Ira: definición, localización cerebral, expresión y tratamiento
1. El Tigre, Marzo 2018
Participante: Josefina Pineda
Exp: HPS-162-00018V
Docente: Xiomara Rodríguez
LA IRA
UNIVERSIDAD YACAMBÚ
VICERRECTORADO ACADÉMICO
FACULTAD DE HUMANIDADES
CARRERA - PSICOLOGÍA
ASIGNATURA: FISIOLOGÍA Y CONDUCTA
2. LA IRA - Definición
Respuesta emocional caracterizada por una activación fisiológica y una expresión facial
característica acompañada por sentimientos de enfado o enojo y que aparece cuando no se
consigue alguna meta o necesidad o se recibe un daño
IRA
Estado emocional, limitado
en el tiempo, que consta de
sensaciones subjetivas de
tensión, enojo, irritación,
furia o rabia, con activación
concomitante del sistema
nervioso
Disposición duradera y
consistente o una
tendencia general para
experimentar frecuentes y
pronunciados episodios de
estados de ira.
en
consenso
de define
como
3. LOCALIZACIÓN DE LA IRA EN EL CEREBRO
Para Charles Darwin, el cerebro trabaja en red y
cuando se experimenta una emoción no se activa
una sola área, sino varias.
En el caso de la ira, esa zona crítica es la región del
estriado ventral (núcleos accumbens y partes
ventrales del núcleo caudado y el putamen), el cual
se relaciona con el sistema límbico.
Para las Neurociencias, la región del Córtex
frontal se encarga de regular la agresión y
los impulsos violentos cuando las señales
neurocerebrales que van desde el tálamo a
la amígdala se desvían hacia él para generar
procesos relacionados con la racionalidad, la
lógica, la ética, la moral y la conciencia
humana.
El lóbulo frontal inhibe la conducta
ocasional a través de un proceso
denominado "control del impulso“,
que impide que las acciones sean
llevadas a cabo sin pensar en las
consecuencias
La Corteza Cingulada Anterior del cerebro,
que se encarga del control de las emociones
La Corteza Dorso lateral Pefrontal,
encargada de la toma de decisiones
racionales, por lo que impide que
resalten los impulsos
En evaluaciones de
enfado se activó
4. Expresión de ira hace referencia a la
conducta agresiva que sigue a la
ocurrencia de un episodio de ira.
Se conceptualiza como una
respuesta transaccional a las
provocaciones del medio y que sirve
para regular el displacer emocional
asociado a la problemática de las
relaciones interpersonales.
EXPERIENCIA Y EXPRESIÓN DE LA IRA
Se refiere a los procesos subjetivos,
a la frecuencia, intensidad y/o
duración de un estado emocional
que contiene sentimientos de
irritación, enojo, furia y rabia, junto
a una activación del sistema
nervioso autónomo y del sistema
endocrino y una tensión muscular
entre otras características
(Johnson, 1990).
EXPERIENCIA DE LA IRA EXPRESIÓN DE LA IRA
5. En la última década, se asume que hay tres estilos básicos de afrontamiento claramente identificados en la
investigación sobre ira:
MODIFICACIONES Y TOLERANCIA
La persona que experimenta
un intenso sentimiento de
irritación, furia y/o enojo
tiende más a suprimir esos
sentimientos que a
expresarlos verbal o
físicamente
La persona que experimenta
intensos sentimientos de enfado
los manifiesta a través de
conductas agresivas verbales o
físicas dirigidas hacia otras
personas o también hacia
objetos del ambiente.
Ante la experiencia intensa de sentimientos de enfado o furia, el individuo tiende a buscar
y poner en marcha estrategias cuya finalidad es reducir la intensidad y duración de esos
sentimientos, así como resolver el problema que los ha provocado.
IRA INTERNA IRA EXTERNA
CONTROL DE LA
IRA
Estilos de
afrontamiento
6. TRASTORNOS COMUNES
La ira tiene una función adaptativa, sin embargo su exceso de frecuencia y/o intensidad acarrea importantes problemas de salud física y
mental.
Han sido identificados un amplio número de problemas orgánicos y trastornos cardiovasculares, trastornos como el cáncer, las úlceras, el
tabaquismo o la soriasis, o enfermedades que cursan con dolor crónico, como la artritis reumatoide, enfermedad además autoinmune.
