El documento describe dos tipos de resistencia física: la resistencia aeróbica, que permite mantener un esfuerzo de intensidad media o baja con oxígeno suficiente entre 120-170 pulsaciones por minuto, como caminar o nadar; y la potencia anaeróbica, que permite esfuerzos de alta intensidad hasta 220 pulsaciones por minuto por menos de 3 minutos, desarrollando resistencia, potencia y velocidad muscular sin quemar grasa.