece
adecuada. Tenemos que hacer posible la coexistencia
en nuestras comunidades de matrimonios con viudos,
separados, separados vueltos a casar, abuelos encargados
de nietos, madres cabeza de familia.
Se regresa a las fuentes para reafirmar identidad, pero
también para analizar adecuaciones o actualizaciones
necesarias, de cara a las realidades de hoy. Se regresa
el pasado no para añorar “tiempos felices” sino para
hacer memoria de los lazos esenciales que construyeron
los primeros EAS y generar el compromiso de seguir
impulsando con entusiasmo el desarrollo comunitario,
confiados y esforzados, sabiendo que así caminamos con
el Señor, descubriendo nuestros esfuerzos por servir no
solo a los amigos más cercanos sino también a tantos
que no han descubierto la riqueza de la unión de parejas
y familias estables, interdependientes y el camino de
crecimiento integral.
Pero la renovación institucional solo es posible si
previamente hacemos la renovación personal, la búsqueda
del rostro del Señor en el necesitado, marginado o limitado
en sus oportunidades. Es que para ser misioneros,
debemos ser primero discípulos comprometidos.
Las huellas de hace casi 60 años son las mismas huellas de
quienes caminaron con el Señor en la primera comunidad
de hace 2.000 años.
Preparémonosparacelebrarlos60añosdelascomunidades,
con una renovada conciencia del fundamento evangélico
de la fraternidad comunitaria, redescubrimiento de los
valores y carismas esenciales de las propuestas creativas

y proféticas de Antonio Hortelano; con un esfuerzo
permanente de profundizar en la formación para que
estemos más conectados con las realidades de la Iglesia
y del mundo actual; con una búsqueda personal de una
espiritualidad aterrizada en la cotidianidad y en el entorno.
Retomemos la esperanza en que Dios nos espera en el
futuro y nos ilumina en la búsqueda de caminos nuevos y
frescos de vida comunitaria.
Decía mi madre: No es lo mismo decir “¿Qué haré?, a
decir, ¿qué haremos?”
La entiendo perfectamente, ella, madre separada de su
esposo, de la década de los cincuenta; angustiada, por
todo lo que significaba su estado y siendo parte de una
familia machista, me ha motivado a estudiar y comparar
la vida de las Mujeres en la época de Jesús; a principios
del siglo primero, finales del de antes de Cristo y darme
cuenta de que aún ahora, las cosas no han cambiado,
radicalmente, tal vez, por no conocer el comportamiento
La Relación de
Jesús con
las Mujeres
de su Época
Dora Alicia Valero Gómez.
Comunidad Cabañas.
Saltillo Coah, México

y el amor de Jesús con ellas.
Analizando el Nuevo testamento podemos ver ¡Cuántas
mujeres seguían y amaban a Jesús! Pero veamos el
contexto de Galilea y de Israel en general:
Una buena parte de los pobres que rodeaban a Jesús eran
mujeres; ser mujer, en esa sociedad patriarcal era estar
destinada a vivir en estado de inferioridad y sumisión a
los varones.
Primero al padre; después al marido; y si enviudaba, a los
hijos o volver a su padre y a sus hermanos.
¿Cómo no estar así, sujeta a los varones?, si fue creada para
ser una ayuda “adecuada” para él, pero habiendo sido ella
la responsable de haberle dado el fruto prohibido a Adán,
fue considerada hasta hace poco, fuente de tentación y
de pecado, no solo entonces, ni para el judaísmo, sino
también para la misma Iglesia Católica.
Su función social era tener hijos y servir fielmente al varón.
Los deberes eran siempre los mismos; moler el trigo, cocer
el pan, cocinar, tejer, hilar; lavar el rostro, las manos y los
pies de su hombre. Satisfaciéndolo sexualmente y dándole
hijos varones para asegurar la subsistencia de la familia.
Por eso las parábolas de Jesús tenían tanto significado
para ellas.
Fuera de casa las mujeres no existían; al salir de la misma,
debían hacerlo acompañadas de un varón, tapado el rostro
con un velo y permanecer calladas y apartadas del lugar
donde ellos estaban, no asistían a banquetes, salvo casos
muy especiales; su testimonio no era aceptado como
válido.

