El documento presenta una discusión sobre la corresponsabilidad en la construcción de la ciudadanía desde la primera infancia. Habla sobre la dignidad como elemento fundacional de lo humano, las necesidades básicas humanas como punto de partida para el diseño de políticas públicas, y la importancia de romper con modelos educativos poco afortunados para promover la autonomía progresiva en los niños. También analiza el cambio necesario del paradigma de riesgo al de promoción del desarrollo, y el niño como portador de derechos con el estado como garante