El documento presenta un decálogo de 10 puntos para el buen trato de los menores, incluyendo expresar amor diariamente, escucharlos con atención, aceptarlos tal como son, reconocer sus cualidades, ayudarlos a resolver conflictos mediante el diálogo, dedicarles tiempo para la diversión, enseñar con el buen ejemplo, estimular el aprendizaje, conocer y respetar sus derechos, y dialogar para fortalecer sus valores.