El movimiento Art Nouveau se extendió por Europa y América en la década de 1890, alcanzando su apogeo en 1900. Busca expresar ideales comunes a través de una decoración alternativa que restaura el equilibrio entre las artes y los oficios. Se inspira en el arte y artesanía inglesa, el simbolismo, el arte japonés y elementos naturales como flores. Se caracteriza por formas orgánicas, líneas curvas y detalladas, y representaciones sensuales de la mujer.