1. DIURÈTICOS
1. Furosemida.
Es un diurético de asa de la familia de las sulfonamidas utilizado en el tratamiento del edema asociado a la insuficiencia
cardíaca congestiva, cirrosis y enfermedad renal, incluyendo el síndrome nefrótico.
Mecanismo de acción.
Después de la administración de furosemida disminuyen las resistencias vasculares renales aumentando el flujo renal,
ocurriendo lo mismo en las resistencias periféricas, lo que se traduce en una reducción de la presión en el ventrículo
izquierdo. Si inicialmente la furosemida tiene un efecto antihipertensivo debido a una reducción de la volemia aumentando la
velocidad de filtración glomerular y reduciendo el gasto cardíaco, más tarde el gasto cardíaco puede volver a su valor inicial
pero las resistencias periféricas permanecen bajas, lo que resulta en una reducción de la presión arterial.
Farmacocinética.
La absorción oral de este fármaco es bastante errática y es afectada por la comida, si bien esta no altera la respuesta
diurética. La diuresis se inicia a los 30-60 minutos después de la administración oral y a los 5 minutos después de la
administración intravenosa.
2. El fármaco se une extensamente a las proteínas del plasma (95%), atraviesa la barrera placentaria y se
excreta en la leche materna. La furosemida experimenta un mínimo metabolismo en el hígado
eliminándose en su mayor parte en la orina. Aproximadamente el 20% de la dosis se excreta en las heces,
si bien este porcentaje puede aumentar hasta el 98% en los pacientes con insuficiencia renal. La semi-vida
plasmática es de 0.5 a 1 hora aunque aumenta significativamente en los neonatos y en los pacientes con
insuficiencias renales o hepática en los que se deben reducir las dosis.
Contraindicaciones.
La furosemida está contraindicada cuando existe un desequilibrio electrolítico importante, tal como
hiponatremia, hipocalcemia, hipomagnesemia. Las fluctuaciones de los electrolitos inducidas por la
furosemida se producen muy rápidamente y pueden provocar coma
3. Administración.
Vía oral:
Inicialmente se recomiendan 40 mg dos veces al día, ajustando las dosis según las respuestas. Una alternativa a este
régimen es iniciar el tratamiento con dos dosis de 10 o 20 mg al día, subiendo las dosis en función de la respuesta. La dosis
máxima recomendada es de 600 mg/día.
Vía Intravenosa:
Inyectar o infundirse lentamente, a velocidad no superior a 4 mg por minuto. Por otra parte los pacientes con insuficiencia
renal grave, se recomienda que la velocidad de infusión no exceda a 2,5 mg por minuto. No administrar en forma de bolus
intravenoso.
Vía Intramuscular:
Se utilizará cuando la administración oral o intravenosa no sea posibles. No se recomienda esta vía en situaciones agudas
de edema pulmonar.
Reacciones adversas:
La poliuria producida por el tratamiento con furosemida puede producir una pérdida excesiva de fluídos con la
correspondiente deshidratación y desequilibrio electrolítico.