Este documento describe un peine decorado con líneas en zig-zag hallado en una necrópolis en Carmona, Sevilla del siglo VII-VI a.C. El peine tiene una forma rectangular con una sola fila de púas y un asidero decorado con líneas en zig-zag e imágenes de leones, ciervos, esfinges y grifos. Estos peines funerarios con decoraciones complejas demuestran su gran valor cultural.