Este documento proporciona información sobre el sondaje vesical, incluyendo su definición, tipos (permanente, intermitente), materiales (látex, silicona), calibres, equipos necesarios y procedimiento. Define el sondaje vesical como la introducción de una sonda a través del meato uretral hasta la vejiga con fines de diagnóstico o terapéuticos. Describe los diferentes tipos de sondaje según la duración y estructura, y los materiales, calibres y equipos utilizados. Finalmente, explica el procedimiento
1. Adulto mayor II
Integrantes:
Alvarado Mamani Elizabeth
De la Cruz Valencia Milagros
Gonzales Gonzales Melisa
Huauya Bautista Mariela
Luna Davila Erick
SONDA FOLYER
2. DEFINICIÓN:
El sondaje vesical es una técnica invasiva que consiste en la introducción de una
sonda hasta la vejiga a través del meato uretral, con el fin de establecer una vía
de drenaje, temporal, permanente o intermitente, desde la vejiga al exterior con
fines de diagnósticos y/o terapéuticos:
Retenciones urinarias por obstrucciones de la uretra.
Intervenciones quirúrgicas: permitir la cicatrización de vías urinarias tras la
cirugía.
Control de la cantidad de diuresis.
Tratamientos terapéuticos: mantener seca la zona genital en pacientes
incontinentes en situaciones especiales, como es el caso del tratamiento de
escaras, úlceras o dermatitis de contacto en la región genitourinaria o sacra
de difícil manejo.
Recogida de muestras estériles.
Introducir medicamentos con fines exploratorios o terapéuticos.
3. TIPOS DE SONDAJE:
Según el tiempo de permanencia del sondaje se distingue entre:
Sondaje permanente de larga duración: Consta con una duración mayor de
30 días, en el que la sonda es mantenida en su lugar por un balón que se
hincha con aire o agua al colocarla. Está indicado en casos de pacientes
crónicos con retención urinaria.
Sondaje permanente de corta duración, consta con iguales características
que el anterior pero con una duración menor de 30 días, usándose en caso
de patología agudas.
Sondaje intermitente, se realiza cada cierto tiempo (en general, cada 6 – 8
horas) y es el principal tratamiento de la incontinencia causada por daño
medular o daño de los nervios que controlan la micción.
De largar y corta
duración
intermitente
4. Según su estructura:
Látex: Son blandas y maleables; son sondas de primera elección en: post
operatorio, controles de diuresis, retención aguda de orina. Sin embargo las
sondas de látex pueden provocar alergia.
Silicona: Son más semirrígidas, utilizadas prioritariamente ya que presentan
mayor biocompatibilidad e igualdad de calibre exterior en: sondajes
dificultosos, sondajes vesicales prolongados (permanentes), hematurias,
pacientes alérgicos al látex, cirugía uretral, etc. Y por lo que pueden ser más
finas y tener mejor tolerancia.
5. Por número de luces
Sonda de una luz: Sólo tiene un canal de drenaje, no tiene balón. Se
utiliza para sondajes intermitentes, instilaciones vesicales, pruebas uro-
dinámicas.
Sonda de dos luces: Una luz es para salida de la orina y otra para
insuflar un balón que asegura que la sonda permanezca en la vejiga
Sonda de tres luces: Como la sonda de dos luces pero tiene una tercera
para realizar irrigación continúa de la vejiga
6. SEGÚN EL CALIBRE:
Los calibres deben seleccionarse según el sexo, la edad y características del
paciente: en el caso de adultos existen sondas desde el calibre 8 al 30.
Los calibres que se utilizan con más frecuencia son:
Mujeres: CH 14 y 16
Varones: CH 16-18-20-22
Niñas Nº 8-6
Niños varón Nº8.
También hay diferencia en el caso de la longitud de la sonda en el sondaje
intermitente o auto-sondaje: hombre 40 cm y mujer 20 cm.
7. Sonda vesical: la calidad y el tipo - depende del paciente.
Guantes estriles
Riñones estériles
Lubricantes estériles
Agua destilada y/o suero fisiológico estéril.
Solución antiséptica.
Paquete de gasa y/o torundas estériles.
Equipo de dos pinzas (una de ellas kocher).
Lámpara de pie.
Sonda a permanencia.
Jeringa 20cc.
Tela adhesiva.
Bolsa colectora.
8. PROCEDIMIENTO
Preservar la intimidad del paciente. Informar al
paciente del motivo del sondaje, explicándole la
técnica y la importancia de su colaboración.
En el hombre:
Colocar el paciente en decúbito supino con las
extremidades inferiores ligeramente separadas.
En la mujer:
Colocar a la paciente en decúbito supino, con las
piernas separadas y flexionadas (posición
ginecológica).
Realizar el lavado de manos y colocar los
guantes de un solo uso.
Preparar el material necesario sobre un paño
estéril y una superficie estable.
Realizar el lavado de los genitales:
9. En el hombre:
Lavar los genitales externos con agua y jabón.
Sostener el pene retirando el prepucio y con la
mano dominante limpiar el glande con la solución
antiséptica desde el meato en círculos hacia la
base del pene. Proteger el pene con una
compresa.
Sujetar el pene con firmeza estirándolo ligeramente
hacia delante y abajo para corregir las curvaturas
de la uretra.
En la mujer:
Lavar los genitales externos arriba abajo con agua
y jabón. Separar los labios menores, hasta
visualizar el meato. Limpiar con solución
antiséptica partiendo del clítoris hacia la vagina.
Retirar los guantes de un solo uso, lavar las manos
y poner los guantes estériles.
Delimitar la zona genital con paños estériles.
Lubricar la sonda. Introducir gel anestésico en la
uretra si se prevé que la realización de la técnica
pueden resultar difícil o provocar dolor.
10. En la mujer:
Separar los labios menores con dos dedos y con la mano dominante introducir la
sonda por el meato, a través de la uretra, hasta le vejiga.
Comprobar que sale orina.
Inflar suavemente el balón, con la cantidad de agua estéril recomendada por el
fabricante. No usar suero fisiológico porque puede formar cristales de sodio y
obstruir la sonda.
Prestar atención a que el enfermo no ofrezca resistencia o refiera dolor.
Retirar suavemente la sonda hasta notar una pequeña resistencia.
En el hombre, volver el prepucio a su posición natural.
Conectar la sonda al sistema de drenaje cerrado. Fijar el sistema de drenaje,
dejando una pequeña curvatura en la sonda para evitar tracciones.
Colocar la bolsa colectora en un soporte, evitando que se doble el sistema.
Recoger el material usado.
Registrar en la hoja de cuidados o en la "tarjeta de seguimiento" la técnica
realizada, día, hora, tipo y calibre de la sonda.
Planificar los cuidados de mantenimiento.
Anotar en la hoja de valoración de enfermería o en la "tarjeta de seguimiento" el
motivo del sondaje, la cantidad y las características de la orina.