2. SILABO Y DESCRIPCION DEL CURSO:
En este curso se analizan: los diversos
métodos para estudiar los evangelios
sinópticos; el problema sinóptico y las
características particulares de cada
evangelio; los cimientos doctrinales; y los
principales eventos de la vida de nuestro
Señor.
3. OBJETIVOS GENERALES:
1.Que el alumno conozca y analice los principales
métodos existentes para acercase con propiedad
al estudio de los evangelios sinópticos.
2.Que el alumno conozca y analice el problema
sinóptico y las características de cada evangelio
para su mejor comprensión.
3.Que el alumno conozca y analice los cimientos
doctrinales que emergen de dichos evangelios.
4.Que el alumno conozca y analice los eventos
principales en la vida del Señor Jesucristo.
4. UNIDAD I: LOS SINOPTICOS Y SUS METODOS DE
ESTUDIO
.
1. El Método de la Crítica Textual
1.2 El Método de la Crítica Literaria
1.3 El Método de la Crítica de las Formas
1.4 El Método de la Historia de la Redacción
5. UNIDAD II: EL PROBLEMA Y LAS CARACTERÍSTICAS
DE LOS SINOPTICOS
2.1 Explicación de las similitudes y las diferencias
2.2 El evangelio de Mateo y sus características
2.3 El evangelio de Marcos y sus características
2.4 El evangelio de Lucas y sus características
2.5 Influencias judías y helénicas en los evangelios
sinópticos
2.6 Relación de los sinópticos con el evangelio de
Juan
6. UNIDAD III: LOS CIMIENTOS DOCTRINALES DE LOS
SINOPTICOS
3.1 Consideraciones sobre El Sermón del Monte.
3.2 Las consideraciones educativas del Maestro.
3.3 Las principales doctrinas enseñadas por
Jesucristo.
3.3.1 El Pecado
3.3.2 El Reino de Dios
3.3.3 El Arrepentimiento
3.3.4 El Amor
7. 3.3.5 El Infierno
3.3.6 Los Últimos Tiempos
3.3.7 La Fe
3.3.8 La Salvación
3.3.9 La Sanidad
3.3.10 La Santa Cena
3.3.11 Las responsabilidades sociales
3.4 Las principales doctrinas enseñadas por los
autores de los evangelios
3.4.1 La Cristología
3.4.2 La Eclesiología
3.4.3 El Ministerio y Servicio Cristianos
11. La palabra «evangelio» viene del griego euangelion,
adjetivo empleado como nombre, que procede de
la palabra euangelos: «mensajero (angelos) de dicha
(prefijo eu)" '. De esta palabra procede igualmente el
verbo euangelizesthai, «anunciar una buena noticia».
Para comprender el uso de estas palabras en el
Nuevo Testamento, conviene precisar su empleo en
los textos anteriores o contemporáneos al nacimiento
de la fe cristiana.
12. En 2 Samuel encontramos el uso de ―buena noticia‖
de una manera interesante. Este texto resume muy
bien el ámbito en el que se utiliza buena noticia y
portador de buenas noticias (o mensajero) en el
Antiguo Testamento. Se trata a menudo de un contexto
de guerra, que afecta al futuro del rey. Alguien vuelve
del campo de batalla y anuncia la buena noticia de una
victoria o de la muerte del adversario; por ejemplo, de
Absalón, que se ha rebelado contra su padre, David (2
Sm 18,19-20.26-27: mebasser y bassorah). Con
respecto al portador de buena nueva (mebasser), en
su uso se extendió este término a todo portador de
noticias al final de una batalla, aunque fuesen malas.
13. El contexto de victoria y realeza aparece en la
segunda parte del libro de Isaías (40-66). Esta vez se
trata de celebrar la victoria de Dios y de su reino. He
aquí el portador de la buena noticia, o el mensajero,
como se traduce a menudo:
"iQué hermosos son sobre los montes
los pies del mensajero que anuncia la paz,
que trae la buena nueva (mebasser) y proclama la
salvación, que dice a Sión: Ya reina tu Dios" (Is 52,7).
14. ¿A qué se debe que el reinado de Dios sea una
buena noticia? La segunda parte de Isaías se dirige a
exiliados que conocen la humillación de la derrota y
de la deportación a Babilonia. El profeta exhorta a la
esperanza, recuerda que Dios es el verdadero dueño
del mundo, ante el cual ningún rey, ni siquiera el más
poderoso, puede resistir. Por consiguiente, la buena
noticia es el anuncio de la liberación de los exiliados y
de la vuelta a Sión-Jerusalén, que recuperará toda su
vitalidad. Sobre ella reinará el Señor Dios, y a partir
de ella establecerá su reinado sobre todas las
naciones.
15. El Segundo Isaías no tiene competidor a la hora de
extender la buena noticia por el mundo entero. En él,
los portadores de buenas noticias no se ocultan; al
contrario, suben a las montañas para que su voz se
escuche lejos:
"Súbete a un monte elevado,
mensajero de Sión;
alza tu voz con brío, mensajero de Jerusalén;
álzala sin miedo y di a las ciudades de Judá:
Aquí está vuestro Dios,
aquí está el Señor, viene con poder. .. "
(Is 40,9-10; d. 41,27).
