2. “Todo acto por el que un individuo se causa a sí
mismo una lesión, o un daño, con un grado variable
de la intención de morir, cualquiera sea el grado de
la intención letal o de conocimiento del verdadero
móvil".(OMS, 1976)
3. «Se llama suicidio a todo caso de muerte que
resulte directa o indirectamente de un acto positivo
o negativo, ejecutado por la propia víctima, a
sabiendas de que habría de producir este
resultado». Durheim.
4. El suicidio es un fenómeno global, con significado
existencial, impactante, que afecta todas las esferas de
la sociedad y que ha acompañado al hombre durante
toda su existencia.
5.
6.
7. En la antigüedad el suicidio, era aceptado en la
mayor parte de las sociedades
En Egipto la muerte voluntaria no fue condenada
(incluso la primera nota de suicidio de la historia
conocida fue firmada por un consejero faraónico del
siglo III a.C.)
Cleopatra VII (69-30 a.C.)
8.
9. Para los filósofos, cínicos, estoicos, epicúreos y cirineos,
la vida y la muerte eran indiferentes, señalaban el
suicidio como una forma de muerte preferible a otras,
así pues, diversas causas como el patriotismo, la
amistad, el amor, la castidad, la enfermedad, el honor o
la gloria justificaban el acto suicida
10. Inicialmente el cristianismo aceptaba el suicidio en
circunstancias en las que el martirio era usado como medio
para entrar al reino de los cielos. Solo hasta San Agustín en el
siglo IV, se adoptó la postura de que el cristiano debe aceptar
la vida y la muerte como una decisión que no le corresponde
al hombre sino a Dios;
11. Santo Tomás consideró el suicidio como la más grave
afrenta contra Dios, solo hasta 1983, el nuevo Código
Canónico retiro la sanción que impedía una sepultura
bajo los ritos católicos
12. - Que sea un acto con una consecuencia fatal.
- Que sea cometido deliberadamente por el propio individuo
- Que se tuviera conocimiento o expectativas de su desenlace fatal.
- La persona mediante este acto pretendía producir cambios que
deseaba.
13. El planteamiento médico del suicidio se inicia con Falret (1820)
que atribuye el suicidio a un trastorno mental y Esquirol (1838)
que se refiere a la muerte voluntaria como el resultado de una
crisis afectiva
15. Freud elabora una interpretación sobre el tema, en el que el Thanatos
o instinto de muerte es autodirigido, y nos induce a este tipo de
comportamiento. El suicidio es un fenómeno intrapsíquico originado
primariamente en el inconsciente y en el que prima la agresividad y la
hostilidad dirigida hacia el objeto amado que ha sido previamente
introyectado, por regla general, de forma ambivalente
16. El suicidio como una actitud de represalia o de revancha tras un abandono.
El suicidio como asesinato reflejo como expresión de la lucha interna contra el deseo
de matar.
El suicidio en el que la muerte se convierte en una reunión con la persona amada
muerta.
El suicidio en el que la muerte es un renacer que borra los fracasos.
El suicidio en el que la muerte es un castigo, mecanismo frecuente en el melancólico y
el delirante.
El suicidio en el que el paciente se creía estar ya muerto, frecuente en la melancolía.
23. Como deseo de rehabilitación del prestigio y el honor con fantasías
de gloria.
Como caída de la autoestima unida a una sensación de impotencia
extrema después de una injuria narcisista.
Como búsqueda de tranquilidad.
Como deseo apasionado de reunión erótica con un objeto (persona
amada) amado muerto.
Como deseos de reconquista o de reivindicación.
Como deseo de lograr el amor de un objeto (persona amada) vivo.
Como deseo de aniquilación del Yo.
Como deseo de conmover a otros o generarles culpabilidad o
perjudicarlos de alguna manera y hacerlos sufrir.
24. Como expresión de pensamientos acerca de la inutilidad de la existencia y el vacío.
Como vía de escape para el sufrimiento emocional o psicológico.
Como escape a la tortura de los perseguidores internos en los cuadros paranoides.
Como deseo vengativo hacia otra persona, de control hostil del otro, de castigo del otro o
una búsqueda de impacto en los otros.
Como el deseo de promover cambios en las actitudes o sentimientos de los demás, o
buscar averiguar póstumamente si se es querido por los otros.
Como fantasía de evasión, de escaparse del conflicto, un deseo de liberación, una fantasía
de paz eterna.
Como deseo de expiación por alguna culpa o pecado.
Como deseo de recomenzar una vida nueva acompañado por la creencia de renacer
después de la muerte.