El design thinking es una metodología para generar ideas innovadoras centrada en entender las necesidades de los usuarios. Se desarrolló en 2008 y sigue un proceso de 5 fases: empatía con los usuarios, definición del problema, ideación, prototipado y prueba. No es un proceso lineal sino que permite ir hacia adelante y atrás entre las fases. Empresas como Zara lo utilizan para desarrollar nuevos modelos de negocio centrados en las necesidades de los clientes.