El documento compara tres modelos de aprendizaje en Chile: el conductismo, el constructivismo y un proceso de cambio educativo. Explica que el conductismo se centra en la guía del profesor y la memorización por parte de los estudiantes, mientras que el constructivismo promueve que los estudiantes construyan su propio aprendizaje a través de la participación y el diálogo. Finalmente, propone un proceso de cambio que incorpore elementos de ambos enfoques.