En la vida religiosa era igual, el varón controlaba todo
lo del Templo, aún ahora podemos ver resabios de ello:
en el muro de los Lamentos, al visitarlo, se separa a los
hombres de las mujeres pues cada género tiene su área
específica.
Por ello la conducta contraria que era la de las mujeres
que rodeaban a Jesús, escandalizaba, tanto a los fariseos
y en general a los judíos, pues las consideraban mujeres
fáciles.
Él las aceptaba en su entorno, no las juzgaba pues
consideraba que para ellas igual que para el hombre era
el reino de Dios.
En los pequeños pueblos de Galilea, las costumbres eran
menos estrictas, las mujeres salían más libremente de
casa, acudían al campo a trabajar y no siempre se cubrían
el rostro con el velo.
Las mujeres que se acercaban a Jesús eran del entorno
más bajo de aquella sociedad; bastantes eran curadas
por Jesús, probablemente eran mujeres no vinculadas
a ningún varón, viudas indefensas, esposas repudiadas,
mujeres solas sin recursos, poco respetables y de muy
mala fama. Algunas, prostitutas, consideradas como la
peor fuente de impureza y contaminación. Jesús las acoge
a todas, en las comidas de carácter festivo, las mujeres
son símbolo y anticipación del reino de Dios.

Amigo de las últimas
Jesús ni las juzga ni las condena, las acoge con el amor
comprensivo del padre, a sabiendas de que rompe
con el código de pureza, que aún las mujeres llevaban
fuertemente tatuado en todo su ser. Nunca habían estado
aquellas mujeres tan cerca de un profeta, ni habían oído
hablar así de Dios, algunas, lloran de agradecimiento.
Jesús es desacreditado por ser “amigo de pecadores”,
pero responde: “Los recaudadores y las prostitutas entran
antes que ustedes en el reino de Dios”. (Mt 21-31).
En ningún momento se enreda en cuestiones de sexo
y pureza ritual; se acerca a las mujeres sin recelo y las
trata abiertamente, sin dejarse condicionar por prejuicio

alguno; como con la Samaritana; para ellas significaba
liberarse momentáneamente, de la vida de marginación y
trabajo que tenían. Algunas se aventuraron a seguirlo por
los pueblos de Galilea y hasta Jerusalén y lo acompañaron
incluso hasta el momento de su muerte.
Rompiendo esquemas
EllasvenenÉlunaactituddiferente,sólorespeto,compasión
y una simpatía desconocida. Lo más sorprendente es ver
como de manera sencilla y natural va redefiniendo; desde
su experiencia de Dios, el significado de ser mujer.
No previene a los varones de las artes seductoras de las
mujeres, sino que los alerta frente a su propia lujuria
“todo el que mira a una mujer deseándola, ya ha cometido
adulterio con ella en su corazón” (Mt5,28-29). En ello pone
el acento en la responsabilidad de los hombres.
Para Jesús, el que la mujer tenga hijos no lo es todo
en la vida; por muy importante que sea, hay cosas más
importantes “dichosas más bien, las que escuchan la
palabra de Dios y la cumplen”, su grandeza y dignidad se
funda en la capacidad para escuchar el mensaje del reino
de Dios y entrar en él.
Martha se afana en tratar con todo esmero a Jesús, María,
sentada a sus pies, escucha su palabra “María ha escogido
la parte buena que nunca le será quitada”.
Para la mujer también hay lo que para el varón, y es la
escucha de la palabra de Dios.
Jesús reacciona con audacia ante la doble moral de los
varones para enjuiciar a la mujer: Cuando llevan a su

