El documento habla sobre la evaluación de contenidos. Explica que la evaluación de contenidos debería ser un proceso continuo y no un evento aislado, y que debe usarse como una herramienta para mejorar el aprendizaje. Además, detalla tres tipos de contenidos que pueden evaluarse: contenidos conceptuales, procedimentales y actitudinales. Los contenidos conceptuales incluyen hechos y conceptos, los procedimentales se refieren a habilidades y los actitudinales cubren valores y emociones.