16. En el capítulo 61 de Isaías, es el Mesías, el ungido
de Yahvé, quien trae las buenas noticias:
"El Espíritu del Señor está sobre mí,
porque el Señor me ha ungido. Me ha enviado
para dar la buena nueva a los pobres,
para curar los corazones desgarrados
y anunciar la liberación a los cautivos, a los
prisioneros la libertad.
Me ha enviado para anunciar
un año de gracia del Señor. .. " (Is 61,1-2).
17. En este caso se trata de la unción de un profeta,
que le otorga el Espíritu para transmitir la buena
nueva.
El mensaje se dirige a los pobres, a los prisioneros,
lo que abre un campo semántico nuevo en
comparación con los textos que hemos visto.
Pensemos en el capítulo 42 de Isaías, donde el
"siervo» que ha recibido el Espíritu (v. 1) es destinado
a abrir los ojos a los ciegos, a sacar de la mazmorra
a los prisioneros... (v. 7). La palabra siervo no
aparece, pero ciertas características comunes, como
la "pobreza", relacionan a las personas a las que son
destinados el siervo o el ungido del capítulo 61.
18. Con estos textos de Isaías, las imágenes de la
realeza, del reino, del poder, quedan vinculadas al
Dios de Israel. La buena nueva consiste en que el
reino de este Dios restaurará la paz y la prosperidad
para su pueblo exiliado, para los pobres y los
afligidos. La potencia de las imágenes de alegría y
esperanza utilizadas por el profeta, su dimensión
cósmica y universal, las destinaba a ser orquestadas
(ver Sal 96,2.10) Y recogidas tras la vuelta de los
exiliados al país.
20. El judaísmo palestino supo prolongar el eco de estos
hermosos textos de Isaías. Los Salmos de Salomón,
escrito fariseo del siglo I antes de nuestra era, celebran de
este modo la voz del mensajero de buena
nueva:
"Proclamad en Jerusalén las palabrasdel gozoso mensajero
(euangelizomenou), porque Dios se ha apiadado de Israel,
visitándolo" (Sal 11,1).
La identificación del mensajero con el rey mesías
se lleva a cabo, por ejemplo, en este texto del Rabí
José el Galileo:
"Grande es la paz; porque cuando el rey; el mesías,
se manifieste a Israel, sólo lo hará con la paz.
Porque está escrito: Qué hermosos son sobre los montes los
pies de los que traen buenas noticias, que traen la paz".
21. Los autores del NT no olvidarán los textos del libro de
Isaías cuando hablen de Jesús y de sus enviados,
portadores de buena nueva. Así, Pablo recogerá el
versículo de Isaías: «iQué hermosos son los pies de los que
anuncian buenas noticias» en un pasaje en el que
pretende mostrar que judíos y paganos tienen el mismo
Señor Jesús, y que, por tanto, hacen falta portadores de
buenas nuevas para dar a conocer a este Señor (Rom
10,14-17). Las figuras de «portador de buenas noticias»,
de ungido de Yahvé y de Siervo de Yahvé proporcionarán a
los primeros cristianos un vocabulario para presentar a
Cristo Jesús anunciando la buena nueva: «Nos
encontramos aquí en las fuentes del Evangelio,
escuchamos una buena noticia que proporcionará un
lenguaje para hablar de la buena noticia de Jesús»
23. En el contexto del culto al emperador; la palabra
«evangelio» se utiliza sobre todo en plural; el texto más
interesante es la inscripción de Priene, cerca de Mileto,
fechada en el año 9 antes de nuestra era, que hacía
comenzar un nuevo calendario el día de cumpleaños
del emperador Augusto:
«Todos pueden considerar con razón este
acontecimiento
como el origen de su vida y de su existencia, como
el tiempo a partir del cual no deben lamentar haber
nacido... La Providencia ha suscitado y adornado
maravillosamente la vida humana dándonos a Augusto,
colmado de virtudes, para ser el bienhechor de los
24. hombres,
nuestro salvador, para nosotros y para quienes
vendrán
después de nosotros, a fin de hacer cesar la guerra y
establecer el orden por todas partes. El día del
nacimiento
del dios (Augusto) significó para el mundo el comienzo
de las buenas noticias (ta euangelia) que él traía».
25. Flavio Josefo
En la Guerra judía, Josefo cuenta cómo el general
Vespasiano llegó a emperador. Adviértase la
importancia de los presagios, entre los que se
encuentra la predicción del mismo Josefo, que anunció
el Imperio al general que acababa de hacerlo
prisionero en Jotapata.
«Más rápido de lo que se piensa, el rumor público
había extendido las noticias de que había un
emperador en Oriente, y todas las ciudades festejaban
esta felices nuevas (euangelia) y celebraban sacrificios
en honor de Vespasiano (... ) Ahora que, por todas
partes, la fortuna avanzaba según sus deseos y que
26. las circunstancias le eran en grandísima medida
favorables, Vespasiano se sentía inclinado a pensar
que el Imperio no le había tocado sin la ayuda de la
providencia divina, y que cierto justo destino le había
concedido el poder universal. Recordaba, en efecto,
entre otros presagios (porque había tenido muchos,
por todas partes, que le habían anunciado el Imperio),
las palabras de Josefo, quien, cuando todavía vivía
Nerón, tuvo la audacia de saludarlo con el título de
emperador».
