La educación indígena debe ser bilingüe, enseñando tanto la lengua indígena como el español. El objetivo es que los estudiantes sean bilingües y aprendan ambos idiomas. Sin embargo, la diversidad lingüística plantea desafíos para la educación bilingüe, ya que las lenguas maternas de los estudiantes tienen muchas variaciones orales y escritas. Para usar una lengua en la enseñanza, se necesita normalizarla y desarrollar materiales en ella, lo que representa un gran reto