Guía para el análisis de fuentes históricas escrita
1. Guía para el análisis de
fuentes históricas escrita
Fuentes escritas
2. El documento y sus claves
explícitas
Toda fuente histórica
escrita contiene claves
explícitas (exactas y
claras) que nos
permiten comprender
su significado directo.
Para ello podemos
recurrir a las preguntas
3. ¿Cuándo?
Que se refiere a una fecha pero sobre todo al
momento histórico en que se produjo el texto.
Ello sitúa al documento en un contexto
determinado en el que participan actores
sociales, se realizan ciertos procesos
económicos y/o políticos, se desarrollan ciertas
discusiones de manera pública o privada,
4.
5. • Esta cuestión nos permite situar la
fuente en un espacio específico que
puede ser tan acotado como una
localidad pequeña o tan amplio
como el mundo entero.
• La localización geográfica del
documento puede ayudarnos a
ubicar la trama de la historia en un
escenario regional que implica el
reconocimiento de contextos
¿Cómo?
6. • Esta diversidad revela el grado de desarrollo
económico de la localidad, su vocación
productiva, su distancia o cercanía con los
núcleos duros del poder económico, político
y/o cultural así como la resonancia del
documento en otros espacios colectivos.
7. • Esta cuestión nos remite a
los protagonistas de la
historia, es decir a los actores
sociales (que pueden ser
movimientos de masas o
pequeños colectivos locales,
organizaciones emergentes o
instituciones, fuerzas
subalternas o elites).
¿Quién?
8. La pregunta puede abrirse en
varios sentidos:
• ¿Quién o quiénes son los autores del documento?
• ¿Quién o quiénes lo signan junto con él, es decir
quiénes son sus aliados?
• ¿A quién o quiénes se convoca e interpela?
• ¿Cuáles son sus adversarios reales o simbólicos, es
decir contra quién o contra qué se lucha?
9. • En este punto, lo que intentaremos conocer es el sentido
de la acción social propuesta en el documento, es decir la
agenda de los protagonistas.
• En las agendas aparecen las demandas y banderas políticas
del actor social y nos indican la dirección del movimiento
y ésta el carácter del actor social que puede ser identificado
como conservador, progresista o reaccionario.
• Además define si sus propósitos son de resolución
¿Para
qué?
10. Lo Implícito en el discurso o
cómo leer entre líneas
• El tono del discurso, que puede ser solemne o
jocoso, formal y riguroso, íntimo y coloquial, le
otorga un carácter específico e implica la
intención con la que se produce. Es decir nos
indica si éste pretende explicar, justificar,
convencer, coaccionar, advertir, etc.
11. • Aún cuando un discurso escrito está hecho de
palabras también contiene silencios. Descubrir lo
que se calla, se da por conocido, se ignora o se
minimiza nos aproxima a los discursos
alternativos que entran en tensión con el texto
como referencias que lo niegan, lo cuestionan o
lo ironizan.
12. Las fuentes y el tiempo histórico.
• En algunas fuentes es posible identificar, además del
contexto inmediato con el que se vincula, horizontes
de futuro utópicos o factibles.
• Estas mirillas al porvenir implican los deseos, las
esperanzas, los anhelos y sueños de sus protagonistas,
es decir, los argumentos anclados al inconsciente y no
únicamente a la razón práctica puesta en juego en la
construcción de las agendas de los actores.
13. • Finalmente, un documento histórico nos
refiere al pasado que vive en él en forma de
argumentos, conocimientos. saberes,
creencias, comportamientos y lógicas
ancladas al sentido común.
14. Los recursos de la palabra
• Una fuente histórica puede contener metáforas
y alegorías (símbolos) que generalmente se
ubican en el plano de lo simbólico y nos hablan
de cosmovisiones, mitos, imaginarios colectivos
que suelen tener una relación no lineal con lo
evidente o lo empírico pero que los sujetos
asumen como real, verdadero y válido.
15. • Estas figuras retóricas pueden estar
asociadas a signos de identidad o jerarquía
que asumen los actores como parte de las
reglas de inclusión, permanencia y exclusión
del colectivo.