27. El culto del emperador proporcionó una especie de
leyenda sagrada que conviene tener en cuenta
cuando estudiamos los evangelios cristianos. Su
llegada al poder, marcada por el paso de un cometa,
o por algún otro prodigio celeste, es señal de una
alegre noticia para toda la humanidad. La salvación
y el destino de los hombres están vinculados a su
persona. Igual que los theíoí antes visitados por la
divinidad, se los ve realizar prodigios y milagros.
28. RESUMIENDO
La palabra «evangelio» significa originalmente la
recompensa por una buena noticia y luego viene a
significar la buena noticia en sí misma. En el Antiguo
Testamento sólo se emplea el verbo «evangelizar» en
sentido teológico para designar la noticia gozosa de que
Yahvé ha comenzado a reinar (Is 52,7). El mensajero de
nuevas alegres trae a los desgraciados la buena noticia
y proclama el año de gracia del Señor (Is 61,ls). El
Nuevo Testamento afirma que este mensajero de
alegrías prometido en la Escritura es Jesús.
29. El lee públicamente en la sinagoga las palabras de Is
61,ls y añade la breve frase: «Hoy, en vuestra presencia,
se ha cumplido este pasaje» (Le 4,16-21). Con esto han
llegado a hacerse realidad las palabras de la Escritura y
ha comenzado el tiempo de gozo.
El concepto de «evangelio» no es extraño en el
entorno del Nuevo Testamento y fue empleado
principalmente en el antiguo culto al soberano. Desde
los tiempos de Alejandro Magno, el soberano era
venerado en el mundo helenístico como epifanía de la
divinidad. Esta veneración se le tributó después al
Emperador romano en las provincias orientales del
Imperio, y, así, se dice en una inscripción de Priene en
30. Asia Menor, del año 9 a. C , que el natalicio del
dios había sido para el mundo el comienzo de las
buenas nuevas («evangelios») que por él se habían
difundido. Después del natalicio vienen otros
«evangelios», como la declaración de mayoría de edad,
la entronización y los éxitos del soberano, que eran
alabados en todo el Imperio.
A diferencia del concepto de «evangelio» y
«evangelizar» que existía en el mundo helenístico, la
comunidad cristiana proclama que no hay más que un
solo evangelio (Gal 1,6-9), el mensaje sobre el Cristo
crucificado y resucitado (1 Cor 15,3-5), quien es
31. proclamado como el Hijo de Dios y el Kyrios (Rom l,3s).
Con el nombre de «evangelio» se designa no sólo el
contenido, sino también el acto mismo de la
proclamación, como vemos claramente por la
yuxtaposición de ambas significaciones en 1 Cor 9:
«Vivir del evangelio» (v. 14) significa vivir del hecho de
proclamar el evangelio; «el derecho que me confiere el
evangelio» significa la autoridad que tiene el mensajero
del evangelio (v. 18b). Ahora bien, cuando Pablo dice
«predicar el evangelio ofreciéndolo de balde» (v. 18a)
entonces —lo mismo que en la expresión «anunciar el
evangelio» (v. 14)— se está refiriendo al contenido de la
32. buena nueva, que no debe involucrarse ni gravarse con
ninguna otra cosa. Por consiguiente, el evangelio no
sólo proporciona información de acontecimientos
pasados, sino que proclama la presencia de la salvación
y es, por tanto, acontecimiento de salvación.
35. EL CONTENIDO DEL EVANGELIO
Al contenido del mensaje que predica
acerca de Jesús como nuestro Salvador, se
le refiere como el kerygma.
Consiste de la información en cuanto a los
hechos respecto a Juan el Bautista, Jesús y
su vida y su ministerio, especialmente su
muerte y su resurrección y el significado
que tienen estos sucesos para los cristianos
y la Iglesia.
37. El Contenido de los
Evangelios
• Hch 10:34–43
Al contenido del mensaje
predicado acerca de Jesús como • Hch 2:22–28
nuestro Salvador se refiere como• Hch 2:29–36
el kerygma.
• Hch 3: 17–26
Busquen información verídica • Hch 4:8–12
de estos pasajes. Escojan una • Hch 5:29–32
persona en cada grupo para
• Hch 7:44–53
informar al resto de la clase lo • Hch 13:21–31
que se ha encontrado. Tienen
• Hch 13:32–41
diez minutos para trabajar
• 1 Co15:3–7
juntos.
38. ¿Qué temas se repiten y qué hechos
no se mencionan en cuanto a la
historia de Jesús?
39. KERYGMA:
Palabra griega que significa “lo que es
anunciado por un heraldo”, “el
mandato”, “la comunicación”. En la
mayoría de los pasajes del NT significa “la
proclamación del propósito redentor de
Dios en Cristo” (Ro. 16:25; 1 Co. 1:21;
2:4; 15:14; 2 Ti. 4:17; Tit. 1:3). DTB
40. La oferta de Dios
en cuanto a la Salvación, la vida, la
muerte, la
Resurrección de Jesús; el
llamamiento a la fe a la luz
del juicio venidero.
Encountering the New Testament
41. El Credo de los Apóstoles es un
ejemplo de cómo llegó
la Iglesia a hacer un resumen del
kerygma.
42. Creo en Dios Padre Todopoderoso,
Creador del cielo y de la tierra,
y en Jesucristo su único Hijo, Señor
nuestro;
que fue concebido del Espíritu Santo,
nació de la Virgen María,
padeció bajo el poder de Poncio Pilato;
fue crucificado, muerto y sepultado;
al tercer día resucitó de entre los
muertos: subió al cielo,
y está sentado a la diestra de Dios Padre
Todopoderoso;
43. y desde allí vendrá al fin del mundo a
juzgar a los vivos y a los muertos.
