6. A través de las fibras aferentes viscerales aporta
información, es integrada al SNC,
desencadenando reflejos viscerales o somáticos.
Los reflejos viscerales regulan la presión
sanguínea y química orgánica alterando:
frecuencia cardiaca y respiratoria y la resistencia
vascular.
La sensibilidad visceral a niveles conscientes se
percibe como dolor, que se localiza mal, o se
siente como calambres o sensaciones de hambre,
estar lleno o nauseas.
7. Las sensaciones viscerales reflejas y algo de dolor
viajan en fibras aferentes viscerales que acompañan a
las fibras parasimpáticas de manera retrograda.
Los impulsos viscerales del dolor viajan
centrípetamente a lo largo de fibras aferentes
viscerales que acompañan a las fibras simpáticas.
8. Puede despertar verdadero dolor una
estimulación adecuada como:
Distención súbita.
Espasmos o contracciones intensas.
Irritantes químicos.
Manipulación mecánica.
Condiciones patológicas.