El documento contrasta el aprendizaje autónomo y guiado en la práctica docente. El aprendizaje autónomo no es solitario e incluye los intercambios con el contexto, mientras que el aprendizaje guiado implica la intervención de un facilitador. Ambos tipos de aprendizaje no son excluyentes y pueden influirse mutuamente. También distingue entre el conocimiento académico y el conocimiento práctico adquirido a través de la experiencia.