Creo en el Espíritu Santo,
la santa Iglesia universal,
la comunión de los santos,
el perdón de los pecados,
la resurrección del cuerpo y la vida
perdurable.
44. A la vinculación del kerigma con la tradición de Jesús,
tal como se estableció por vez primera en el Evangelio
de Marcos, se llegó en virtud de la reflexión teológica
de que el evangelio, que da noticia del acontecimiento
de salvación, está indisolublemente unido con la
historia de Jesús. Cuando se agruparon bajo el tema
principal del evangelio las tradiciones en las que se
narraban los sufrimientos de Jesús y sus palabras y
acciones, entonces toda la tradición acerca de Jesús
quedó sellada con la impronta del kerigma. Muy
consecuentemente, Marcos introduce su obra con las
siguientes palabras: «Comienza la buena noticia de
Jesús, el Cristo» (1,1), y con ello indica que la buena
45. nueva tiene un determinado comienzo, que coincide
con el principio de la actividad pública de Jesús. Este
principio corresponde también al esbozo que el autor
de Hechos pone El evangelio y los Evangelios en
labios de Pedro: «Vosotros sabéis muy bien el
acontecimiento que ocupó a todo el país de los judíos,
empezando por Galilea, después que Juan predicó el
bautismo. Me refiero a Jesús de Nazaret, ungido por
Dios con la fuerza del Espíritu Santo, que pasó
haciendo el bien y curando a los oprimidos por el
diablo, porque Dios estaba con él. Nosotros somos
testigos de todo lo que hizo en el país de los judíos y en
Jerusalén. Lo mataron colgándolo de un madero, pero
46. Dios lo resucitó al tercer día e hizo que se dejara ver no
de todo el pueblo, sino de los testigos que él había
designado...» (Hch 10,37-40). Si el comienzo coincide
con el bautismo de Juan y el final con la cruz y
resurrección, este marco, fijado por los acontecimientos,
se llena ofreciendo las tradiciones sobre las palabras y
hechos de Jesús siguiendo puntos de vista objetivos y
no según el orden cronológico o biográfico (cf. p. 125).
Ahora bien, los Evangelios de Mateo y Lucas, que han
tenido como modelo al de Marcos, tienen mayor
amplitud y comienzan con los relatos del nacimiento y
de la infancia y narran una historia continuada de Jesús.
47. El Evangelio de Juan comienza antes aún,
glorificando con el himno inicial al Logos preexistente.
Pero los cuatro Evangelios están de acuerdo en situar el
centro de gravedad de la exposición en la pasión y en la
pascua. Se narra la actividad de Jesús, su pasión,
muerte y resurrección para llamar e invitar a la fe (Jn
20,30s). Por eso la forma literaria del evangelio es
una creación genuinamente cristiana, de la que no
existen modelos directos en la literatura antigua.
48. Cuando en el siglo II d. C. son llamados los
Evangelios por Justino «recuerdos de los Apóstoles»
(Apol. I, 6), se está pensando —evidentemente— en
que los Evangelios contienen memorias de los
Apóstoles. Pero, de hecho, no se pueden comparar con
el género literario de las memorias, que tan difundido
estaba en el mundo antiguo, porque en los evangelios
falta toda indicación que ofrezca puntos de partida para
diseñar una «vida de Jesús».
49. c) El testimonio desarrollado por los Evangelios es
un único evangelio. Cuando, al compilar el canon, se
proveyó de epígrafes a los distintos libros, se dijo
consecuentemente: Evangelio según Mateo, según
Marcos, según Lucas, según Juan. El único evangelio
según un cuádruple testimonio: un testimonio que cada
uno de los cuatro evangelistas ofrece a su manera. El
esfuerzo del sirio Taciano de componer con los cuatro
libros una armonía de los Evangelios fue una empresa
movida por la viva persuasión de que no existe más que
un solo evangelio. Sin embargo, con la aparición de los
llamados evangelios apócrifos, a partir de mediados
del siglo II, se desplazó el interés, al asociar a los
50. materiales transmitidos por los evangelios canónicos
anécdotas legendarias, palabras apócrifas de Jesús,
historias presentadas al estilo de memorias y muchas
otras cosas, de suerte que quedó relegado el carácter
de proclamación y surgió una tradición sobre Jesús
creada libremente. La Iglesia antigua, al no reconocer
esas obras ni aceptar en el canon más que los cuatro
Evangelios, adoptó, por tanto, una decisión muy bien
fundada.
51. En el siglo II se operó un cambio en la manera de
expresarse, ya que Justino, Ireneo y otros no sólo
hablaban del único evangelio, sino que también
llamaban evangelios a los escritos que informaban
acerca de la predicación, pasión y resurrección de
Jesús, de suerte que desde entonces se empezó a
hablar de cuatro Evangelios. Y con ello se empleó
el concepto de «evangelio» para designar a los cuatro
libros recibidos en el canon, como testimonios que son
de la historia de Jesús.
54. Justino Martir en 155 d.de C. les llama
“Memorias”. Los Evangelios caben
mejor dentro de la categoría antigua de
la biografía, pero en realidad son una
subcategoría de esta forma.
