Un muchacho provocó una explosión en el ascensor de un edificio al encender un cigarrillo con una botella de petróleo. Cuando el ascensor llegó al cuarto piso, explotó la botella e inició un incendio. El chico logró salir a tiempo y huyó del lugar sin identificarse. Los vecinos trataron de apagar el fuego hasta que llegaron los bomberos para sofocar las llamas que amenazaban con extenderse a los pisos superiores.