La ruta auditiva tiene una implicación directa en el desarrollo del lenguaje, aspectos cognitivos y aprendizaje. Un entrenamiento sistemático de la ruta auditiva de forma temprana puede prevenir y corregir dificultades como el TPAC, TEL, dislexia y TDAH. Un programa de entrenamiento de la ruta auditiva debe ser multiprofesional e incluir observación del comportamiento del sujeto, y puede llevarse a cabo de forma preventiva o reeducativa.