Entre 1880 y 1916, Argentina experimentó un período de progreso conocido como la "Argentina Moderna", con un modelo agroexportador y liberal que impulsó el crecimiento a través de la exportación de materias primas. La llegada masiva de inmigrantes europeos aumentó la población y la mano de obra, aunque muchos inmigrantes tuvieron dificultades para adquirir tierras. Además, la estructura conservadora no permitió la participación democrática, lo que generó tensiones sociales que finalmente llevaron a la ley