El documento enumera varias habilidades que una persona debería aprender para trabajar en el siglo XXI, incluyendo la comunicación efectiva, el uso de herramientas tecnológicas, la motivación personal, el dominio de varios idiomas, la expresión de opiniones y la toma de decisiones, el trato con diferentes personas, la responsabilidad, los valores y la adaptación a diferentes entornos laborales.