1. “El dilema de las definiciones ontologizantes: obras de arte, artefactos etnográficos, piezas arqueológicas”
María Alba Bovisio
• “Obra de arte”
• “Pieza arqueológica”
• “Artefacto etnográfico”
2. Aspecto de una de
las salas en las que
se exponían las
colecciones
americanas
cuando estaban en
el Museo
Arqueológico
Nacional, en una
tarjeta postal de
principios del siglo
XX de la casa
Hauser y Menet.
3. Montaje de una de
las salas del Museo
de América en el
Museo Arqueológico
entre 1942 y 1962.
7. Sala en la que se expone
el Tesoro de los Quimbayas,
uno de los grandes hitos de
la colección. En primer
término, el manto hallado
junto a la momia de Paracas.
9. La invención de lo salvaje. Zoos humanos. Museo Quai Branly. Quai Branly. París
Esta muestra nos obliga, pues, a reflexionar sobre las nociones de apropiación y normativización de lo diferente, sobre
todo de exclusión, de las cuales Occidente ha hecho siempre gala, tratando todo lo que queda fuera de la norma -tanto
los "diferentes" como los "primitivos"- como un objeto aislado, sin historia propia, atemporal, aquello para ser mirado
desde la posición segura que siempre adopta Occidente.
Grupo de habitantes de las islas de Andamán, en el golfo de
Benguela, fotografiados en París alrededor de 1869. Imagen
incluida en la exposición La invención de lo salvaje. Zoos
humanos, en el Museo Quai Branly, de París.
10. Esa forma de exponer a los otros como objetos etnográficos, como trofeo del viajero o curiosidades
del científico, era una práctica habitual en las exposiciones universales -lo demuestran las numerosas
postales estereoscópicas que se imprimieron como souvenir de dichos acontecimientos. La pregunta
surge inmediata ¿en qué se convertían las personas de otras culturas expuestas al público? Sobre
todo, ¿en qué se diferenciaban de los freaks, tan populares hasta entrado el XX, si en ambos casos se
representaban la "otredad" como forma de espectáculo? Más importante aún, ¿hasta qué punto son
oscuras las relaciones de Occidente con los otros, las que desbordan lo idílico y desvelan lo sórdido?
11. Primitivismo en el arte del siglo XX. Afinidad de lo tribal y lo moderno. MOMA. 1984
Un juego de paralelismos organizado a través de yuxtaposiciones que desvelaban las "afinidades", sobre todo formales,
entre Occidente y los "otros", escenificaba una especie de mundo feliz, o al menos acrítico, que silenciaba un segmento
esencial del relato.
La belleza impoluta de Primitivismo y lo confortable de las asociaciones despertaron ya entonces la perplejidad del
antropólogo James Clifford, quien en su artículo mítico Historias de lo tribal y lo moderno criticaba esa higiene extrema
que veía a África -y al resto de las culturas- como atemporales, sin presente o pasado propios; parte de una fantasía
occidental en la cual se fetichizaba el fetiche, enfatizando lo elegante de las culturas otras y, más importante aún y
como reflexionaba Clifford, excluyendo las contaminaciones de las "modernidades" de otros ámbitos, incluso
occidentales.