El documento describe tres modelos pedagógicos: el modelo tradicional, el modelo de escuela activa, y el modelo constructivista. El modelo tradicional se centra en la transmisión de conocimientos de manera acumulativa. El modelo de escuela activa ve al estudiante como constructor de su propio conocimiento a través de la experimentación. El modelo constructivista sostiene que el conocimiento se construye individualmente y que el aprendizaje depende de las ideas previas del estudiante.