La evaluación de riesgos es un proceso obligatorio para las empresas que busca identificar peligros y riesgos en el entorno laboral mediante el análisis detallado de todos los aspectos del trabajo, con el fin de proteger la seguridad y salud de los trabajadores. Este proceso incluye la identificación de peligros, la evaluación de riesgos, la documentación de hallazgos y medidas correctivas, y la revisión periódica para actualizar la evaluación.
2. ¿Qué es?
La evaluación de riesgos: Es la actividad fundamental que la Ley
establece que debe llevarse a cabo inicialmente y cuando se efectúen
determinados cambios, para poder detectar los riesgos que puedan existir
en todos y cada uno de los puestos de trabajo de la empresa y que puedan
afectar a la seguridad y salud de los trabajadores.
Es la disciplina que busca promover la seguridad y salud de los
trabajadores mediante la identificación, evaluación y control de los
peligros y riesgos asociados a un entorno laboral, además de fomentar el
desarrollo de actividades y medidas necesarias para prevenir los riesgos
derivados del trabajo.
3. ¿Para que sirve?
La evaluación de riesgos no es un fin en sí misma. Es un
medio para alcanzar un fin: controlar los riesgos para evitar
daños a la salud derivados del trabajo (accidentes y
enfermedades profesionales) ahorrando costos sociales y
económicos al país y a su propia empresa.
La evaluación de riesgos es una tarea que debe ser llevada a
cabo por personas que tengan la formación legalmente
requerida y que sean trabajador designado por la Dirección de
la empresa o formen parte del Servicio de prevención propio o
ajeno.
4. ¡objetivos!
La evaluación de riesgos laborales es una obligación empresarial y una
herramienta fundamental para la prevención de daños a la salud y la seguridad de
los trabajadores.
Su objetivo es identificar los peligros derivados de las condiciones de trabajo para:
eliminar de inmediato los factores de riesgo que puedan suprimirse fácilmente,
evaluar los riesgos que no van a eliminarse inmediatamente, y
planificar la adopción de medidas correctoras.
Su núcleo central consiste en examinar detalladamente todos los aspectos del trabajo
que puedan causar daños a los trabajadores. Este examen no estará completo si no
recoge la opinión de los trabajadores, porque son los y las que mejor conocen su
puesto de trabajo.
5. LA EVALUACIÓN DE RIESGOS LABORALES ENGLOBA LOS
SIGUIENTES PASOS:
Identificar los peligros presentes, por áreas y/o por puestos de trabajo.
Identificar quién puede sufrir daños, contemplando la posibilidad de
que haya colectivos especialmente sensibles a determinados riesgos.
Evaluar los riesgos e identificar medidas que se deben adoptar.
Documentar los hallazgos, detallando las medidas ya adoptadas y las
pendientes.
Planificar las medidas pendientes e implementarlas.
Revisar la evaluación y actualizarla cuando sea necesario.
6. En la evaluación de riesgos deberían considerarse tres fases: Preparación, Ejecución y Registro documental.
Preparación: Habría que determinar:
Quién va a realizar la evaluación ( el servicio de prevención si existe, los trabajadores designados, etc.) y
proporcionarle la formación, la información y los medios para llevarla a cabo de manera eficaz.
Cómo va a realizarla, qué procedimiento va a seguir, qué plazo tiene para concluirla, etc.
Qué mecanismos de control va a aplicar para comprobar que la evaluación realizada es operativa y eficaz.
Ejecución: Habría que revisar con especial atención:
Las instalaciones, las máquinas, los equipos, las herramientas y los productos empleados.
El entorno del lugar de trabajo.
La formación del personal y las pautas de comportamiento a la hora de realizar las tareas.
La adecuación de las medidas preventivas y de los controles existentes.
Registro documental: En la última fase ya se habrá concluido la actividad en el lugar de trabajo, teniendo
que registrar documentalmente todo lo observado en los diferentes puestos y tareas analizadas para facilitar
el seguimiento por quien corresponda. Una vez concluida la evaluación se deberán mostrar los resultados a
los trabajadores afectados para que estén debidamente informados sobre los riesgos existentes y las
medidas que deben adoptar para evitarlos.
7. Motivaciones para la prevención de riesgos laborales
Reivindicaciones de los trabajadores en favor de la mejora de sus condiciones de vida y de
trabajo.
Consideración del trabajador como un ser humano y no como mero factor productivo, y
conciencia del valor de la dignidad humana.
Integración del trabajador en la empresa.
Asunción por los empresarios del deber de seguridad hacia los trabajadores.
Concienciación de la importancia de la seguridad y salud de los trabajadores como medio de
mejora de la empresa.
Existencia de una normativa legal que impone unas condiciones mínimas.
Costes reparadores de daños al trabajador en caso de accidente o enfermedad profesional.
Costes ocultos, difícilmente cuantificables, que afectan a la productividad y a la imagen de la
empresa.