En el ámbito de la psicopatología la ira se presenta como relevante en el Trastorno Explosivo Intermitente:
Implica episodios repetidos de
comportamiento impulsivo,
agresivo y violento o explosiones
verbales enojadas en las que el
afectado reacciona bruscamente
y de manera desproporcionada a
la situación.
Irritabilidad
Aumento de energía
Saña
Pensamientos agresivos
Hormigueo
Palpitaciones
Opresión en el pecho
Sensación de presión en la cabeza
Reacción exagerada al estrés
Se conoció por primera
vez en 1980, por la
Asociación Psiquiátrica
Americana
Medio Ambiente: la exposición a violencia a
una edad temprana.
Genética: puede haber un componente
genético que se transmite de padres a hijos.
Química del cerebro: diferencias en la
serotonina (mensajero químico), en mayor
proporción en personas con TEI.
Trastorno
Explosivo
Intermitente
(TEI)
7. Desarrollo de habilidades de
afrontamiento pasivas (como la
relajación o la respiración abdominal),
reestructuración cognitiva de los
sesgos, entrenamiento en solución
de problemas y entrenamiento en
habilidades sociales.
La ira desadaptativa requiere de una intervención psicológica eficaz para su tratamiento, por lo que se han aplicado
técnicas psicofisiológicas y cognitivo-conductuales, obteniéndose resultados positivos, incluso sólo con terapia
cognitiva. Entre éstas destacan: la terapia clásica de Novaco (1975) y la más moderna de Deffenbacher (1994).
Se aplican ante la respuesta
de ira.
Implican el incremento del
autocontrol emocional y la
disrupción en la respuesta de
ira
Se han definido dos tipos de intervención para la ira:
ESTRATEGIAS DE
CONSOLIDACIÓN
ESTRATEGIAS DE
CHOQUE
TRATAMIENTO DE LAS REACCIONES
8. TRATAMIENTO DE LAS REACCIONES
CONTROL DE IRA DE
NOVACO (1975)
El refuerzo de los éxitos
favorecerá la aparición de
conductas adecuadas de
afrontamiento y mejorará la
autoestima de la persona.
Mantener una orientación hacia la
tarea antes que hacia la provocación
y centrarse, para disminuir el arousal
de ira ante la provocación.
Entrenamiento en autovaloraciones
positivas por parte del paciente, y la
generalización de las mismas a través
de diversas situaciones
Desarrollar habilidades que
permitan ser competente ante
la provocación.
Aprender a utilizar la propia activación como
señal de punto de partida para la puesta en
marcha de estrategias de afrontamiento no
enfrentadas a la provocación.
Aprender a identificar la secuencias de
provocación en diferentes escenarios y
momentos y utilizar autoinstrucciones
adecuadas a cada situación.
9. TRATAMIENTO DE LAS REACCIONES
Aumentar la conciencia del déficit (favorecer que el paciente tome conciencia de
la respuesta airada que está dando).
CONTROL DE IRA DE DEFFENBACHER (1994)
Interrumpir el desarrollo de la respuesta de ira (conseguir que el paciente desarrolle algún tipo de
estrategia con la que pueda cortar el desarrollo de la respuesta de ira que comienza a experimentar).
Utilizar el entrenamiento en relajación. La relajación favorecerá el uso posterior de estrategias
cognitivas. Se propone un entrenamiento en relajación muscular progresiva que termine utilizando
la visualización de imágenes que eliciten relajación y calma, practicándola, primero en situaciones
no estresantes, y luego en situaciones provocadoras de ira.
Reestructuración cognitiva. Consiste en tratar de modificar los sesgos que pueden llevar a dar
una respuesta de ira.
Solución de problemas y autoinstrucciones que ayuden a desarrollar los pasos de la
estrategia en solución de problemas orientando al paciente hacia la ira como un problema a
resolver y que le permitan planificar soluciones. También acompañar
los éxitos siempre con autoinstrucciones que refuercen la autoestima
10. Bolívar, N. (2017). La Ira. Disponible: https://www.slideshare.net/NorelisBolivarSantamara/la-ira-73229619
Labath, L. (2016). El cerebro y la ira. Disponible: http://asociacioneducar.com/cerebro-ira
Pérez Nieto, M., Redondo, M. y León, L. (S/A). Aproximaciones a la emoción de ira: de la conceptualización a la
intervención psicológica. Revista Electrónica de Motivación y Emoción. Disponible:
http://reme.uji.es/articulos/numero28/article6/article6.pdf
BIBLIOGRAFÍA