La planificación fiscal es un proceso que consiste en utilizar estrategias legales para maximizar los ingresos, reducir los costos y aumentar la rentabilidad de una empresa. Tiene como objetivo optimizar la carga tributaria de una empresa a lo largo del tiempo mediante el uso de deducciones y beneficios fiscales permitidos por la ley. Algunas ventajas incluyen el pago adecuado de impuestos, diferimiento de pagos y evitar sanciones.