Este documento discute los desafíos constantes que enfrentan los maestros debido a los rápidos avances tecnológicos y cómo deben mantenerse actualizados a través de la investigación constante. También destaca la importancia de que los maestros usen herramientas tecnológicas como blogs y plataformas virtuales para motivar a los estudiantes y facilitar su labor docente. Finalmente, el autor agradece la oportunidad de capacitarse para innovar sus conocimientos y métodos de enseñanza.

1. SER MAESTROS, UN RETO QUE REQUIERE CONSTANTE INVESTIGACIÓN.
Escrito por el Licenciado Andrés Guillermo Hoyos Marín
“El niño no es una botella que hay que llenar;
sino un fuego que es preciso encender”
MONTAIGNE
El mundo está en constante evolución y día a día los avances científicos y
tecnológicos nos sorprenden por todas las cosas que pueden hacer por nosotros. Es
evidente la importancia que tiene el uso de las TIC en nuestro papel como docentes
y como nos vemos en la necesidad de actualizarnos día a día, ya que nuestros
estudiantes van un paso más adelante que nosotros y no podemos quedarnos
rezagados en esta realidad. “La educación es un arte cuya práctica debe ser
perfeccionada a lo largo de las generaciones. Cada generación instruida por los
conocimientos de las precedentes es siempre más apta para establecer una
educación que desarrolle de manera final y proporcionada todas las disposiciones
naturales del hombre y que así conduzca a la especie humana hacia su destino”.1 Es
ahí que adquirimos una responsabilidad y casi un deber el estar en continua
capacitación y estar buscando alternativas que se encuentran a la par con las
necesidades, preferencias y gustos de nuestros educandos. Por estas razones es que
la pedagogía tradicional ha sido cuestionada, ya que se buscan nuevas alternativas y
estrategias para llegar a los estudiantes, intentando lograr un aprendizaje significativo
para ellos.
Por eso es importante que los maestros seamos personas inconformes e insaciables
con lo que sabemos, que tengamos una mentalidad abierta asequible a todo tipo de
innovaciones y que aprovechemos este tipo de capacitaciones y actualizaciones para
que seamos multiplicadores de todos estos conocimientos en nuestra aula de clase,
para ello es necesario que los docentes rompan paradigmas, salgan de su estado de
confort y acepten todos estos cursos con una buena voluntad y que no se convierta
para ellos en una camisa de fuerza impuesta por la Institución.
1 Immanuel KANT. En: El Valor de Educar. Editorial Ariel.Barcelona,1997.Pág.201.

2. El programa tit@ ha aportado muchas herramientas tecnológicas en mi labor como
docente y me ha permitido integrar el uso de las TIC en el desarrollo de mis clases.
He aprendido como desde la elaboración de un blog puedo incentivar y motivar a mis
estudiantes a que vean de una manera diferente su proceso de aprendizaje, y también
pude comprobar como los programas slideshare, powtoon, timerime, cacoo, tagul,
blogger, youtube y la plataforma virtual calieducadigital.com, han facilitado mi labor
como docente, brindándome múltiples herramientas para la preparación de mis
clases.
Considero que es necesario que todos los docentes aprovechen esta capacitación y
que sean multiplicadores de este
Para finalizar, agradezco al Ministerio de Educación Nacional, a la Secretaría de
Educación Municipal de Santiago de Cali, a la Universidad del Valle y a la docente
María Isabel Morán por la oportunidad que he tenido de innovar mis conocimientos y
adquirir nuevas herramientas tecnológicas para implementar en el aula de clase con
mis estudiantes. Citando a Fernando Savater en su libro El valor de Educar (1997)
cuando se refiere al valor y al coraje que debemos tener los maestros para afrontar
tan noble labor al educar una sociedad exigente, pero desorientada. Quiero que
aprovechemos esa fortaleza para asumir nuevos retos y estar dispuestos a innovar,
porque en el tema de la educación todavía no se ha escrito la última palabra.
BIBLIOGRAFÍA
SABINO, Carlos A. El Proceso de Investigación. Editorial Panamericana. Santafé de
Bogotá, 1997. Pág. 184.
SAVATER, Fernando. El Valor de Educar. Editorial Ariel. Barcelona, 1997. Pág. 222.