55. Las biografías modernas usualmente
empiezan por el relato de la niñez del
protagonista y progresan sucesivamente
por la juventud y la madurez para mostrar
cómo se ha desarrollado la persona madura
al responder a las varias influencias de la
vida temprana y al medio ambiente. Son,
generalmente, muy sicológicos, y
sociológicos, o muestran cómo la historia
influyó al desarrollo del protagonista. Los
Evangelios son muy diferentes de las
biografías.
56. Los estudiosos han buscado otro término
que ―historia‖ o ―biografía‖ para caracterizar
la forma o el género de los Evangelios.
Algunos han sugerido ―aretalogías‖ que
son relatos grecorromanos de la vida de un
héroe griego que por lo general era hijo de
algún dios y de una virgen humana. Otros
prefieren el lenguaje del teatro, refiriéndose
a los Evangelios como dramas. Algunos ponen
énfasis en usar el A. T. y caracterizar los
Evangelios como midrash o comentarios del
Antiguo Testamento.
58. Los cuatro Evangelios son primeramente
testigos en cuanto a Jesús. Su énfasis principal
es la última semana de la vida de Jesús. Esta
semana está precedida por los informes sobre
la enseñanza de Jesús y las narraciones de unos
pocos sucesos de los tres años previos a su
muerte. No hay discusión, en realidad, sobre su
niñez y su juventud, ni, especialmente, sobre
cómo éstas influyeron en lo que Él llegó a ser.
Son testimonios sobre quién era Jesús aun
desde el mismo principio de su vida.
60. Los autores de los Evangelios
fueron evangelistas y por lo tanto se
interesaban primeramente en cómo
entregar el mensaje acerca de Jesús
a sus propios contemporáneos, y
secundariamente, en cómo escribir
una biografía.
62. Los incidentes de la vida de Jesús se usan
como ilustraciones apropiadas para explicar los
puntos teológicos. Incorporan incidentes que
se escuchaban dentro de la predicación de los
apóstoles. Por ejemplo, Papias, uno de los
líderes de la iglesia primitiva, consta que el
Evangelio de Marcos está tomado de las
primeras predicaciones de Pedro.
Algunos de los detalles que nos gustaría
saber, por ejemplo, detalles de su niñez, cómo
se parecía, no tienen relación a ―Ganar a otras
personas a la fe en su Señor.‖ Pues los autores
de los Evangelios no los incluyeron.
64. Generalmente nos referimos a esto como el
“contenido teológico” o “la perspectiva del
escritor.”
Para comprender las historias siempre
debemos tratar de relacionarlas al propósito
del autor o su teología. Es imposible alcanzar
a tener un cuadro del galileo simple, porque,
por cuánto nos metamos en el trasfondo,
Jesús está allí haciendo grandes reclamos por
sí mismo y contándoles a los hombres y a las
mujeres cómo deben ellos relacionarse con
Dios
65. Por causa de que éstas son narrativas
selectivas, nosotros podemos descubrir
algunas cosas respecto al autor y al
auditorio al comparar lo que han
seleccionado unos, como importante,
con lo que han seleccionado los otros
Evangelios, especialmente Mateo,
Marcos y Lucas.
¿Cómo describen los escritores mismos lo
que están haciendo? Vayamos a la biblia:
66. Marcos 1:1 “Principio del Evangelio de
Jesucristo, Hijo de Dios...”
Lucas 1:3–4: “Me ha parecido también a
mí después de haber investigado con
diligencia todas las cosas desde su
origen, escribirlas por orden,
excelentísimo Teófilo, para que conozcas
bien la verdad de las cosas en las cuales
has sido instruido.”
67. Juan 20:30–31 “Hizo además Jesús muchas
otras señales en presencia de sus discípulos,
las cuales no están escritas en este libro. Pero
éstas se han escrito para que creáis que Jesús
es el Cristo, el Hijo de Dios, y para que
creyendo, tengáis vida en su nombre.”
Mateo no es tan directo en cuanto a los
porqués. Él empezó diciendo “Libro de las
generaciones de Jesucristo, hijo de David, hijo
de Abraham (1:1). Más tarde en este capítulo
dice, “El nacimiento de Jesús fue así:” (1:18).
68. Marcos 1:1 “Principio del Evangelio de
Jesucristo, Hijo de Dios...”
Evangelio quiere decir evangelion que
quiere decir “Buenas Nuevas.”
“Principio” Ésta es la primera etapa del
desarrollo del mensaje. Esta historia es una
parte íntegra e importante de la experiencia
cristiana de Marcos. Era la primera etapa del
desarrollo del mensaje al cual él y otros
habían respondido y le habían entregado su
vida.
69. Lucas 1:3–4: “Me ha parecido también
a mí después de haber investigado con
diligencia todas las cosas desde su
origen, escribirlas por orden,
excelentísimo Teófilo, para que conozcas
bien la verdad de las cosas en las cuales
has sido instruido.”
Él escribe para que sus lectores puedan
saber las implicaciones plenas del
mensaje cristiano que ellos habían oído
tantas veces.
70. Juan 20:30–31 “Hizo además Jesús
muchas otras señales en presencia de sus
discípulos, las cuales no están escritas en
este libro. Pero éstas se han escrito para
que creáis que Jesús es el Cristo, el Hijo
de Dios, y para que creyendo, tengáis
vida en su nombre.”