presencia a una sorprendida teniendo relaciones sexuales,
Él dice “Aquel que esté libre de culpa que lance la primera
piedra”.
Al quedarse solos, Jesús la mira con ternura, le expresa
todo su respeto y con cariño pregunta: ”Mujer ¿Nadie te
ha condenado”? Ella responde “Nadie Señor” “Tampoco
yo te condeno, vete y no peques más”.
Una mirada diferente
Probablemente ellas transmitieron a otras el mensaje
de Jesús, lo entienden tan bien, lo podemos ver en las
siguientes parábolas: Los lirios del campo. La viuda
inoportuna, La levadura en la masa. Con las parábolas que
les llegan y con sus gestos, lo sienten muy cerca.
Dios siente como suyos a los que viven perdidos y no
descansa hasta verlos con Él: Lo oveja perdida, la moneda
perdida.
Jesús presenta a las mujeres como modelo de fe,
generosidad y entrega desinteresada. Lo vemos
claramente en las parábolas: La viuda que entrega dos
moneditas, La mujer que le toca el manto porque desea
ser curada de su estado de impureza por sus constantes
pérdidas, la petición de la mujer de Tiro que solicita la
salud para su hija, enferma, desquiciada, poseída por un
espíritu inmundo, y que la obtiene, haciendo que el propio
Jesús se deja enseñar y convencer por ella de que el reino
de Dios es para toda la humanidad, no solo para el pueblo
judío.

Un espacio sin dominación masculina
Todo lo realizado por Jesús pone en crisis costumbres,
tradiciones y prácticas que oprimían a la mujer. Jesús
transforma todo, promueve relaciones considerando que
hombres y mujeres son creados y amados por Dios y los
acoge como hijos e hijas de igual dignidad. Ve a todos
como personas responsables ante Dios.
Jesús dice “Dios ha creado al hombre y a la mujer para
que sean una sola carne.
En el reino de Dios todos han de sentarse en torno a
Jesús, renunciar al poder y al dominio sobre los demás
para vivir al servicio de los más débiles e indefensos.

En la nueva familia de Jesús comparten vida y amor
fraterno.
La imagen de Dios padre que ofrece Jesús tiene rasgos
entrañables y maternales.
Discípulas de Jesús (Mathetría)
Seguramente a las mujeres que seguían a Jesús, Él mismo
las invitó a quedarse, son hermanas de la nueva familia
que va creando. Hay varias mujeres mencionadas en
el nuevo testamento, además de su madre y de las ya
conocidas: María de Magdala, María la madre de Santiago
el menor y de José, y Salomé.
Aunque no se menciona que hayan estado en la última
cena, seguramente estuvieron allí, pues no se concibe que
habiendo estado siempre con Jesús, no hubieran estado
en esa celebración tan importante para los judíos.
A la muerte de Jesús los hombres huyen, las mujeres
permanecen fieles: el primer anuncio de la resurrección
está ligado a las mujeres. Son modelo de discipulado por
su entrega, su actitud de servicio y su fidelidad total a
quien las hizo sentir personas.
Tal vez en el envío de dos en dos, hayan ido matrimonios
pues ambos conocían el reino que predicó Jesús.
Su mejor amiga
La más querida y entrañable era María Magdalena,
mujer poseída por espíritus malignos y que Jesús curó
“expulsando de ella siete demonios” (Lc8,2). Nació en

Magdala, ciudad situada junto al lago de Genesaret, a
unos 5 km. al norte de Tiberíades.
Se encuentra a Jesús y comienza a vivir, es un hombre
que la ama por ella misma, desde el amor y la ternura de
Dios. En Él descubre su centro, todo lo que necesita para
ser una mujer sana y viva.
El sentimiento de María a la muerte de Jesús es su propia
muerte, pero al verlo resucitado, sabe que podrá seguir
sin Él, infundiendo la fe del resucitado y ofreciendo todo
el amor que lleva en su corazón.
Ahora sé, con certeza, que a mi madre la acompañó y
acogió siempre Jesús, que el conocerlo, le dio sentido a su
vida y fortaleza, pues aprendió a vivir el reino.
Si Jesús ama así a las mujeres ¿podremos, quienes
lo tenemos como hermano, amarlas y formarlas así en
nuestros días?

