El documento habla sobre la resolución de conflictos en niños de 0 a 6 años. Explica que es importante enseñarles a resolver conflictos de forma pacífica a través del diálogo y encontrar soluciones alternativas. También es clave desarrollar habilidades como escuchar al otro, tomar turnos al hablar, y considerar diferentes puntos de vista. Los adultos deben guiar a los niños en este proceso a través de ejemplos y discusión de situaciones hipotéticas.
Plan Refuerzo Escolar 2024 para estudiantes con necesidades de Aprendizaje en...
Trabajo en equipo
1. CENTRO REGIONAL DE EDUCACIÓN NORMAL
12DNL00011
LICENCIATURA EN EDUCACIÓN PREESCOLAR
SEPTIMO SEMESTRE GRUPO: 703
CICLO ESCOLAR: 2019-2020
INTEGRANTES:
HILLARY JOANA MARTÍNEZ BOBADILLA
SANDRA MOLINA AGUILAR
ROXANA BETSABE CORONADO MUJICA
ASIGNATURA: OPTATIVO (PREVENCIÓN DE LA
VIOLENCIA)
DOCENTE: GUILLERMO TÉMELO AVILÉS
SUBSECRETARÍA DE EDUCACIÓN MEDIA SUPERIOR Y SUPERIOR
DIRECCIÓN GENERAL DE OPERACIÓN DE SERVICIOS
DE EDUCACIÓN MEDIA SUPERIOR Y SUPERIOR
SUBDIRECCIÓN DE FORMACIÓN DOCENTE
2. LA AGRESIVIDAD EN NIÑOS DE 0 A 6 AÑOS
Sylvie Burcier
LA RESOLUCIÓN DE CONFLICTOS (10)
Los niños no reconocen otras formas de conseguir los que quieren. Se deben de
enseñarles a arreglar sus conflictos de forma pacífica. Cuando una maestra induce
a sus alumnos a ponerse de acuerdo, favorece en ellos la autoafirmación. Los niños
que son capaces de pensar en soluciones pacíficas, evitan la intolerancia, esto es
un proceso de largo plazo.
Conviene considerar dos elementos para los conflictos: el espacioy el material para
jugar. Se evita conflictos proporcionándoles diferentes opciones de selección (para
jugar, para comer, para trabajar, etc.), para que puedan elegir sus preferencias.
Para arreglar estas diferencias, hay que poner en práctica algunas habilidades.
Primero calmarse y pararse para poder escuchar al otro y que este sea capaz de
expresar sus deseos, sus sentimientos. Par relacionarse verbalmente es necesario
alternar los turnos de palabra.
El proceso de resolución de problemas se apoya en conceptos básicos de lenguaje
como “es” y “no es”, “mismo” y “diferente”; las nociones como “si”, “entonces”,
“porque “, “quizás”. También es importante a desarrollar el reconocimiento y tener
en cuenta puntos de vista y sentimientos. Los niños intentan resolver conflictos
imitando. El empleo de hablar en voz alta, puede también ayudar al niño a disminuir
la ansiedad ante una tarea difícil o un conflicto.
Mediante situaciones cotidianas enseñar a los niños tranquilizarse y encontrar
solución a estas problemáticas, otra de las alternativas es ayudar al niño a recordar
tácticas que se ha mostrado eficaces.
La discusión de problemas hipotéticos permite al niño, plantear soluciones, imaginar
lo que podríamos sentir y evaluar las consecuencias de sus actos.
3. Las bases para desarrollar aptitudes de futuro negociador, nuestros objetivos
consisten esencialmente en enseñar poco a poco a compartir y enseñar a los niños
a resolver problemas de manera pacífica. Los pequeños imitan con acierto la
práctica del trueque que ellos ven que las educadoras utilizan con frecuencia.
Todas las situaciones son buenas para practicar la toma de decisiones. El niño toma
entonces conciencia de que existen soluciones alternativas, lo piensa y elige. Es
importante familiarizar al pequeño con la variedad de las emociones: alegría, tristeza
o irritación, así podrá desarrollar su sensibilidad hacia el otro.
Es bueno que el niño se dé cuenta de las consecuencias de sus opiniones, diciendo
lo que pasa correctamente. Para juzgar la eficacia de una solución hay que poder
predecir su efecto, sus consecuencias. Se puede observar con el niño las
consecuencias de los diferentes comportamientos.
Es necesario asegurar un seguimiento junto a los pequeños felicitándoles y
atrayendo su atención sobre el feliz resultado del problema. Los niños de 3 años
tienen capacidad lingüística, les permite participar activamente en la definición del
problema, sin embargo, es un gran reto para ellos escuchar las necesidades y las
emociones de los otros. La capacidad de concebir soluciones de forma autónoma,
en la medida en que el niño ha tenido la suerte de observar y practicar tácticas de
resolución de problemas con la ayuda del adulto.
Existen varios modelos de resolución de conflictos, la mayor parte de los modelos
siguen estas etapas: 1.- Definir el problema. 2.- Encontrar soluciones. 3.- Prever
consecuencias. 4.- Escoger una solución. 5.- Evaluar los resultados después de
llevar a la práctica la solución escogida. La enseñanza tiene por objetivo ayudar a
los niños a practicar y a saber cómo reflexionar y no en que reflexionar, lo esencial
es el proceso reflexivo y no el resultado de la reflexión. Es decir que el niño exprese
por sí mismo su opinión acerca de la situación problemática, a fin de evitar una mala
interpretación del adulto.