¡Juan nos da la historia de Jesús para
que nosotros podamos CREER y para que
tengamos VIDA!
71. Su razón aparente es la de dar un relato
detallado y correcto de la vida de Jesús para
un auditorio judío cristiano. Esto hace
resaltar el punto clave que, cuando se
estaban escribiendo estos Evangelios, los
testigos presenciales empezaban a fallecer y
la iglesia estaba creciendo explosivamente.
La mejor manera de esparcir la historia de
Jesús al mayor número de personas sería
ponerla en forma escrita.
73. ¿De dónde consiguieron los evangelistas su
información? ¿Cuáles fueron las fuentes que
usaron?
1. Narraciones de testigos presenciales de
parte de testigos oculares vivientes
inclusive ellos mismos.
2. Textos del Antiguo Testamento—
“testimonia”
74. Estas son listas de pasajes del A.T. que el
Mesías cumpliría al venir. La gente de Qumran
guardaba tales listas y también lo hacían otros
grupos judíos. Mateo, Juan y Pablo usan citas
del Antiguo Testamento extensivamente. Es
posible que el coleccionar tales listas haya sido
una de las primeras actividades literarias de la
Iglesia Cristiana primitiva.. Se juntaban para
facilitar a los predicadores cristianos para
apoyar su afirmación que Jesús había cumplido
las promesas del A.T. respecto al Mesías.
75. 3. Las Palabras de Jesús—“logia”
Estas son colecciones de los dichos de Jesús.
Se juntaban para diferentes propósitos y
diferentes ocasiones. Es probable que había
varias colecciones diferentes que estaban
usándose en diferentes áreas del Imperio
Romano. Tenemos referencias que se refieren a
colecciones de los dichos de Jesús como por
ejemplo por Papias. Cerca de 130 – 140 d. de
Cristo, escribió este libro en 5 tomos, donde él
dice que compiló la logia en el lenguaje
hebreo.
76. Mateo y Lucas tienen porciones grandes de las
enseñanzas de Jesús que están ausentes en
Marcos. Mateo y Lucas tuvieron acceso a una
logia que no tuvo Marcos.
Los estudiosos llaman a esta logia ―Q‖ que
proviene de la palabra alemana ―Quelle‖ que
quiere decir ―fuente‖. Ha sido largo el debate
sobre si fuera una fuente oral o escrita. Los
estudiosos están en división en cuanto a esto
pero la mayoría parece creer que era un
documento escrito que circulaba entre los
cristianos primitivos.
77. LOS SINOPTICOS Y SUS
METODOS DE ESTUDIO
LA IMPORTANCIA DE LA CRITICA
Friday, March 07, 2014
78. LA CRITICA
La Biblia es tanto la Palabra de DIOS
como las palabras de los hombres. La
Biblia no es un deposito mágico, un libro
enviado desde el cielo, ni es un simple
registro de una rama de la historia
antigua, y por consiguiente, meramente
el producto de influencias históricas.
79. La Biblia es la Palabra de Dios; pero es la
Palabra de Dios que registra eventos en la
hístoría. Puesto que la Biblia es en sí misma el
producto de la acción de Dios en los
acontecimientos históricos requiere de un
estudio crítico e histórico para reconstruir,
tanto como sea posible, los hechos históricos a
través de los cuales se produjo la revelación
80. CRITICA
No significa sentarse a juzgar la Biblia como
;la palabra de Dios.
Critica significa hacer juicios inteligentes
acerca de asuntos o preguntas históricas,
literarias, textuales y de forma que uno debe
confrontar cuando se estudia la Biblia a la luz
de toda la evidencia posible.
81. CRITICA
Critica viene del griego krisis, que
simplemente significa “Juicio”. Un critico, en
el sentido mas amplio, es una persona que
hace juicios o decisiones inteligentes acerca
de preguntas importantes asociadas con los
libros de la Biblia.
82. No ser critico significa ignorar
justamente las dimensiones históricas de la
Biblia y mirarla como un libro mágico. Si la
Biblia ha venido a nosotros a través de
hechos, personas y situaciones históricas,
la critica es necesaria para entender el
proceso histórico a través del cual le ha
placido al Dios soberano hacer realidad
tanto su auto-revelación como la salvación
de los hombres.
83. La crítica del NT consiste en formar
juicios acerca de los asuntos históricos,
literarios, textuales o filológicos en base
a los datos disponibles. La ciencia no
requiere ni excluye la fe en Dios y en el
carácter sobrenatural de la Palabra de
Dios.
84. Quienes insisten en que la Biblia es
solamente palabra de hombre, tienden a
censurar la veracidad y autenticidad de los
documentos. Los que aceptan la Biblia
como la Palabra de Dios, se someten a su
autoridad y usan la crítica para comprender
mejor cómo les llegó la Palabra y qué
significa.
85. Principales métodos de la Critica
Crítica
textual
Crítica Redacccion
Crítica de forma
Critica de las fuentes
Friday, March
07, 2014
85
86. Crítica textual
Es
el estudio de las numerosas
variantes que hay en el texto
de la Biblia y al esfuerzo por
recuperar el texto 'orígínal.
87. La crítica textual compara los miles de
manuscritos de los documentos del NT
para identificar y eliminar los errores de
los copistas en el texto griego. Aunque
la tarea no se ha terminado, tenemos la
Palabra de Dios en una forma confiable
y notablemente fiel a los documentos
como fueron entregados por Dios y sus
siervos.