La vida comunitaria de las pequeñas comunidades EAS
tiene mucho que ver con las reuniones de los amigos que
se encuentran regularmente, sea semanalmente con su
comunidad propia, o en las reuniones mensuales de la
comunidad de comunidades o en las distintas ocasiones
en que se hace trabajo en los grupos de trabajo. En tales
reuniones hay muchas oportunidades para practicar y
desarrollar el más exquisito de los artes humanos: el arte
de conversar.
Quiero empezar mis reflexiones con una poesía que escribí
hace tiempo y que inclusive convertí en una canción
bolero que canté y grabé con mi esposa (ver https://www.
youtube.com/watch?v=taG9o0JQSak)
Conversar
Conversar sembrando confianza
en ambiente de unidad,
nos libera de los secretos
y hace surgir impulsos de amistad.
Te escucho con oído atento
así puedes descansar
El Arte de las
Conversaciones
en la Pequeña
Comunidad
Enrique Posada R.
Comunidad De la Luz.
Medellín, Colombia

de esas cosas tan escondidas
que te impiden vivir pleno y vital.
Eso amigo yo te ofrezco:
y no tienes que temer;
tú me escuchas, yo te escucho
y los dos quedamos bien.
Encontrar alguien que te quiera
y que escuche sin parar
deja tranquila la conciencia,
y hace sentir liviano el caminar
Cómo estimular el arte de las conversaciones
Pienso que lo más importante es tener la idea de
que conversar es muy placentero, ya que permite el
intercambio de ideas, de sentimientos, de pensamientos,
de propuestas, de preguntas y de respuestas, de historias
y anécdotas, de inquietudes y de valores, entre los seres
humanos.
Un segundo aspecto es apreciar en los demás a seres
dignos de ser escuchados con atención y dispuestos a
escucharnos con aprecio. Tener confianza en los demás
y tenerse confianza para intercambiar momentos de
escucha y de comunicación con ellos. Establecer acuerdos
de amistad y de buena fe con los demás, que permitan
abrir espacios para las conversaciones.
Un tercer elemento es atreverse a ser creativos para
encontrar variedad y gusto en las conversaciones, que
ofrecen la oportunidad para crecer, paras sentirse libre
y acogido, para ensayarse como comunicador y como
persona que escucha con atención.

Un cuarto elemento es comprender los mecanismos que
contribuyen a que surja la palabra, a que se estructure la
frase, a que aparezca la idea propia que se expresa y la
idea del otro que se escucha. El mecanismo esencial es
el de la intención, que aparece como un susurro interior,
como una posibilidad, como una energía sugestiva que
da poder y capacidad para desatar las conversaciones. La
intención adquiere vida y realidad a través de la atención,
que es la energía creadora, es decir, lo que mantiene
y nutre las acciones de las personas. La atención me
permite extenderme hacia el otro, con capacidad para
observarlo, para apreciar detalles, para escuchar palabras
y frases. Como resultado de la atención surgen la palabra
que comunica y el estado de prestar oídos a los demás.
La palabra tiene manifestaciones verbales, pero también
corporales, gestuales, vibratorias, estados de excitación.
Establecidas las apalabras y los gestos y actitudes que
comunican, hay que asegurar el flujo de la conversación,
con base en la motivación y las ganas que se asignen y que
se tengan. Acá reviste gran importancia caer en cuenta
de la importancia de retroalimentar el proceso, mediante
flujos de atención, de escucha, de reconocimiento, de
imaginación, de intuición, de propuestas y de saberes.

