El documento describe brevemente la presencia y actividades de la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios en varios países de Europa y América en el siglo XVIII. Contaba con 16 provincias y más de 2000 hermanos hospitalarios que atendían a cientos de miles de enfermos en sus 256 hospitales. La orden se expandió por países como España, Italia, Francia, Portugal, Polonia y los territorios del Imperio Austro-Húngaro.
2. En el año 1715 las dos ramas (Española e Italiana)
de la Orden Hospitalaria comprendían 16 Provincias,
con 256 hospitales y 2.399 Hospitalarios.
La rama Española la componían las Provincias de Nuestra Señora
de la Paz (Andalucía), con 26 hospitales; San Juan de Dios (Castilla),
22 hospitales; Espíritu Santo (Nueva España), que comprendía también
Filipinas, con 28 hospitales; San Bernardo, (Tierra Firme), con 11
hospitales; y del Arcángel San Rafael (Perú y Chile), con 20 hospitales.
3. El 9 de febrero de 1738
era elegido General
de la Congregación Española
Fr. Alonso de Jesús y Ortega
“El Magno”. Con él, la rama
Española de la Orden
alcanzará su máximo
esplendor.
De la magnitud de la obra
de los Hospitalarios
en estos años da idea
el hecho de que entre enero
de 1735 y diciembre de 1757
se trataron un total
de 726.637 enfermos.
4.
5. Fue una Provincia de la Congregación Española hasta el año 1790,
cuando la Santa Sede aprobó su separación definitiva nombrando
un Vicario General con su propio Definitorio. En la práctica, hacía ya
mucho tiempo, desde 1702 aproximadamente, vivía separada
de las Provincias Españolas. En el año 1745 eran once los hospitales
de la Orden en Portugal; nueve los hospitales militares atendidos
por los Hermanos y cinco los repartidos por África y Asia,
sumando más de 130 los Hermanos portugueses.
La Orden en Portugal
6. La obra de los Hermanos
de Juan de Dios, Fatebenefratelli,
vivió en Italia años de expansión
y florecimiento. También en Italia
los Hermanos asistían a los soldados
en los campos de batalla
y a las víctimas de las pestes
y epidemias, constituyendo un gran
testimonio de caridad y hospitalidad.
Los Fatebenefratelli contaban
con seis florecientes Provincias
a principios del siglo XVIII: Roma,
Nápoles, Lombardía, Bari, Sicilia y
Cerdeña, con 66 hospitales, 1032
camas, atendiendo a 27.469
enfermos, y con unos 600 Hermanos.
La Orden en Italia
7. La Orden tuvo una rápida
propagación en Francia a partir
del año 1602, desde el Hospital
de la Caridad de Paris,
el más importante de la nación,
fue cuna de la Provincia francesa,
erigida en 1639.
Con la ayuda de las autoridades
civiles y eclesiásticas la Orden
se extendió rápidamente
por Francia.
Aunque unidos a la Congregación
Italiana, los Hermanos franceses
disfrutaban de un régimen
parcialmente autónomo,
pues el Superior Provincial recibió
del General la patente de Vicario
General. El año 1789 contaba
la Provincia con 40 hospitales
en Francia, 5 en sus colonias
y un total de 350 Hermanos.
La Orden en Francia
8. Desde el Hospital de Santa Bárbara, de Feldsberg en Liechtenstein, fundado
en 1605 por el Hno. Ferrara, se difundió la Orden por el imperio
Austrohúngaro.
Pronto nació la floreciente Provincia del Arcángel S. Miguel, de la cual
han tenido origen todas las Provincias de la Europa Central. A mediados
del siglo XVIII contaba con 31 hospitales, abarcando su enorme ámbito
geográfico países actuales como Austria, Alemania, Rumanía y Hungría.
Igual que en otros lugares, los Hermanos cuidaban a los enfermos
en sus hospitales y acompañaron también a las tropas del emperador
en sus campañas bélicas atendiendo a los heridos y enfermos.
Tampoco faltó el servicio abnegado y caritativo a los afectados
en tiempos de pestes y epidemias.
La Orden en Países
austrogermánicos
9. El Hno. Gabriel Ferrara
llegó a Polonia en 1609
aceptando el hospital
de Cracovia.
Pronto nacieron nuevas
fundaciones en Polonia
y Lituania.
En 1642 se constituyó
en Provincia Polaca
independiente bajo
la advocación de la Asunción.
A pesar de ser una Provincia
próspera (13 hospitales
y 156 religiosos a finales
del siglo XVIII), desapareció
con la repartición de sus
territorios entre Rusia y Prusia.
La Orden en Polonia
10. En tantos años de historia como tiene la Orden, es fácil suponer
la existencia de una larga lista de testigos del Cristo misericordioso
y verdaderos mártires de la hospitalidad.
La misión de extender el Evangelio con la práctica
de la hospitalidad, llevó a muchos Hospitalarios a sufrir
la persecución y a la entrega de la vida, incluso
con derramamiento de sangre. Se trata de una constante
en la historia de la Orden.
Fieles a la Hospitalidad
hasta el martirio
11. - Polonia : En el Hospital de Lublin fue martirizado el Hno. Eustaquio
Biescekierski, a quien dieron por muerto y posteriormente curó.
En Varsovia fueron asesinados el Hno. Nicolás Orkieska, sacerdote,
y el Hno. Melchor Moreti. Otros Hermanos como Hipólito Ciarnowski
fueron maltratados y heridos, si bien pudieron salvar la vida.
En Lowiez encontraron la muerte los Hnos. Norberto Gotkoswiez e Hilario.
La causa fundamental de estas muertes fue la invasión de Polonia
por pueblos vecinos que perseguían a los seguidores de Cristo.
- Francia: Con la llegada de la Revolución y la supresión de la Orden,
los Hermanos fueron perseguidos y encarcelados, sufriendo el martirio
algunos de ellos: Hno. Vomerange en Burdeos, Hno. Felicien Citet en París,
los Hnos. Marcet Clémont y Modesto Bernard sufrieron el martirio
sobre los pontones de Rochefort; éste último fue desterrado posteriormente
a la Guayana y murió en la miseria.
- España: Durante la Guerra de la Independencia (1808 y siguientes),
tras la invasión de las tropas de Napoleón, muchos Hermanos fueron
perseguidos y expulsados violentamente de los hospitales.
Algunos encontraron la muerte sirviendo como enfermeros, médicos
o cirujanos de las tropas Españolas: Hnos. Pedro Pérez y Antonio Pérez,
Manuel Groizar y Nicolás de Ayala.
Fieles a la Hospitalidad
hasta el martirio