Las convulsiones febriles son convulsiones que ocurren en niños sanos entre 9 meses y 5 años debido a la fiebre, generalmente causada por infecciones comunes. La mayoría de las convulsiones febriles duran menos de 15 minutos y no causan daños, aunque pueden ser aterradoras para los padres. Aunque raras, las convulsiones febriles prolongadas o repetidas requieren atención médica para descartar otras causas.