Una consideración adicional es considerar que la atención
debe ser de alta calidad, es decir, responsable, limpia
e inocente; sin daños ni críticas ni juicios destructores;
genuinamente apreciativa y enamorada del otro.
La amplia gama de las conversaciones
Vale la pena conocer, practicar, recrearse, ensayar, ser
atrevido, recorriendo un universo, que es amplio y
generoso, sin dejar que se agoten las posibilidades. Como
el mundo del arte que comprende la pintura, la música,
la danza, el teatro, la poesía, el canto, entre otras ricas
manifestaciones, así es el arte de conversar. Describamos
algunas de sus muchas variaciones, con la intención de
abrir espacios mentales para ser imaginativos y creativos
cuando conversemos.
La descripción consiste en la capacidad que tenemos
para detenernos en los objetos, observar sus abundantes
detalles y disfrutar al comunicar lo que se observa, lo que
se aprecia, lo que se experimenta, lo que se siente; por
medio de frases vivas y gustosas, que van recorriendo
a los objetos, admirando detalles, formas, atributos,
espacios, singularidades, texturas. Nos podemos entrenar
en las habilidades para describir, escogiendo objetos,
prestando atención, descubriendo sus límites, observando
detalles y escogiendo frases y palabras para resaltar y
experimentar todos esos atributos. Nos podemos desafiar
a nosotros mismos y a nuestra imaginación y creatividad,
describiendo objetos en forma variada, por ejemplo, en diez
formas distintas; utilizando para cada forma intenciones,
palabras, pensamientos y frases distintas y estimulantes.
La habilidad para contar historias consiste en la capacidad
para establecer hilos conductores entre los objetos, las
personas, los espacios, el tiempo, las causas y los efectos,

desarrollando estructuras coherentes; entrelazamientos
sugestivos y novedosos; relaciones útiles o estéticas;
reminiscencias o evocaciones. Se trata de invitar a los
demás a viajes mentales, en los cuales el ser imagina
y siente cercanía con el universo de las cosas, de las
personas, de los seres vivos, de sus representaciones, de
sus existencias posibles, reales o imaginadas. Participan
la memoria, los recuerdos, las imágenes, las palabras, las
relaciones, en una danza que motiva y que invita a la
escucha.
Preguntaresunahabilidadquedavidaalascomunicaciones,
cuando se hace con interés y curiosidad genuinas, con
el deseo de enriquecer los momentos, de abrir opciones,
de explorar espacios y posibilidades. Consiste en tener la
intención de inquietar al otro, de mostrar interés y aprecio,
de permitir que se enriquezcan las descripciones y las
enseñanzas, de mostrar que se ha escuchado el discurso,
que se está atento, que la comunicación puede continuar.
Responder es la habilidad complementaria de preguntar y
tiene efectos similares para estimular las conversaciones,
en la medida que se haga de manera abierta, transparente,
confiada, motivada hacia el otro, con intención de
dialogar y de dar opciones a nuevos puntos de vista;
con la intención de completar el discurso, para que no
queden innecesariamente brechas o hilos sueltos o con
la intención, cuando sea del caso, de abrir los temas y
dejarlos como asuntos que se deben seguir explorando y
definiendo.
Leer en grupo, es un verdadero arte, que contribuye
a las buenas conversaciones. El lector escoge un tema
que le parece interesante y que desea compartir, con la
intención de fundamentar espacios para que se generen
conversaciones, intercambios, sabiduría individual y

colectiva, para que haya disfrute, para que se saboreen
las ideas y las palabras. Lo lee en forma atenta, haciendo
las pausas del caso, poniendo cuidado en los acentos y en
los ritmos de lo escrito, observando a los que escuchan,
refinando el proceso según lo que aprecia en la lectura y en
los demás, sabiendo cuándo terminar. Luego de la lectura,
el lector procede a estimular diálogos e intercambios, si
es del caso, con sus propias intervenciones y ejemplos,
convirtiendo la lectura en tema de conversación.
Reflexionar es la habilidad para considerar y asumir
un asunto, recorriendo mentalmente sus diversas
posibilidades, significados, descripciones, formas y
modos de existencia; cayendo en cuenta de sus causas
y efectos; señalando la forma en que afecta a las vidas
de las personas, a la sociedad, al universo, al ambiente;
hilando palabras, conceptos e ideas y exponiéndolas en
el grupo, con la intención de observar cómo se recibe
y qué otras consideraciones surgen entre los oyentes,
estimulando que ellos a su vez caigan en cuenta de otras
posibilidades o que apoyen lo que han escuchado, con sus
propias visiones e ideas. Un posible complemento puede
surgir cuando se toman notas de los temas tratados y se
generan documentos, a modo de ensayos personales o
grupales sobre los temas tratados.
Debatireslahabilidadparaafrontarunasuntodesdepuntos
de vista opuestos y complementarios, con la intención de
analizarlo, de refinar la conceptualización, de explorar
situaciones inesperadas, de experimentar sorpresas,
situaciones limitantes y desafiantes, con la intención de
crecer, de desarrollar y de ejercitar habilidades verbales,
lógicas y de razonamiento. Hay que saber debatir en un
ambiente de amistad y de respeto, sin intenciones de
derrotar o de humillar al otro; más bien con la intención
de crecer y de aprender; de enseñar y de ampliar los