88. La "crítica textual", involucra el estudio y la
comparación de los manuscritos existentes, la
determinación de la relación histórica y geográfica
que pueda haber entre ellos y - más importante aún
- el desarrollo y la aplicación de criterios y técnicas
para determinar, hasta donde sea posible, cuál fue
el texto original de la Biblia.
La necesidad que hay de este estudio se basa
en dos asuntos bien conocidos en lo que a la
transmisión del texto sagrado se refiere:
89. (1) Han desaparecido todos los autógrafos de la
Biblia;
(2) Antes de la invención de la imprenta a mediados
del siglo XV, cada copia se hacía con mucho trabajo
a mano.
Las copias de los autógrafos se convirtieron a su
vez en originales para otras copias, y así
sucesivamente. Durante este proceso de copiar y
copiar de nuevo inevitablemente se introdujeron
errores de copia en las Sagradas Escrituras.
90. Estos errores de copia han suscitado un serio
problema para los que estudian la Biblia: donde
aparecen variantes - es decir, donde aparecen en
los manuscritos diferentes palabras o frases en
un mismo pasaje -, ¿cuál es el texto correcto?,
¿qué decía exactamente el original?
Esta pregunta es la que tratan de responder
los especialistas en crítica textual. Se esfuerzan por
proporcionar al estudiante de la Biblia el texto
más digno de confianza que sea posible, a pesar
de las limitaciones que presenta la falta de
documentos originales.
91. Estos errores de copia han suscitado un serio
problema para los que estudian la Biblia: donde
aparecen variantes - es decir, donde aparecen en
los manuscritos diferentes palabras o frases en
un mismo pasaje -, ¿cuál es el texto correcto?,
¿qué decía exactamente el original?
Esta pregunta es la que tratan de responder
los especialistas en crítica textual. Se esfuerzan por
proporcionar al estudiante de la Biblia el texto
más digno de confianza que sea posible, a pesar
de las limitaciones que presenta la falta de
documentos originales.
92. La Crítica textual es la primera de las tareas de
la exégesis bíblica: conseguir un texto lo más
correcto posible. «Los que desean conocer las
Sagradas Escrituras deben, ante todo, estar en
vigilante alerta a corregir los códices, para que los
no correctos cedan ante los correctos» (S. Agustín,
De doctrina cristiana, 2,21: PL 34,46). El exegeta
debe tener en cuenta las conclusiones ciertas de la
crítica textual, ya que únicamente son inspirados
los autógrafos, tal como salieron de mano de sus
autores y fueron recibidos por la Iglesia, y los
apógrafos, en cuanto reflejan el texto original.
93. Ciertamente la fe nos garantiza que los libros
sagrados se han conservado siempre en la Iglesia
íntegros en su sustancia; pero pueden haberse
introducido adulteraciones en cosas accidentales. De
ahí la conveniencia de un trabajo encaminado a
obtener un texto críticamente lo más perfecto
posible.
De todas formas conviene aclarar que la dedicación
de los exegetas a la crítica textual no es para ellos un
fin en sí mismo, sino un medio para conseguir el fin,
que consiste en captar en toda su profundidad el
mensaje divino expresado por palabras humanas.
94. Crítica de Redacción
La crítica de redacción trata de
contestar las preguntas que confundían
a la crítica de forma. El énfasis pasó de
los fragmentos de forma a los objetivos
y propósitos de los evangelistas
individuales. Reaparece la posibilidad de
un hombre con mensaje y método.
95. Quienes niegan lo sobrenatural
han de aceptar que los libros del NT
fueron escritos por brillantes
autores. Los creyentes cristianos
pueden identificar a los escritores
como testigos fieles que hablaron de
Jesucristo por inspiración del Espíritu
Santo.
96. La crítica de la redacción de los sinópticos se
basa en la aceptación de la hipótesis de dos
fuentes, asignándole prioridad a Marcos.
Entiende que Mateo y Lucas en forma
independiente usaron la obra de Marcos y la
hipotética fuente Q.
La crítica de la redacción de Mateo y Lucas
no se preocupa tanto de lo que los dos creen,
sino en las diferencias que hay entre las ideas
de los dos. Según los críticos de la redacción,
la teología exclusiva de cada autor es
evidente, y se encuentra en las costuras que
97. unen los diversos dichos o perícopas, en
comentarios interpretativos y resúmenes, en la
modificación, selección y omisión o añadido de
materiales, en las introducciones y
conclusiones, en el vocabulario, en la
selección de títulos cristológicos y en otros
asuntos de este tipo.
H.Conzelmann estudió el marco de Lucas
usando el método de la crítica de la redacción,
y afirmó que en la forma como Lucas usó las
fuentes y en sus diferencias con respecto a
Marcos, podía verse su inclinación teológica.
98. Basado en esto Conzelmann dijo que Lucas
había eliminado la expectación del inminente
retorno de Cristo, y que en su lugar Lucas
colocó una historia de la salvación en tres
etapas: (1) la edad de Israel, (2) la edad de
Jesús, y (3) la edad de la iglesia. La edad de
Jesús -una etapa libre de los ardides de
Satanás- ocurre entre la tentación y el
momento cuando Satanás se posesionó de
Judas (Lucas 4: 13; 22: 3). La reacción de los
eruditos a la reconstrucción de Conzelmann ha
sido extensa y mayormente negativa.
