La transmisión de infecciones durante el embarazo puede ocurrir a través de la sangre, el canal de parto o de forma ascendente. Estas infecciones comparten síntomas como retraso en el crecimiento intrauterino, hepatoesplenomegalia, ictericia, coriorretinitis, lesiones óseas, anemia y trombocitopenia. La gravedad de la enfermedad en la madre y el feto depende de si la madre tiene el sistema inmunológico comprometido o si ya había tenido la infección anteriormente