espectros de la realidad que se está experimentando.
Compartir situaciones es la habilidad para expresar las
cosas que se están experimentando o que se están viviendo
o que se están sintiendo o que causan inquietud, o que
se desean contar, simplemente. Cuando se comparte,
hay que dejar que fluyan los intercambios libremente,
permitiendo que las personas se expresen, poniendo
atención, mostrando interés genuino, contando a su vez
cosas propias cuando sea del caso, o mostrando silencio si
es lo más apropiado. Acá es importante reconocer al otro
con gestos, con lenguaje no verbal, con actitudes, con
aprecio y cariño.
Observar en grupo películas, obras de teatro o
representaciones; hacer recorridos, pasear, escuchar a
otros, asistir a charlas, a museos o a lugares de interés
en grupo, se convierte a su vez en una rica fuente se
conversaciones y de temas para compartir, para aprender
de los demás, para enseñar. Hay que desarrollar liderazgo
y mostrar capacidad de servicio, para programar y para
orientar las actividades hacia el compartir grupal y hacia
las conversaciones.
Finalmente me quiero referir al proceso de enseñanza
y aprendizaje grupal, como una gran oportunidad para
que las personas que tienen habilidades especiales en los
grupos las compartan con los demás, en procesos más o
menos estructurados de enseñanza, generando con ello
grandes oportunidades para enriquecer la vida comunitaria
y para generar conversaciones y amistad.
Que el Señor, el gran conversador, que enseñó contando
historias y parábolas, compartiendo con sus amigos, se
convierta en nuestro gran inspirador. Cierro entonces mis
reflexiones con un poema sobre este Gran Maestro.

Romance del maestro eterno
Enseñaba en los caminos
conversando con la gente
compartiendo sus destinos
amistosa y dulcemente
Parábolas repetía
hilando historia con historias
a todos atraían
sus palabras poderosas.
Con imágenes sencillas
despertaba la intuición
así sembraba semillas
este eterno sembrador
Contestaba las preguntas
con paciencia y agudeza
y dejaba huellas profundas
y las mentes más abiertas.
¿Qué hará que surjan las flores
en cada siembra y que broten
frutos de mil sabores
en las mentes de los hombres?

RESUMEN
La institución familiar es muy cuestionada en la
contemporaneidad y algunos se han atrevido a afirmar
que se trata de un ataque sistemático a ella, por el peligro
que la Familia representa para los intereses de una cultura
liberal e individualista como la actual; se ha querido reducir
la función de la Familia y su valía, a meras definiciones
instrumentales que la desvirtúan, este escrito pretende
presentar los elementos constitutivos de la crisis de la
familia como institución y los desafíos que la crisis misma
le plantea, iluminando la reflexión con apartados de la
exhortación apostólica postsinodal “Amoris laetitia”(A.L)
del Santo Padre Francisco.
La crisis vincular, La crisis de la auto imagen, el problema
ético y el problema espiritual son los tópicos sobre los que
el articulo quiere detenerse como reto para la comprensión
de la audacia evangelizadora que debe tener la iglesia en
el mundo de hoy.
Hay que decir de entrada desde lo antropológico y lo
psicológico que la Familia no es un constructo meramente
El Papel de la Familia
en la Sociedad
Contemporanea, entre la
Crisis Y el Desafio.
Jaime León Pareja.
Comunidad Alianza.
Medellín, Colombia

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