99. Un ejemplo de cómo la crítica de la redacción
trata un pasaje bíblico puede verse en relación con
Mateo 28: 16-20. No hay paralelo directo con los
otros sinópticos, aunque existe la idea de la
comisión evangélica. Los eruditos no han podido
ponerse de acuerdo en cuanto a si Mateo inventó
este pasaje para adelantar su propio entendimiento
teológico, o si antes de Mateo pudo existir la
tradición de una comisión evangélica. Si hubo esta
protocomisión, entonces no fue lo que Jesús dijo, y
por lo tanto estaba a un paso del original.
100. La crítica de la redacción indica que Mateo, para
promover sus propias ideas sobre cristología,
eclesiología y escatología, añadió a la
protocomisión la declaración de autoridad (vers.
18b), la promesa de la presencia constante de
Jesús (vers. 20b) y la información geográfica (vers.
16), y que de otras tradiciones introdujo la triple
fórmula bautismal (vers. 19b), creando así un gran
resumen de su propia comprensión del Evangelio.
101. Crítica de Forma
La crítica de forma trata de identificar las
fuentes estudiando la forma de los
fragmentos de datos del evangelio y
reconstruyendo los documentos que
pudieron estar disponibles a los
compiladores de los evangelios.
102. La crítica de las formas de los sinópticos nació
alrededor de 1920. K. L. Schmidt publicó un estudio
en el cual afirmó que los Evangelios sinópticos eran
colecciones estilo mosaico, de episodios cortos e
independientes de la vida de Jesús, los cuales habían
circulado como unidades independientes antes de
haber sido escritos; pero que pocas de estas unidades
tenían alguna indicación del lugar o del tiempo de su
origen. Marcos habría proporcionado el marco de
eslabones conectores y resúmenes, y de ese modo
suplió la situación en la vida de la iglesia, la cual
conservó, adaptó y amplió esos relatos para fines
litúrgicos, pastorales y misioneros.
103. Poco más o menos en ese mismo tiempo Martín
Dibelius (1883-1947) propuso que la tradición de la
iglesia primitiva fue modelada por las necesidades de
la actividad misionera. Antes de que surgiera esa
necesidad en la iglesia, no había habido Evangelios
sino sólo cortos párrafos o perícopas. La iglesia no
estaba pensando en biografía ni en historia cuando
compuso los Evangelios; sólo buscaba una manera
de convertir a los no creyentes. Dibelius encontró en
los sinópticos una serie de formas: paradigmas,
novelas, leyendas, mitos y el relato de la pasión.
104. El tercero de los padres de la crítica de las formas
fue Rudolf Bultmann, cuya Historia de la tradición
sinóptica se publicó en 1921. En ésta -la más
ambiciosa y controversias de las tres obrassistemáticamente dividió el material de los sinópticos
en apotegmas, dichos del Señor, milagros, relatos
históricos y leyendas. Bultmann expresó gran
escepticismo en cuanto a la confiabilidad histórica del
material evangélico, asignando la mayor parte del
mismo a la imaginación creativa de las primitivas
comunidades cristianas.
105. Tanto Dibelius como Bultmann escribieron sobre la
vida de Jesús, es decir, sobre los "hechos" y las
"palabras" de Jesús. Concordaron en que nunca
podría escribirse una biografía, puesto que las
informaciones cronológicas y geográficas existentes
carecían de valor. La influencia de estos eruditos
sobre la crítica de las formas aún se deja sentir.
106. El norteamericano B. S. Easton presentó
conferencias sobre el mismo tema en 1928. Subrayó
la importancia de la tradición oral y empleó las
categorías de la crítica de las formas. Sin embargo,
afirmó que el método no podía dar ninguna
información en cuanto a la veracidad de los eventos
narrados.
107. En 1933 el erudito británico V. Taylor entró en
escena, aceptando la presuposición básica de que la
tradición evangélica primero había circulado en
pequeñas unidades aisladas. Queriendo reconocer un
elemento divino en los Evangelios, sin conceder que
habían sido salvaguardados en forma sobrenatural
durante el período de la transmisión oral, escribió:
"Pero vemos que [los Evangelios] llegaron a existir en
formas humanas, que en su sabiduría Dios no vio
necesario salvaguardarlos por medio de medidas
protectoras, sino que los dejó libres para que solos
hicieran su propia conquista" (The Formation of the
Gospel Tradition, p. 2).
108. Crítica de Fuente
La crítica de las fuentes trata de
descubrir los datos disponibles a los
escritores de los documentos del NT. Los
estudios literarios e históricos crean e
ilustran una variedad de hipótesis. Muchas
teorías están en desacuerdo con la
comprensión tradicional de la Escritura y
con el testimonio de los padres de la
iglesia.
109. Al parecer, San Agustín (m. 430 d. C.) fue el primero
en comentar el parecido entre los Evangelios
sinópticos. En su obra De consensus evangelistarum
sugirió que Mateo había sido el primero y que Marcos
era una abreviación de Mateo. Dijo además que Lucas
era el más reciente de los Evangelios.
La crítica de las fuentes ha realizado desde el siglo
XIX vigorosos intentos para resolver el
problema sinóptico: dilucidar cuál fue el primer
Evangelio y cómo y por qué los otros evangelistas lo
copiaron.