El documento describe el asesinato de un oficial de policía de 22 años llamado Kelvin Leonel Perero Acosta. Su familia cree que su ex pareja es responsable porque lo había amenazado de muerte meses atrás durante una discusión. El oficial fue encontrado muerto en su residencia alquilada, esposado y con los pies atados. La ex pareja fue detenida para ser interrogada. La familia del oficial lo describe como un hombre intachable que dejó una hija y se había unido a la policía a los 18 años.