La educación procede de la participación del individuo en la sociedad y tiene como finalidad crear bienestar social. La escuela es una institución social donde los niños establecen relaciones y aprenden valores desde experiencias de la vida doméstica. Las materias del programa escolar deben marcar una dirección gradual basada en la actividad propia del niño. La imagen y los intereses del niño son fundamentales para la enseñanza. La escuela y la educación deben tener en cuenta los ideales individuales y sociales para promover el progreso social.